Música

Escalas destacadas en la nueva programación de la ROSS

La temporada diseñada por Juan Luis Pérez intenta combinar excelencia con popularidad, con el mismo propósito y fórmula que ediciones anteriores, aunque no hayan dado los frutos pretendidos

Juan Luis Pérez Floristán

Juan Luis Pérez Floristán / El Correo de Andalucía

Juan José Roldán

Juan José Roldán

No cabe duda de que la Real Orquesta Sinfónica de Sevilla ha ido perdiendo paulatinamente público, algunas veces de forma alarmante. Sus sucesivos responsables han intentado atraer nuevos adeptos diseñando programaciones en las que abunden piezas populares y archiconocidas, un extremo que desde nuestra humilde opinión hemos considerado errónea, por cuanto acaba espantando al público fiel, cansado de escuchar siempre las mismas partituras. El afán de llenar butacas puede casar bien con Carmina Burana e insistir en la Novena de Beethoven con pretexto de su bicentenario, pero a nuestro juicio desaprovecha la ocasión de aumentar repertorio, combinando lo clásico con lo estrictamente contemporáneo y de calidad. Aún así, la orquesta ha dado de la mano del siempre eficiente y fiel colaborador jerezano Juan Luis Pérez un salto cualitativo en el que abundan las ocasiones de lucimiento de la plantilla y alguna que otra agradable sorpresa en términos estrictamente de programación.

Marc Soustrot, director de orquesta

Marc Soustrot, director de orquesta / El Correo de Andalucía

A los trece conciertos del ciclo Gran Sinfónico en el Maestranza, se unen doce de cámara que cuentan con la aceptación unánime del público del Turina. Conciertos en barrios, para públicos infantiles, en colaboración con Juventudes Musicales para dar oportunidad a nuevas voces solistas, e intervenciones en foso tanto en óperas como en danza o zarzuela, además de un esperado concierto de música de cine que puede dar alguna sonada sorpresa, completan otro año ocupadísimo de una orquesta que necesita rediseñar su personalidad y exhibir su calidad con un mayor nivel de compromiso. Con todo, destacamos varias de las propuestas de este nuevo curso que arrancará el próximo septiembre.

Música española para arrancar la temporada

La gala inaugural, los días 12 y 13 de septiembre, volverá a celebrarse en un espacio emblemático, práctica abandonada en las últimas temporadas y que da al acontecimiento un especial relieve. El Patio de la Montería del Alcázar acogerá un programa de índole eminentemente popular y hasta cierto punto folclórico, que servirá para brindar a la ganadora del último Certamen Nuevas Voces de Sevilla, la joven almeriense Carmen Larios, la oportunidad de lucirse junto a una gran orquesta, consecuencia de ser depositaria también del premio de la ROSS en ese mismo certamen. La zarzuela y la canción popular serán sus caballos de batalla, con las Siete Canciones Populares de Falla orquestadas por Ernesto Halffter, como pieza fundamental. A ella se unirán Carceleras de Las hijas de Zebedeo de Chapí, Petenera de La marchenera de Moreno Torroba, y Canción de la paloma de El barberillo de Lavapiés de Barbieri. A la batuta otra joven promesa, muy reconocida y galardonada, la valenciana Beatriz Fernández Aucejo.

Bryndís Guðjónsdóttir, soprano

Bryndís Guðjónsdóttir, soprano / El Correo de Andalucía

Un híbrido romántico-medieval

Precisamente la ganadora del mismo certamen Nuevas Voces de Sevilla, la soprano islandesa Bryndís Gudjónsdóttir, será una de las invitadas en el primer concierto de abono del ciclo Gran Sinfónico, los días 19 y 20 de septiembre. Será la enésima vez que Carmina Burana, ese pastiche neorromántico con el que Carl Orff quiso dar forma a los poemas medievales de los monjes de Beuern que hablan de la naturaleza, el amor y las tabernas, suene en los atriles de la ROSS, en esta ocasión bajo la dirección de quien hasta ahora ha sido su responsable artístico, Marc Soustrot, asumiendo ya el rol de batuta invitada. A Gudjónsdóttir, que el pasado enero protagonizó el Concierto de Año Nuevo de la orquesta, le acompañarán el tenor argentino de origen italiano Santiago Ballerini y el barítono serbio Milan Perisic, tras un brillante debut en el Liceo con Tosca y L’incoronazione di Poppea. Pero el plato fuerte de la función será el Orfeón Donostiarra, que regresa así a Sevilla, acompañado por la Escolanía de los Palacios. La primera de las tres últimas y archiconocidas sinfonías de Mozart, la nº 39, completará la oferta con su combinación de calidez, solemnidad, turbulencia y brillantez.

Un Mahler presuntamente luminoso y un magistral Britten

Los días 10 y 11 de octubre volverá a lucir en Sevilla el hermoso timbre de la soprano Lucía Martín-Cartón. Será con la Cuarta de Mahler, quizás una de sus obras más luminosas, cuyo espíritu ensoñador deberá captar la batuta de Giacomo Sagripanti. Ambos han sonado ya con la Sinfónica en anteriores ocasiones, si bien con repertorios del clasicismo (incluida una Cenerentola del director en 2014) que parecen andar lejos del sinfonismo mahleriano y de la Sinfonía de Réquiem de Britten que completa un programa muy bien hilado. Esta obra maestra del compositor británico está henchida de mística católica y un desconsuelo que difícilmente representaba el espíritu perseguido por las autoridades japonesas que la encargaron para conmemorar dos mil seiscientos años de la Dinastía Imperial.

György Gyorivanyi-Rath

György Gyorivanyi-Rath / El Correo de Andalucía

Aires húngaros y rumanos en el programa nº 5

Ya en 2025, los días 16 y 17 de enero, uno de los directores que más han frecuentado la Sinfónica, el húngaro György Ráth, que hace dos décadas fue firme candidato a convertirse en su director artístico, con el apoyo unánime de la plantilla, conciliará el romanticismo de Liszt, de quien se interpretará el poema sinfónico Los preludios y el Concierto para piano nº 2, paradigma de la transformación temática de su autor, con la música del siglo XX de la mano de Ligeti y su canto al folclore de su país en el Concierto rumano, y de Bartók del que sonará más de veinte años después de la última vez una suite de su tempestuoso y agitadísimo ballet El mandarín maravilloso. Al piano se sentará Eldar Nebolsin, que en marzo regresará al Maestranza en formato camerístico.

El violín de Sibelius mide fuerzas con la solemnidad de Elgar

La ternura y el sentimentalismo se darán la mano en febrero, los días 20 y 21, cuando la directora griega Zoe Zeniodi, que compaginará este concierto con la ópera Iphigenia en Tauride, y la violinista moldava Alexandra Conunova intenten emocionarnos con el Concierto de Sibelius, seguramente el más grabado del siglo XX. Revérie del miniaturista Scriabin, y las sobrias y a la vez emotivas Variaciones Enigma de Edward Elgar, tantas veces escuchadas en películas y de tan agradecida digestión, enmarcarán la pieza.

Ritmo latino con protagonistas venezolanos

Con un sabor netamente venezolano se presenta el concierto número siete de la temporada, los días 6 y 7 de marzo. Hernández Silva, director de la Filarmónica de Málaga, volverá a ponerse frente a la ROSS con un programa exclusivo de su país. Dos Grammys de 2023 se darán cita en este concierto, la Fantasía Concertante para trompeta, cuatro (instrumento venezolano de cuerda pulsada de cuatro órdenes) de Paquito d’Rivera, más identificado con el jazz cubano, y el trompetista Pacho Flores, que aprovechará para presentar su propia obra Cantos. El mejor intérprete de cuatro, Leo Rondón acompañará a los dos artistas, figurando también en los atriles la suite de la película de Fred Zinnemann Redes, original del modernista mexicano Silvestre Revueltas.

El talento de Pérez Floristán y las marionetas de Stravinski

La orquesta recuperará el 10 y el 11 de abril uno de los programas que se perdieron por la huelga de la temporada pasada, con Juan Pérez Floristán interpretando el primero de los tres conciertos para piano de Bartók, una pieza que rechaza el romanticismo pero mira al pasado en su concepción neoclásica y su rigor contrapuntístico. El contraste entre el mecanicismo de las personas y la emoción de las marionetas, protagoniza Petruschka, uno de los mejores y más inspirados ballets de Stravinski. Marc Soustrot se encargará de dar lustre a este concierto.

El Cuarteto Andalucía y una hermosa página de Ráchmaninov

La participación del Cuarteto de Guitarras de Andalucía, con Francisco Bernier, Antonio Duro, David Martínez y Javier Riba, es lo que da más relieve al décimo concierto de la temporada, también en abril, los días 24 y 25. De nuevo con Ráth a la batuta, interpretarán el Concierto Andaluz para cuatro guitarras de Rodrigo. La Sinfonía nº 2 de Rachmáninov volverá a los atriles de la ROSS, siempre con la magnífica versión de Pedro Halffter en la memoria, y con la expectación que la Sinfónica Conjunta de la Universidad y el Conservatorio nos ofrecerá a finales de este mes como clausura del curso académico en el Auditorio de Ingenieros.

Lucas Macías Navarro, oboísta y director de orquesta

Lucas Macías Navarro, oboísta y director de orquesta / El Correo de Andalucía

Schumann y Strauss, vidas de héroe

El 25 y el 26 de junio será un placer volver a Strauss, especialmente a sus poemas sinfónicos, y Una vida de héroe se encuentra entre los más inspirados y queridos. El lirismo y la épica están garantizados en esta página que permite a la orquesta lucirse en todo su esplendor y que esperemos rinda satisfactoriamente en manos de otro de los directores recurrentes de la formación, Lucas Macías. Por su parte, el joven violonchelista valenciano Pablo Ferrández dará vida en esta cita de junio al Concierto en la menor de Schumann, considerado imposible en su época y recuperado en el siglo XX por Pau Casals.

Pablo Ferrández, violonchelista español

Pablo Ferrández, violonchelista español / El Correo de Andalucía

Bicentenario de una obra irrepetible

Nuestro repaso culmina con el último concierto de la temporada y ese homenaje a la Novena de Beethoven en su bicentenario, ya metidos en julio de 2025, los días 3 y 4, aunque la efemérides tuviera lugar el mes pasado. El Himno de la Alegría volverá a sonar en el Maestranza, una pieza que no necesita presentación aunque sí la que le servirá de preludio, Friede auf Erden, un canto a la paz en la tierra, y falta hace, concebido para coro a cappella. El Coro del Teatro de la Maestranza se empleará a fondo en esta pieza y en esa Novena dirigida por Guillermo García Calvo, de quien no disfrutábamos en nuestra ciudad desde 2012, tal es su apretada agenda internacional. Muy experimentadas también las voces de Jacquelyn Wagner, Sandra Ferrández, Airam Hernández y José Antonio López. No estamos tan emocionados como con la programación del Maestranza, pero como se puede comprobar hay donde elegir.