Israel Fernández y El Relojero en la Bienal: cantes de ayer por el cantaor del mañana

Expectación máxima por ver en directo a Israel Fernández (Corral de Almaguer, Toledo,1989) con las entradas agotadas para este domingo 22 de septiembre en Sevilla. Fernández se ha ganado por derecho ser uno de los principales valedores del flamenco entre el público más joven. De hecho, el cantaor ha manifestado que su intención con el disco que presenta, el sexto de su carrera, es precisamente acercar los cantes antiguos a las nuevas generaciones para que no se pierdan.

Llega al Teatro Alameda, en el marco de la Bienal de Sevilla, de la mano de Antonio 'El Relojero', un guitarrista de otra generación. Los dos presentarán, Por amor al cante (Universal, 2024). Se conocieron hacen quince años en un concurso que ganaron y Fernández rápidamente se dio cuenta de que se entendían a la perfección. El Relojero no tocaba de manera profesional hasta el momento y la colaboración por circunstancias personales (cuidaba de su madre) ha llegado ahora.

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Dice Fernández al comienzo de la taranta La Señorita: "Dentro de la devoción que le tengo al flamenco desde que nací de chiquitito, son cosas que se nace con ellas y luego se mejoran con el tiempo, os voy a cantar con toda la ilusión, la nobleza, la humildad y el respeto".

Es solo uno de los muchos interludios de un álbum que se ha grabado en ocho peñas de Andalucía, por lo que recoge el ambiente, los jaleos y las intervenciones de dos músicos que reconocen que no habían preparado nada. Toda una reivindicación de la importancia de la afición de estos espacios para mantener viva la tradición y la raíz del flamenco.

La "devoción desde chiquitito" por el flamenco

Dos adelantos, con cuidados videoclips en Youtube claramente dirigidos a los centenials, los fandangos Yo voy a perder el sentío y la seguiriya Yo me asomé a la muralla, daban buena cuenta de las intenciones del cantaor toledano hace unas semanas. Israel Fernández opta en esta ocasión por dar rienda suelta a los cantes más antiguos que tenía interiorizados desde pequeño. Cantes, por otro lado, que interpreta con dominio, al toque de Antonio El Relojero, del que se asegura se entienden solo con mirarse.

Todo un atrevimiento recuperar estos cantes con temas que se grabaron en la primera mitad del siglo XX y en los que se invocan también a Pastora, Carbonerillo, Cepero, Isabelita de Jerez, Corruco o Manuel Torres, entre tantos otros.

Unidos por la manera de sentir

La ilusión de un sentir profundo por el flamenco es el pegamento de estos dos artistas de generaciones dispares, pero con gran afinidad. Así lo describe Fernández en una reciente entrevista para Europa Press: "Ha sido una bendición encontrarlo porque he aprendido muchas cosas de él. Me entiendo con él perfectamente. Yo le decía el palo por el que iba a cantar y ya está. Él sabe lo que tiene que tocar, yo sé lo que tengo que cantar. Nos une la manera de sentir".

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Cantes de disco de pizarra y cilindro

Podría decirse que el toque de El Relojero recuerda a Sabicas y a Miguel Borrul, un guitarrista "en peligro de extinción" en palabras de Fernández, que despliega su magia en cada nuevo corte de este disco: el rasgar de sus cuerdas está muy presente en la grabación, en estricto directo, de esas soleás, granaínas y tarantas, de esas canciones de los antiguos discos de pizarra y cilindro. Estos dos artistas saben que el amor tan grande al cante de los aficionados de las peñas y ese trabajo de arqueología han querido interpretar estas canciones dolientes, profundas, en las que el quejío se clava en el pecho, solo podían registrarse en esos espacios.