La leyenda de Atín Aya, un retrato en movimiento

El Festival de Cine de Sevilla estrena el documental de Alejandro Toro y Hugo Cabezas sobre el fotógrafo sevillano que descubrió el sur profundo en las marismas arroceras 

Vídeo | La leyenda de Atín Aya, un retrato en movimiento

El Correo

Charo Ramos

Charo Ramos

Alberto García-Alix, Jordi Socías, Gloria Rodríguez, Aitor Lara, Susana Girón o Isabel Muñoz son algunos de los grandes fotógrafos españoles que amplían el retrato de su colega Atín Aya en el documental que los realizadores Hugo Cabezas y Alejandro Toro han presentado en el Festival de Cine de Sevilla.

Atín Aya: Retrato del silencio es un festín visual que, gracias a su formato innovador, permite admirar en pantalla grande, fusionadas con los fotogramas de la película, algunas de las obras emblemáticas del autor de Marismas, Sevillanos y Paisanos. Son tres de las series más ambiciosas, importantes y singulares de la historia de la fotografía española a cargo de un hombre tímido, culto y libre al que este largometraje reivindica con pasión.

Atín Aya nació en Sevilla y falleció prematuramente en 2007 con 52 años y muchos proyectos en marcha. Licenciado en Psicología por la Universidad de Granada, su vida cambió, como recuerda Jordi Socías en el documental, cuando en 1981 comenzó a estudiar fotografía en el Photocentro de Madrid y a trabajar en la agencia Cover.

Su trabajo en prensa, en cabeceras como ABC y Diario 16, le sirvió para sistematizar sus prácticas, desarrollar su lenguaje creativo (deudor al principio de Cartier-Bresson), y también para saber qué no quería hacer. Su mirada pausada y rigurosa, su afán por establecer un vínculo con los temas y personas que elegía, lo llevaron a abandonar los senderos trillados y a desarrollar en blanco y negro su obra más personal.

Encontró la inspiración en un universo paralelo a tan sólo 30 kilómetros de Sevilla, en esas islas del Guadalquivir que fueron el origen de su trabajo más icónico, Marismas (1991-1996). Su reflejo de las adversas condiciones de vida de los marismeños, miradas de frente y sin artificio, obtuvieron la beca Fotopress.

Un fotograma del documental 'Atín Aya. Retrato de silencio', estrenada en la sección Panorama Andaluz.

Un fotograma del documental 'Atín Aya. Retrato de silencio', estrenada en la sección Panorama Andaluz. / El Correo

Hugo Cabezas y Alejandro Toro logran en su documental la proeza de rastrear la huella de Atín Aya en aquellos territorios indómitos y dar voz, tres décadas después, a algunos de los lugareños que posaron ante su cámara. Hombres y mujeres que los miran ahora a ellos y rememoran a aquel fotógrafo del que comenzaron desconfiando, pensando que se trataba de un guardia civil de incógnito, y con el que acabaron estableciendo lazos de camaradería, almuerzos y sobremesas.

El retrato se completa especialmente con la intervención de las personas que mejor conocieron al fotoperiodista sevillano, entre ellas su fiel amigo y escritor Diego Carrasco, y su hija María Aya, responsable de su legado, cuya tutela e investigación ha favorecido al depositarlo en el Archivo General de Andalucía.

El cineasta sevillano Alberto Rodríguez recuerda cómo el trabajo de Atín Aya en el bajo Guadalquivir fue la génesis de su película La Isla Mínima

El cineasta sevillano Alberto Rodríguez aporta otro testimonio esencial en el que recuerda cómo el trabajo de Atín Aya en el bajo Guadalquivir fue la génesis de su película La Isla Mínima.

Miradas todas ellas que confirman la vigencia de este fotoperiodista que, pese a su leve tartamudez, encontró en el silencio y la amabilidad extrema una manera de dialogar con los otros, tender puentes y poder así captar su esencia en retratos que hoy son cumbres del género, como ocurre con los que tomó de los tenderos, vecinos y artesanos de la capital andaluza durante 20 años.

No es nada fácil hacer un documental sobre un fotógrafo, las comparaciones son odiosas

Alejandro Toro

— Director del documental junto a Hugo Cabezas

“No es nada fácil hacer un documental sobre un fotógrafo, las comparaciones son odiosas y teníamos claro que teníamos que cuidar mucho su fotografía y nuestras imágenes. Investigamos un formato en el que conviviese su fotografía con nuestro vídeo teniendo claro que no queríamos cortar su obra, sino poder verla completa, pero tampoco mostrarla aislada. Este formato de 5:4 nos permite homenajear la factura de sus grandes libros y hacer guiños a sus entrevistas, y al cuidado que él ponía en las localizaciones y el entorno de sus retratados”, detalla Alejandro Toro.

Uno de los descartes de la célebre fotografía de El Pali, de la serie 'Sevillanos' de Atín Aya.

Uno de los descartes de la célebre fotografía de El Pali, de la serie 'Sevillanos' de Atín Aya. / El Correo

En los años 90, a la vez que cubría la Exposición Universal de Sevilla, Atín Aya se encontró con las marismas mientras probaba una moto de gran cilindrada. La dureza de la vida y esas llanuras infinitas donde se funden el cielo y el horizonte comenzaron a obsesionarlo. Es un paisaje épico al que aplicará una mirada frontal, heredera de August Sander y de los grandes fotógrafos americanos que cubrieron la Gran Depresión. “Resulta muy interesante ver sus contactos y descartes, por qué elegía unas fotos y no otras”, explica Alejandro Toro, que destaca también cómo gracias a la generosidad e implicación de su hija han podido filmar muchas fotografías inéditas, “que suponen más del 80% de su obra”.

El documental invoca a menudo los géneros del western y la road movie permitiendo a los dos cineastas emular el viaje de Atín Aya a la marisma, rodado en blanco y negro, frente a las imágenes en color que recogen su relectura personal de aquella experiencia iniciática.

Alberto García Alix, fotógrafo, durante su participación en el documental.

Alberto García Alix, fotógrafo, durante su participación en el documental. / El Correo

Fotogramas que adquieren una densidad especial gracias a la banda sonora compuesta por Miguel Rivera, el carismático cantante de Maga. “Ha hecho un trabajo maravilloso y disfrutón, lleno de referencias a compositores y grupos que nos apasionan, hasta el punto de que bromeaba diciendo que dejaba el sombrero de cowboy en la puerta. Todo está grabado en analógico, con guitarras e instrumentos reales. Le hemos incomodado y ha valido la pena”.

“Era capaz de sacar oro del secarral de una rueda de prensa”

Diego Carrasco

— Escritor y amigo de Atín Aya

Atín Aya, como recuerda Diego Carrasco, “era capaz de sacar oro del secarral de una rueda de prensa”. El trabajo fresco, callejero y espontáneo de su serie Sevillanos, más cerca del trabajo para los periódicos y revistas, tiene igualmente un gusto exquisito y una técnica impecable. Acercar todo ese corpus al gran público, y que su autor “sea reconocido y estudiado como uno de los grandes maestros de la fotografía española”, es ahora el empeño de estos dos cineastas.

Atín Aya: Retrato del silencio es la nueva producción documental de La Favorita Produce tras la premiada Últimas unidades, debut de Cabezas y Toro en la dirección documental.

Tracking Pixel Contents