Teatro

Alegato a la misoginia

Teatro del Velador cierra con el aforo lleno el festival de las artes escénicas Anfitrión en el marco del Teatro Romano (**)

02 ago 2020 / 10:28 h - Actualizado: 02 ago 2020 / 10:31 h.
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  •  Reparto de la obra. / El Correo
    Reparto de la obra. / El Correo

Estética de lo feo, personajes deformes y grotescos, humor negro... son las características fundamentales del teatro de Juan Dolores Caballero, alias “El Chino”, que se vuelcan también este nuevo montaje, una gran producción con el que culmina el festival de las artes escénicas Anfitrión en el Teatro Romano de Itálica.

Se trata de un propuesta de gran formato, lo que no es moco de pavo en estos tiempos de penuria teniendo en cuenta que se trata de una compañía de teatro privada. Nada menos que nueve intérpretes en escena, a los que hay que sumar el músico, Sancho Almendral, que reproduce la banda sonora de Inmaculada Almendral en directo. Sin duda, lo mejor del espectáculo.

Y es que la obra adolece de algunos fallos que, a estas alturas, llaman la atención teniendo en cuenta el talento reconocido de Juan Dolores Caballero. En primer lugar porque por mucho que los actores y actrices intenten proyectar, sus voces se pierden en el espacio al aire libre de grandes dimensiones del Teatro Romano. Pero es que, aunque pudiéramos escucharlos bien, lo cierto es que, Juan Dolores Caballero sitúa en primer plano la imagen y el verso se queda en un plano secundario.

Para ello se sirve, por un lado, de un espacio escénico atemporal que en alianza con la iluminación de Nestor García despliega un universo conceptual sugerente, y por otro de un trabajo actoral que incide en la expresión corporal deforme y grotesca. Tal vez demasiado porque, con tanto centrarse en perfilar la deformidad, el hilo argumental se difumina, el ritmo se ralentiza y la historia no acaba de entenderse.

Tampoco se entiende que la dramaturgia no haya llevado a cabo una revisión de este clásico de Calderón la Barca, que más allá de reflejar el machismo propio de la época, supone un alegato a la misoginia, llegando a justificar el asesinato de la mujer en manos de su esposo. Y eso, por mucho que situemos a la obra en su tiempo, no puede dejar de provocarnos rechazo.

La ficha

Obra: Céfalo y Procris
Lugar: Teatro Romano, 31 de julio
Compañía: Teatro del Velador
Dramaturgia y dirección: Juan Dolores Caballero, “El Chino”
Música: Inmaculada Almendral, Bruno Axel y Sancho Almendral
Música en directo: Sancho Almendral
Intérpretes: Belén Lario, Sergio Andolini, Fran Caballero, José Luis Fernández Escudero, Juan Carlos Fernández, Mer Lozano, J. Ignacio Pérez, Alba Suárez, Sara de Molina
Calificación: 2 estrellas