Flamenco

Edición fallida del Festival de las Minas

La Lámpara Minera se la llevó Amparo Heredia Reyes La Repompilla, la gran triunfadora de este año

Manuel Bohórquez @BohorquezCas /
08 ago 2021 / 10:01 h - Actualizado: 08 ago 2021 / 08:10 h.
"Flamenco","La Gazapera","La Tostá"
  • Festival Internacional Cante de las Minas. Vídeo íntegro de la Gran final y entrega de premios.
  • La ganadora de la Lámpara Minera Amparo Heredia Reyes, “LaRepompilla. EFE/Marcial Guillén
    La ganadora de la Lámpara Minera Amparo Heredia Reyes, “LaRepompilla. EFE/Marcial Guillén

Nadie imaginaba que la cantaora malagueña Amparo Heredia Reyes La Repompilla iba a ser la gran triunfadora de este año, con Lámpara Minera incluida. Se llevó casi todos los premios, unos 30.000 euros, dejando patidifusos a muchos asistentes. La gran parte del escaso público que quedaba estaba más bien por la extremeña Esther Merino, que solo se llevó un premio. Pero era la noche de La Repompilla, una cantaora de experiencia que ni en sus mejores sueños se vería alguna vez dando este pelotazo en el Festival de las Minas.

A La Unión se viene fundamentalmente a pasarlo bien y a emborracharse de cantes mineros. Es un gran concurso pero no es perfecto y está en juego no solo el dinero que se puede ganar, que es mucho, sino el prestigio y lo que te puede venir por ser Lámpara Minera, el premio más importante de un certamen de flamenco. Ayer había mucha gente enfadada y despotricando del festival en las redes sociales, sobre todo los que no habían quedado en la final.

Pasa todos los años desde hace sesenta. Pero el próximo año volverán a venir los mismos, o una mayoría de los que han estado, porque si un año suena la flauta, entonces pasas de ser un desconocido a que te conozca toda España. Ahí están casos como el de Miguel Poveda o Rocío Márquez. Por tanto, y aunque el certamen debería hacer cambios, el próximo año volveremos porque nos gusta La Unión, toda la zona levantina española, por muy quemados que nos haya dejado esta pobre y fallida edición de los sesenta años.

Edición fallida del Festival de las Minas
La ganadora de la Lámpara Minera Amparo Heredia Reyes, “LaRepompilla de Granada. EFE/Marcial Guillén

El ambiente de anoche mejoró algo porque se celebraba la final y nadie se quería perder ese momento en el que se anunciara el ganador o la ganadora de la preciada Lámpara Minera. Reconozco que me sorprendió que tanto La Repompilla como Esther Merino fueran en mineras y con opción a la Lámpara. Todo indicaba que podría ser el año de El Perrete, que cantó muy bien la noche del viernes. Al final lo dejaron en cantes como la bulería por soleá y la seguiriya, donde no acabo de verlo. No por su voz aguda y fruncida, sino porque son estilos en los que no hace falta el grito brillante, sino el temple. Al final presentó un parte médico y renunció a estar en la final.

Me pareció una injusticia que no dejaran estar en la final al granadino Antonio Gómez Muñoz El Turri, porque es la mejor voz que he escuchado aquí este año y bordó la farruca y las soleares apolás, cumpliendo en los estilos mineros, sobre todo en la cartagenera. Tampoco me pareció bien que no fuera a la final el cantaor cordobés Antonio Fernández Nieto, porque cantó estupendamente los estilos mineros. A este concurso se viene a cantar bien o no se viene, y este hombre vino a cantar. Otra cosa es que no fuera del gusto del jurado.

Como adelantamos ayer de mañana, en el baile ganaron la bailaora madrileña Paula Rodríguez Lázaro y el bailaor malagueño, de Estepona afincado en Sevilla, Rafael Ramírez Vilches. Con un bailarín en el jurado, Antonio Najarro, era de esperar que no ganaran El Desplante participantes de otra escuela más clásica jonda, como la sevillana Beatriz Rivero Pardal. Paula Rodríguez conectó con el público y bailó un buen taranto y bamberas, llenas de frescura y flamenquería, aunque es brusca y da demasiados zapatazos. Y Rafael Ramírez hizo una seguiriya muy elaborada, que le encantaría a Najarro.

Los finalistas en la categoría de instrumentistas, El Filón, fueron la flautista madrileña, oriental, Lara Wong y el jovencísimo pianista mallorquín Antón Cortés Marín, de solo 13 años. Me gustó la apuesta del saxofonista onubense Sebastián González Bereño, su concepto de grupo, pero no logró convencer al jurado el viernes. Al final, el premio recayó en Lara, que tocó levantica y alegrías, sin poner mucha carne en el asador pero con mucha sensibilidad y talento.

El Bordón Minero se lo llevó el granadino Álvaro Pérez Álvarez, por sus tarantas y alegrías del jueves, y por la taranta y la guajira de anoche, dos piezas de una belleza increíble. Me pareció muy interesante lo que hizo el chipionero Manuel Jesús Cerpa González el viernes, sobre todo la soleá por bulería. Pero la técnica de Álvaro mereció el premio. Como mereció el de Jóvenes, el sevillano de Osuna Manuel Cuevas hijo, que cantó dos buenas mineras y al que le auguramos grandes noches en La Unión.

Me voy algo decepcionado este año, porque esperaba mucho más. Era una edición complicada, es cierto, pero así y todo esperaba más. Mi gozo en un pozo.