Un complejo ejercicio de introspección que nos lleva de la risa a la reflexión. Es lo que se propone Pablo Remón con ‘Los Farsantes’, una suerte de comedia metateatral de diálogos ágiles y monólogos atrevidos envueltos en un humor entre surrealista y televisivo.
Cuatro personajes nos cuentan sus historias que, aunque en principio parecen deslavazadas y con pocos elementos comunes, acaban encajando hasta formar un todo en el que el discurso se torna introspectivo, duro por momentos, aunque con final feliz . Pero nada que ver con los finales de los cuentos o las películas de Hollywood de los años treinta. Es más bien una felicidad serena que surge de la aceptación, esa que nos lleva a asumir que, por mucho que nos empeñemos, la mayoría de nosotros nunca vamos a vivir la vida que soñamos. Aunque, y eh aquí lo que es más interesante, en más de una ocasión ni falta que nos hace.
Para llegar a esa conclusión el relato se sirve de cuatro personajes cuyas vidas giran en torno al cine y al teatro, lo que determina un discurso metateatral que le sirve a Pablo Remón para reírse de su profesión con toda una gama de guiños y chistes que, refrendados por el derroche de vis cómica de Javier Cámara y Francesco Carril, hacen las delicias del respetable.
La dramaturgia divide la obra en dos, una primera que presenta a los personajes y sus conflictos individuales y una segunda en la que se enlazan sus historias hasta llegar al desenlace final. En ese sentido cabe destacar que, lejos de conformar una estructura simple, la dramaturgia se define como un entramado complejo en el que, entre chiste y chiste, se van encajando las diferentes tramas que conforman cada de una de las historias individuales de los personajes.
Cabe resaltar también los continuos y atrevidos cambios de ritmos del texto, que salta del surrealismo al naturalismo sin solución de continuidad, con un humor a caballo entre lo teatral y lo televisivo, al más puro estilo de Pablo Remón. No en vano comenzó su carrera como guionista de cine y televisión.
Destaca también la frescura, la versatilidad y el derroche de maestría de Javier Cámara, Francesco Carril, Nuria Mencía y Marina Salas, así como la pulcritud y la funcionalidad de la escenografía de Monica Boromello y la iluminación de Daniel Checa, que alcanza su mayor belleza en la escena final que Remón colma de poesía. Lástima que la primera parte, que al fin y al cabo no deja de ser un prólogo, abuse un tanto de la duración.
Título: Los Farsantes
Lugar: Teatro Central, 11 de noviembre
Producción: Centro Dramático Nacional y Buxman Producciones
Texto y dirección: Pablo Remón
Escenografía: Monica Boromello
Iluminación: Daniel Checa
Intérpretes: Javier Cámara, Francesco Carril, Nuria Mencía y Marina Salas
Calificación: 4 estrellas