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La OBS, en Madrid como en casa

22 nov 2016 / 23:42 h - Actualizado: 23 nov 2016 / 07:00 h.
"Música","Orquesta Barroca de Sevilla"
  • Un momento de la actuación de la Orquesta Barroca de Sevilla anoche en el Auditorio Nacional. / CNMD
    Un momento de la actuación de la Orquesta Barroca de Sevilla anoche en el Auditorio Nacional. / CNMD

Volvía este martes la Orquesta Barroca de Sevilla (OBS) al Auditorio Nacional de Música de Madrid colgando el cartel de no hay entradas en el concierto que ofreció enmarcado en el ciclo Universo Barroco que programa el Centro Nacional de Difusión Musical (CNDM). Lo hacía además auspiciada por la Universidad de Sevilla dentro del ya veterano (habida cuenta de lo poco que duran algunas aventuras culturales) Proyecto Atalaya de recuperación del patrimonio musical andaluz.

El patrimonio musical es una obligación; restaurarlo y prestarle oídos; lo que no quiere decir que en todos los casos sea un goce. Sorprendentemente la música antigua casi siempre se recibe con alborozo, independientemente de la calidad de esta, como si en aquellos tiempos la mediocridad no fuera un desperfecto humano. Bueno. La OBS lleva muchas partituras rescatadas de los archivos; algunas buenas, otras muchas correctas y hasta unas pocas cuya resurrección flaco favor hizo a sus autores. Este año el foco se ha puesto en la Colegiata de Olivares, un templo que mantuvo durante décadas una capilla musical en la que destacaron las figuras de Juan Pascual Valdivia (1737-1811) y Juan Mayorga (1746-1781), entre otros. No tardaremos más en afirmar que esta es, seguramente, una de las recuperaciones musicales más valiosas de cuantas ha hecho la OBS.

De Valdivia se ofreció anoche, por ejemplo, la Lamentación tercera que se canta el Jueves (1778), formalmente compleja y con un atractivo tono ceremonial en su segunda sección. Juan Roldán, otro músico activo en Olivares, firmó Si a mis fértiles estancias, una virtuosa cantada que encontró en la soprano María Hinojosa a una excelente traductora, de hermosa coloratura y rotunda seguridad, con un fraseo agil y un controladísimo vibrato. En general, sobre ella recayeron partituras de más enjundia que las que tuvo que afrontar el contratenor Filippo Mineccia. Este sobresalió en El mismo Dios me amonesta, cantata de Valdivia en la que se distinguió también el virtuoso uso del bajón a cargo de Carles Cristóbal.

En músicas como estas, que hoy asumimos como novedades absolutas, pues su destierro ha sido total durante siglos, los músicos han de poner aun más brío que si en los atriles lucieran partituras de Haendel o Vivaldi. Sabedores de ello, la OBS ficha para estas empresas al italiano Enrico Onofri, que volvió en el concierto de ayer a dar buena cuenta de su capacidad para resaltar esquirlas, contrastar pasajes y jugar con las dinámicas huyendo de cualquier tentación de morosa continuidad. Brilla entre grandezas, de Juan Roldán, resultó un aria doliente, de múltiples afectos, variado cromatismo y gran melodismo. Destacó además la sección en la que violín y voz se enzarzan en un diálogo que recoge y clausura la orquesta; un momento de gran belleza.

El concierto, que fue grabado para su posterior retransmisión por las cámaras de Televisión Española, concluyó con una propina en la que la Barroca de Sevilla se quiso reivindicar como la formación emblemática de la arqueología musical en España. Para ello acudieron a una pieza a dúo de Juan Francés de Iribarren (1699-1767), otro músico traspapelado y hoy tocado y fijado en disco por el conjunto hispalense. Con los reparos expresados, el Proyecto Atalaya revaloriza el patrimonio sonoro español. Ojalá esta aventura se extendiera a músicas de tiempos ulteriores.

FICHA TÉCNICA

Orquesta Barroca de Sevilla
Calificación:
***
Auditorio Nacional de Música de Madrid. 22 de Noviembre. Programa: Obras de Jommelli, Furió, Sellitti, Valdivia, Mayorga y Roldán. Música inédita en la Colegiata de Olivares. Intérpretes: María Hinojosa, soprano. Filippo Mineccia, contratenor. Orquesta Barroca de Sevilla. Enrico Onofri, violín y dirección. Ciclo: Universo Barroco del Centro Nacional de Difusión Musical (CNDM).