La compañía Marcos Vargas & Chloé Brûlé cumplen 15 años sobre los escenarios y para celebrarlo han creado ‘Los cuerpos celestes’ una pieza coral que aúna la danza, el flamenco y la música electrónica
Tanto el bailaor sevillano Marcos Vargas como la bailarina y bailaora canadiense Chloé Brûlé, han volcado su inquietud creativa en sus espectáculos hasta definir un etilo que se caracteriza por contar y compartir historias, expresando de forma narrativa sus inquietudes mediante el lenguaje corporal de la danza contemporánea y el baile flamenco. Así, si algo caracteriza a estos dos artistas es su contínua búsqueda de nuevos caminos para el flamenco en particular y la danza en general. Eso les ha llevado a indagar nuevos lenguajes dancísticos y musicales, como la música electrónica de Miguel Marín, músico sevillano que ha compuesto la música de espectáculos danza contemporánea, como Árbol y Montgomery, así como bandas sonoras para directores de cine como Bigas Luna o Richard Jobson, entre otros.
Aunque por lo general en la mayoría de sus espectáculos actúan solo ellos dos, para esta nueva propuesta además de la composición musical de Miguel Marín, Marcos y Chloé han querido contar también con la colaboración de otros dos singulares intérpretes del baile flamenco, Gero Domínguez y Yinka Esi Graves.
Bailaor y coreógrafo formado en el Conservatorio Profesional de Danza de Sevilla, Gero Domínguez dio el paso de montar compañía propia en 2011. Con ella ha creado los espectáculos ‘FundaMetalmente Flamenco’, ‘Carbón Punta y Tacón’, ¡Vanguardias y Retaguardias’,‘#Experimento Nº1’, ‘Estrambótico’ y ‘El Afilaó’. En todos ellos se ha entregado a explorar el flamenco sin prejuicios y con una visión contemporánea que se aleja de las etiquetas. Al igual que Yinka Esi Graves, una afrodescendiente de la diáspora, que baila flamenco con un estilo muy particular, en el que se aprecian aires africanos y también contemporáneos. Junto a ellos, a compás del espacio sonoro de Miguel Marín, Marcos Vargas y Chloé Brûlé nos proponen un viaje sensorial de lo etéreo a lo corpóreo, un fresco sobre los seres humanos, dónde cada individuo es pieza fundamental pero insignificante en el gran tablero universal.
El texto es inexistente, sólo un pequeño prólogo. Una voz en off (la de Chloé) enumera frases documentales científicas sobre astronomía con el objetivo de predisponer al espectador en una atmósfera celeste donde se inicia el espectáculo. “Si en anteriores creaciones usábamos un lenguaje narrativo parecido al de la novela, en ‘Los Cuerpos Celestes’ pasamos a un tipo de escritura más cercana al ensayo poético: este espectáculo habla del hombre sin necesidad de contar situaciones cotidianas. Los cuerpos no albergan personajes; son el material a través del cual exponemos de forma íntima ideas, sentimientos y sensaciones. Es una reflexión dancística, de forma libre y asistemática, sobre el lugar del ser humano en el universo, su relación con él y con el otro”, ha declarado la compañía sobre la obra, que se estrena mañana, miércoles 20, en el Teatro Central de Sevilla.