Plaza de Armas acogerá teatro, danza y música

Desde este fin de semana, Sevilla contará con un nuevo espacio escénico llamado Platea Odeón Imperdible ubicado en Plaza de Armas. Se trata de un proyecto completamente novedoso que pretende convertir el emblemático centro comercial en un espacio cultural y de ocio, dando cabida a actividades musicales, teatrales, circenses o cinematográficas, las cuales se llevarán a cabo de martes a domingo, a partir de las 16 horas, y durante todo el año. En palabras de José María Roca, quien desde 1988 lleva gestionando espacios culturales de la ciudad como la desaparecida sala La Imperdible o el Teatro Duque, la idea es atraer a todo tipo de público, desde el infantil al adulto, aunque poniendo el foco en «aquellos espectadores de cierta edad que a lo mejor no se desplazan a otros espacios y pueden venir aquí».

Y es que el proyecto posee numerosos puntos en común con el cabaret, pues, además de disponer de un escenario y un patio de butacas con capacidad para noventa personas —más que butacas son cómodos sillones dignos del mejor salón—, cuenta con una original cafetería instalada en un vagón de tren, el cual se inspira en aquellos clásicos ferrocarriles de la Compagnie Internationale des Wagons-Lits que tan bien entroncan con la vieja estación, y que permitirá a los clientes disfrutar de la programación mientras se toman una copa o cenan. No olvidemos que este lugar único de la ciudad fue declarado Bien de Interés Cultural (BIC) en el año 1990, por lo que adentrarse entre sus cuatro paredes ya es de por sí una grata experiencia. Por eso, al margen de la luz natural que se filtra por sus hermosas vidrieras, y que cambia su fisonomía cada hora, se pretende añadir juegos de luces que resalten su arquitectura, elevándose por los muros de ladrillo como un elemento más.

Auspiciada por la empresa Odeón, que también gestiona las salas de cine ubicadas en el centro comercial Plaza de Armas —actualmente a la vanguardia de los recintos cinematográficos de la ciudad—, la idea es acoger funciones de teatro, espectáculos de danza y conciertos de jazz o flamenco, contando para ello con un escenario y camerinos al uso, pero también dar la oportunidad a los creadores de alumbrar montajes «específicamente pensados para este lugar», según Roca. Asimismo, Platea cuenta con una moderna pantalla que estará funcionando continuamente, siempre al margen de los espectáculos, para amenizar las tardes y atraer a las familias a tomar café o merendar. En ese sentido, Luis Millán, responsable de Odeón, apuesta incluso por retransmisiones deportivas, pues, en su opinión, «no tenemos por qué ser excluyentes».

Ni que decir tiene que el nuevo recinto es completamente privado y no cuenta con ayudas públicas, de ahí que haya que «buscar la sostenibilidad», en palabras de Roca. Para ello cuentan con atraer incluso a los amantes de los cortometrajes, con un día específicamente ideado para ellos, algo que el gestor de Producciones Imperdibles ya puso en marcha en su día en la añorada sala de la plaza San Antonio de Padua. Igualmente los responsables de Platea, que ya trabajan en la programación que se dará a conocer en breve, y que busca no caer «en el circuito cerrado de compañías que giran de una sala a otra», tendrán en cuenta la cercana Navidad, dando luz a propuestas expresamente ideadas para esas fechas. Y es que el espacio es «completamente versátil», según Millán, «y se puede mover y adecuar a lo que sea».

Dicha aventura empresarial, pese a sus múltiples posibilidades y a lo atractivo de su entorno, no viene a sustituir al proyecto pensado para la calle Torneo, donde el teatro, la danza, el circo, la música o el cine 360º se darán cita en un mismo recinto, utilizando carpas de última generación. Una iniciativa llamada Odéon Imperdible donde se pretende mezclar la cultura y el ocio, y que, ubicada a orillas del río Guadalquivir, cuenta con un presupuesto aproximado de 500.000 euros. Como explica José María Roca, «Torneo sigue, pero al ser una inversión muy potente, estamos esperando tiempos mejores», los cuales, para Luis Millán, obviamente llegarán, «con el final de la pandemia». Por eso, el director escénico prefiere hablar de proyectos relacionados y no excluyentes. «Esto es un avance, un anticipo, un complemento».

La presencia de Platea en la antigua estación de Plaza de Armas no impedirá que los negocios ya presentes en la misma continúen funcionando; desde aquellos enfocados a la hostelería —el centro comercial cuenta con una cafetería y un restaurante de comida rápida—, hasta los talleres de pintura, escultura o artesanía que se alzan en el lateral derecho y desembocan en un tienda deportiva.