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EFE/ Kiko Delgado
La Rozalén más mística, que hasta se atrevió a cantar por sevillanas, llenó ayer la Plaza de España de Sevilla para disfrutar con su público del concierto que la ha llevado al escenario del Icónica Sevilla Fest.
Tal ha sido el nivel de complicidad con su público, que en su repertorio ha intercalado 'La historia de una amapola', las sevillanas compuestas en su día por Manuel Pareja-Obregón para Los Marismeños, y que han interpretado por sorpresa, acompañada solo al piano, entre 'Mar en el trigal' y 'La maza', dos de sus grandes éxitos.
La castellano-manchega estaba a gusto en el escenario y se ha sincerado ante su público antes de comenzar diciendo que estaba "intensa y mística", influenciada por el entorno monumental en el que se celebra el festival, por donde pasan iconos de la música española e internacional hasta el 15 de octubre.
La cantautora y compositora se ha colocado en el centro de la plaza construida por Anibal González para interpretar los temas de un repertorio cargado del simbolismo, tras cuatro trabajos editados con los que acumula distinciones tan importantes como cuatro Discos de Oro, dos de Platino, un Goya, el Premio Nacional de Músicas Actuales 2021, tres nominaciones a los Latin Grammy o la Placa al Mérito Profesional de Castilla-La Mancha.
Tras esta actuación, el Festival de la Plaza de España de Sevilla se prepara para recibir a otros iconos de la música, como Kase.O este viernes 30, y Leiva, el sábado día 1.