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Agentes de la Policía Nacional.
2.000 agentes garantizarán la seguridad de la final de Copa
La mitad de la Policía Nacional. La presencia del Rey Felipe VI, que presidirá el partido, hace que se incorpore al dispositivo la Guardia Civil, que también velará por la seguridad en el Aeropuerto de San Pablo y la fluidez en las carreteras
Un total de dos mil efectivos, de ellos más de la mitad de la Policía Nacional, conforman el dispositivo de seguridad para la final de la Copa de Rey de este sábado en La Cartuja entre el Betis y el Valencia, que ha sido perfilado este viernes en una reunión de coordinación en la Subdelegación del Gobierno en Sevilla.
Policía Nacional y Local de Sevilla, Guardia Civil, seguridad privada de La Cartuja, además de efectivos de Bomberos, Protección Civil y 061, forman este dispositivo que empieza este viernes con una fase precrítica que se prolongará hasta las 15:00 horas de mañana, cuando se pone en marcha una segunda hasta el inicio del partido.
La presencia del Rey Felipe VI, que presidirá el partido, hace que se incorpore al dispositivo la Guardia Civil, que también velará por la seguridad en el Aeropuerto de San Pablo y la fluidez en las carreteras afectadas antes, durante y tras la finalización del encuentro, en cuya seguridad participan más de mil efectivos de diferentes unidades de la Policía Nacional y 750 vigilantes privados del estadio de La Cartuja.
La Subdelegación del Gobierno informa de que en la primera fase se prestará especial atención a la presencia de grupos de seguidores de riesgo de los grupos ultra de ambos equipos y se establecerá un control preventivo en la ciudad, además de reforzarse la estación de ferrocarril de Santa Justa, el aeropuerto, el exterior de La Cartuja y los alojamientos de los equipos participantes.
La fase crítica consta de un dispositivo antiterrorista y de prevención de orden público, con especial atención al estadio de La Cartuja y zonas de concentración de aficionados, y en ella se intensificarán los controles de protección en los hoteles asignados a los equipos y árbitros y en las zonas de reunión de aficionados.
En el caso concreto del Betis, se desplegará un dispositivo específico en las inmediaciones del Benito Villamarín para que los seguidores sigan el encuentro a través de pantallas gigantes.
Una vez termine el partido, se activará una fase que incluye el desalojo del estadio, con refuerzo de la seguridad en las zonas de embarque de aficionados en autocares y nodos de transporte, mientras que se mantendrá el dispositivo antiterrorista y de orden público.
Este dispositivo se ha cerrado en una reunión de coordinación presidida por el subdelegado del Gobierno en Sevilla, Carlos Toscano, con representantes de la Casa Real, Policía Nacional, la Comandancia de la Guardia Civil de Sevilla, Policía Adscrita a la Junta de Andalucía, Real Federación Española de Fútbol, Renfe, Betis y Valencia, Estadio de La Cartuja, Ayuntamiento de Sevilla, Emergencias y Ayuntamiento de Santiponce.
El subdelegado del Gobierno en Sevilla ha destacado que Sevilla cuenta ya con una importante experiencia en la celebración de grandes eventos y en la coordinación de planes preventivos y de seguridad, "en los que la coordinación resulta clave".