El Betis abre la puerta de Primera al Sporting (0-3)

El conjunto verdiblanco se va de la categoría con una imagen malísima, sin competir y con una goleada ante el Sporting, que asciende gracias a un gol del Lugo en Girona en el minuto 91

07 jun 2015 / 20:03 h - Actualizado: 08 jun 2015 / 08:57 h.
"Crónica Real Betis","Pepe Mel","Rubén Castro","Jorge Molina"
  • Alegría de los jugadores del Sporting tras saber que el año que viene jugarán en Primera División. / Manuel Gómez
    Alegría de los jugadores del Sporting tras saber que el año que viene jugarán en Primera División. / Manuel Gómez
  • Rubén Castro tras una jugada en el partido ante el Sporting. / Manuel Gómez
    Rubén Castro tras una jugada en el partido ante el Sporting. / Manuel Gómez

El Betis, como hizo en Tenerife, se olvidó también de competir en el broche a una gran temporada y se despidió de Segunda División con una derrota deshonrosa pero intrascendente frente al Sporting, que sin embargo se salió con la suya. Ganó por dos o más goles de diferencia y se aprovechó del increíble empate del Lugo en el feudo del Girona con un tanto en el minuto 91 para acompañar a los verdiblancos a la máxima categoría de forma directa. ‘Sporting es de Primera’, cantó el Villamarín tras la confirmación de ese ‘milagro’. La hinchada verdiblanca, eso sí, no obvió el adiós tan triste que le dio su equipo y protestó por una actuación que por momentos rozó el esperpento. El equipo de Pepe Mel, alejado de esa exigencia que se reclama ahora como eslogan del futuro, no tuvo ningún interés en brindar una victoria a los suyos y los menos habituales no ofrecieron argumentos para ganarse la continuidad en el proyecto. Todos excepto Dani Giménez, otra vez a un muy buen nivel.

El partido fue del Sporting casi de principio a fin. De hecho, ya pudo irse al descanso no con los dos goles de ventaja que necesitaba por si al Lugo le daba por empatar con el Girona, sino con todos los que hubiese querido. El Betis, con poquísima o ninguna tensión competitiva, por decirlo así, controló el balón a veces, pero del círculo central en adelante no puso especial énfasis en batir a Cuéllar. Como mucho lo intentaron Rubén Castro, con un par de remates (19’ y 40’) sin fruto, o Jorge Molina, que tuvo la ocasión de forzar como mínimo penalti y expulsión del meta en un buen pase de N’Diaye y luego completó la segunda oportunidad de su socio con la misma falta de precisión.

El Sporting, en cambio, acumuló una ocasión tras otra. En el 8’, Hugo Fraile rompió el fuera de juego, pero remató algo trabado y se topó con Dani Giménez; cinco minutos después, Guerrero también se encontró con una buena estirada del meta verdiblanco, que en la prolongación de la jugada asistió impertérrito a un tirazo de Carmona al poste; y en el 23’, por fin, Guerrero marcó a placer después de que Luis Hernández rompiera el endeble fuera de juego tirado por la zaga verdiblanca.

El 0-1 ponía al conjunto asturiano a un gol del ascenso directo, ya que el Girona empataba entonces con el Lugo, así que los chavales de Abelardo siguieron a lo suyo, siempre más cerca de Dani Giménez que de Cuéllar. En el 34’, Isma López llegó hasta la frontal sin que nadie se lo impidiera y chutó fuera por muy poco; luego, Carmona se estrelló en Dani Giménez tras un magnífico centro de Isma López; y ya al final del parcial, de nuevo el delantero sportinguista erró el punto de mira y cabeceó fuera cuando estaba más solo que la una al borde del área chica.

La felicidad asturiana, sin embargo, desapareció justo cuando llegó el intermedio, y no por la sucesión de ocasiones marradas, sino porque el Girona consiguió el 1-0 frente al Lugo. Saber que ganar al Betis ya no les valía para nada debió de afectar a los jugadores del Sporting, que al principio de la segunda parte se dejaron casi avasallar por un Betis con el ímpetu justo. Jorge Molina casi obtuvo la igualada tras un excelente pase atrás de Rubén, pero Bernardo apareció por allí en medio y evitó el gol.

Superado el impacto de ese 1-0 en Montilivi, el Sporting recuperó el control de la situación y volvió a acercarse a Dani Giménez. Esta vez no le hizo falta crear un puñado de ocasiones para materializar al menos una, sino que marcó a la primera. Y nunca mejor dicho, porque el autor del 0-2, Jony, marcó a puerta vacía en el primer balón que tocó, recién entrado como estaba.

La perspectiva de una goleada en contra como broche a la temporada del duodécimo ascenso no gustó nada a los béticos, que silbaron a los suyos en el 0-2 como si el partido sirviese de algo. También lo hicieron cuando Rachid casi anota el 0-3 dos minutos después. Lo evitó Dani Giménez, de nuevo el mejor de los suyos, como en Tenerife. Y por supuesto hicieron más audible su protesta cuando Isma López, ahora sí, cabalgó por su banda sin oposición y cruzó el balón con calidad ante el meta bético. El pequeño desastre, sin importancia pero desastre al fin y al cabo para el Betis, se había consumado y así acabó la tarde, bochornosa por la temperatura y por la imagen del campeón de Segunda. Bueno, así no acabó, porque el Lugo aún no había marcado. Cuando lo hizo, el Sporting y sus hinchas fueron pura felicidad. Y los béticos, completamente hermanados con ellos, también. Al menos alguien salió contento del Villamarín.

REAL BETIS: Dani Giménez; Molinero, Caro, Jordi, Varela; Piccini (Dani Ceballos, m. 59), N’Diaye, Portillo (Álex Martínez, m. 78), Cejudo; Jorge Molina (Rennella, m. 60) y Rubén Castro.

REAL SPORTING DE GIJÓN: Cuéllar; Lora, Luis, Bernardo, Isma; Sergio Álvarez (Rachid, m. 58), Nacho Cases; Carmona, Guerrero (Juan Muñiz, m. 78), Hugo Fraile; y Castro (Jony, m. 58).


Goles: 0-1, m. 23: Guerrero. 0-2, m. 60: Jony. 0-3, m. 68: Isma López.


Árbitro: Lesma López (Comité Madrileño). No hubo tarjetas.


Incidencias: partido de la 42ª y última jornada de Liga en Segunda, disputado en el estadio Benito Villamarín ante 26.301 espectadores, entre ellos unos 2.000 seguidores del Sporting.