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El entrenador del Real Betis, Quique Setién, durante el encuentro ante el Girona, disputado en el estadio Benito Villamarín de Sevilla.- EFE/Raúl Caro
El Betis ha empezado a preparar la ida de los cuartos de final de la Copa del Rey ante el Espanyol sin Joaquín Sánchez y Francis Guerrero, con molestias físicas; y el central brasileño Sidnei Rechel, quien ha viajado a Brasil por la muerte de su padre.
Tras la victoria ante el Girona (3-2), el entrenador bético, Quique Setién, ha dirigido a puerta cerrada una sesión en la que no ha estado Sidnei, quien conoció ayer el fallecimiento de su progenitor; Joaquín, que sintió molestias en el calentamiento del partido ante el Girona; y Francis, que sigue con las que lo han apartado de los últimos compromisos del equipo.
Con la mente ya en la ida copera del próximo jueves en Cornellá-El Prat, el técnico cántabro ha dirigido una sesión en la ciudad deportiva en la que han participado jugadores que han superado sus respectivas lesiones musculares como el dominicano Junior Firpo o el camerunés Wilfrid Kaptoum.
También han entrenado el portugués William Carvalho, quien no jugó ante los gerundenses por sanción, y los suplentes y quienes dispusieron de menos minutos ante el Girona, además de titulares como el mexicano Andrés Guardado, el argelino Aïssa Mandi y Sergio Canales.
El resto de los titulares de ayer en el Villamarín hizo trabajo específico para un encuentro en el que es baja el argentino Giovani Lo Celso, expulsado por doble amonestación en la vuelta copera ante la Real Sociedad en Anoeta.