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Con Nahuel, y si se confirma la llegada de Musonda, el Betis aseguraría velocidad en ataque.
Las negociaciones para el fichaje del joven extremo hispano-argentino e internacional sub 21 Matías Nahuel van muy bien encaminadas y deben fructificar de manera positiva en los próximos días, pues el jugador ya ha hecho saber al Villarreal su deseo de recalar en el Betis y solo falta, que no es poco, que el club verdiblanco cierre un acuerdo con el castellonense que deje satisfechas a todas las partes, el futbolista y las dos entidades.
Nahuel, de 19 años, es un futbolista de gran proyección –fue campeón de Europa sub 19 junto a Dani Ceballos, Marco Asensio y compañía en julio del año pasado y en la final anotó el definitivo 2-0–, y el Villarreal no quiere deshacerse de él, por lo que baraja la opción de cederlo o quedarse siempre con una opción de recompra en caso de traspaso.
Miguel Torrecilla reconoció el viernes estar negociando con el Villarreal y durante todo el día de ayer se intensificaron las gestiones, aunque en el club verdiblanco quieren guardar cautela hasta que no esté todo acordado.
La llegada de Nahuel, al que restan dos años de contrato en el Villareal, no descarta la de Musonda, por el que se sigue pujando y se espera una contestación definitiva del Chelsea. El fichaje de un central y un delantero deben ser los próximos que acometa el Betis tras los dos extremos.
