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Bartra, en un entrenamiento con España. Durmisi y Guardado, en partidos con sus selecciones.
Faltan dos semanas y media para que empiece el Mundial 2018 y la única representación del Betis asegurada al cien por cien, salvo contratiempo en forma de lesión, atañe precisamente a un futbolista que ha pasado gran parte de la temporada en la enfermería: Joel Campbell. El atacante entró en la lista definitiva de Costa Rica y por tanto enriquecerá su currículum con otra Copa del Mundo. Pero es el único. El club verdiblanco, que en el mejor de los casos podría haber tenido hasta cinco estandartes en Rusia, ya ha perdido a uno que parecía seguro, Durmisi; a otro que tenía bastantes posibilidades, Bartra; y tiene en peligro de exclusión a un futbolista que en buen estado físico sería indiscutible en su selección, Guardado. El quinto era Feddal, pero sus opciones de ir con Marruecos se frustraron cuando se rompió el tendón de Aquiles.
Si Bartra aún mantenía alguna esperanza de acudir a la gran cita del año futbolístico, se frustró ayer. El central del Betis, incluido en la preconvocatoria inicial de 35 hombres que dio Julen Lopetegui, se quedó fuera de la lista definitiva de 23, pero la lesión de Carvajal en la final de la Liga de Campeones abrió un nuevo escenario. El madridista sufre una rotura de grado 2 del músculo semitendinoso del muslo de la pierna derecha, un contratiempo de difícil cura a corto plazo, pero este lunes se incorporó a la concentración del combinado nacional para recuperarse allí. «A la vista de los resultados, está prevista su incorporación para iniciar el proceso de recuperación de dicha lesión junto a los miembros de cuerpo médico de la selección, quienes estarán en estrecho contacto con los de su club durante todo el proceso médico», comunicó la Federación.
El mayor varapalo, sin embargo, ha sido para Durmisi, excluido de la lista de Dinamarca a pesar de ser un fijo en la fase de clasificación. «Deseo lo mejor para el Mundial. Dios está siempre conmigo, gracias por la temporada. Ahora toca descansar», dijo ayer. Esa es la buena noticia para el Betis, tanto en su caso como en el de Bartra: ambos llegarán al principio de la pretemporada con el descanso adecuado. La mala, sobre todo con el nórdico, es que el Betis se queda sin el escaparate que habría supuesto el Mundial, teniendo en cuenta que el zaguero puede ser una de las principales fuentes de ingresos económicos este verano. «Lo que hoy es tristeza seguro que se convierte mañana en alegría. ¡Ánimo, Riza Durmisi! ¡Tienes un largo futuro por delante y más oportunidades para cumplir tu sueño!», le escribió el club.
Y falta Guardado. El mexicano, operado hace un par de semanas del nervio que le afectaba al peroné derecho, confiaba en recuperarse a tiempo para el Mundial, pero los plazos se van acortando y su seleccionador, Juan Carlos Osorio, ya advirtió el domingo de que los futbolistas que no estén disponibles este sábado para un amistoso con Escocia tampoco irán a Rusia.