En busca de un doble salto de calidad

El Betis se adentra desde hoy en su tercera semana de pretemporada y va a dar un salto de calidad en la preparación. No porque Gustavo Poyet y Marcos Álvarez piensen imprimir un ritmo más fuerte a sus entrenamientos, ya duros de por sí, sino porque al conjunto verdiblanco le aguardan tres amistosos en seis días y en dos de ellos tendrá como adversarios a un equipo de la Premier League y otro de la Championship. Tras el aperitivo de esta tarde ante la Balona, de Segunda B, la escuadra de Heliópolis se enfrentará el martes al Middlesbrough y el sábado al Fulham. Es por tanto una semana importante desde el punto de vista futbolístico y también lo debe de ser desde el del mercado, porque Miguel Torrecilla quiere precipitar el fichaje del mediocentro defensivo lo antes posible.

Tras el fogueo que supuso el CD El Palo, de Tercera, el Betis ya pasa hoy a un Segunda B, el Linense, antes de cerrar la concentración de Marbella con el partido más importante de esta primera parte estival, el que jugará contra el Middlesbrough mañana martes. El equipo de Aitor Karanka vuelve a la Premier después de ser segundo en la Championship 2015-16 y ascender en un apretado final con el Brighton and Hove Albion, con el que terminó empatado a 89 puntos. El Boro se ha reforzado con Víctor Valdés o los exsevillistas Antonio Barragán y Bernardo Espinosa, pero sobre todo se ha gastado 15 millones de euros en el mediocentro holandés Marten de Roon (Atalanta) y 5 millones en el extremo danés Viktor Fischer (Ajax). Tras el Middlesbrough, al Betis le espera el sábado en Lepe otro histórico del fútbol inglés, el Fulham, que este año repite en la segunda división de su país.

El objetivo de la dirección deportiva del Betis es que para ese tercer amistoso de la semana esté ya a las órdenes de Poyet el sustituto de N’Diaye, ese mediocentro defensivo que ahora mismo es la prioridad absoluta para Torrecilla. Uno de los favoritos del jefe deportivo verdiblanco es Mario Lemina, un joven gabonés nacionalizado francés, de 22 años, que pertenece a la Juventus. Es un diamante en bruto y el precio de salida que impone la vecchia signora es impresionante (20 millones de euros), pero el futbolista no ve nada mal recalar en la Liga española, así que cualquier desenlace es posible, por ejemplo la cesión. En todo caso, la Juve ha recibido ofertas del Leicester, el Stoke City, el Watford o el RB Leipzig (rival del Betis en agosto). El chaval, por cierto, participó anteayer en el primer amistoso de los turineses (6-1 al San Mauro) y viajó ayer rumbo a Australia primero y Hong Kong después, ya que ha sido convocado por Massimiliano Alegri para el Juventus Jeep Tour.

En segundo plano, sobre todo porque sus características son más ofensivas que defensivas, puede estar Riccardo Saponara, un italiano que pertenece al Empoli y que el diario La Nazione vinculó ayer al Betis. Tiene 24 años y buena presencia física (1,84 metros), pero no se desenvuelve en esa posición que los verdiblancos consideran prioritaria ahora mismo. La pasada campaña jugó 32 partidos y marcó 5 goles.