Joaquín, el hijo pródigo está más cerca

El Betis va a acelerar en el mercado veraniego de fichajes, como no puede ser de otro modo porque sólo faltan cinco días para que se estrene en la Liga y trece para que se cierre el plazo de inscripción de jugadores. Los objetivos verdiblancos están claros: un extremo y un delantero. Y si se trata de nombres, tampoco hay demasiadas dudas, al menos en lo que atañe a la primera de las posiciones. Joaquín, que se marchó de Heliópolis en 2006, es el objetivo número uno para ese puesto en la banda que tanto ha solicitado Pepe Mel y que tanto ha buscado Eduardo Maciá. Y el Betis, según todos los indicios, está dispuesto a cerrar la operación cuanto antes.

Según adelantó este lunes Radio Marca, Joaquín está o ha estado en Sevilla negociando los términos de su contrato con el director deportivo del club de La Palmera, que ayer permaneció hasta altas horas en el estadio Benito Villamarín. En principio no tiene por qué haber inconveniente para que el Betis asuma el coste que supone un futbolista del caché del portuense. No le pagaría lo mismo que cobra en la Fiorentina, obviamente, pero lo compensaría con un contrato de varias temporadas, algo que no es pecata minuta para un profesional que ya tiene 34 años.

Superado ese trámite, al Betis le queda el auténtico obstáculo: ponerse de acuerdo con la Fiorentina. Huelga decir que la presencia de Maciá, ex del club italiano, juega a favor del Betis, pero eso no significa que su antigua empresa vaya a regalar a Joaquín, que tiene contrato con los viola hasta 2016 (ampliable a 2017 si cumpliese una serie de objetivos).