La gran pareja del centro, ¿un mes después?

El Betis regresa este miércoles al trabajo con un entrenamiento abierto a todos los públicos con la ayuda que además prestará el tiempo: la predicción meteorológica anuncia un paréntesis de cielos despejados entre borrasca y borrasca que precisamente coincidirá con la sesión del conjunto verdiblanco. Quique Setién se reencuentra con sus futbolistas en otra semana muy larga, sin fútbol hasta el lunes que viene. Esa tardanza le reporta una ventaja: dispone de más margen para recuperar a jugadores con pequeñas lesiones o molestias. Y eso le puede venir fenomenal para que en Vitoria, por fin, pueda reaparecer uno de sus puntales en las faenas creativas: Andrés Guardado.

El posible retorno del mexicano se produce en un momento fundamental de la temporada. De vuelta a la décima posición pero muy cerca de la séptima (a tres puntos), el Betis tiene un mes y medio para posarse en un lugar mejor de la tabla antes de afrontar el durísimo tramo final del calendario. En las seis próximas jornadas, los heliopolitanos se medirán con tres adversarios de la parte baja (Alavés, Espanyol y Las Palmas) y con tres rivales directos, además de forma consecutiva (Girona, Eibar y Getafe).

Guardado se ha perdido tres jornadas, todas las de la pasada semana, por culpa de las molestias físicas que sufrió poco antes del primero de esos encuentros, contra el Levante. Luego faltó al de la Real Sociedad y sí viajó a Valencia, pero ya en la víspera adelantó el entrenador que seguramente sería el descarte, como así fue.

La baja de un hombre imprescindible en el fútbol constructivo del Betis de Setién seguramente provocó la reaparición de otro que fue fichado para fijar la parte defensiva del centro del campo: Javi García. El murciano, indiscutible desde el principio de la campaña, perdió provisionalmente esa condición a raíz de una rotura en el cuádriceps derecho que sufrió durante el espectacular 4-4 de Anoeta, aunque al final sólo se perdió una jornada. Su mayor problema llegó en diciembre, en el choque contra Las Palmas: una lumbalgia de la que luego recayó y que le provocó más de un problema, y no sólo físico.

«Estuve bastante mal con ese tema. Aun volviendo seguía con molestias, estuve jugando con un vendaje muy raro y gracias a Dios a partir de Vigo ya me entrenaba con normalidad, pero estuve seis o siete semanas con esas molestias. Mentalmente, tener siempre el dolor me dejaba por los suelos. Un día estaba bien, dos mal... No conseguía recuperarme del todo y eso me tenía un poco mosqueado y susceptible. Pero es agua pasada, ahora estoy bien para lo que el equipo necesite», indicó anteayer.

Entre una cosa y otra, Guardado y Javi García no coinciden en el once titular del Betis desde la visita al Celta, en la 21ª jornada (29 de enero), así que son seis consecutivas sin estar juntos en la foto de antes del partido. Sí compartieron algunos minutos en algunos encuentros, como seis en la derrota contra el Real Madrid (Javi García entró en el 75’ y Guardado salió en el 81’) o veinte ante el Villarreal (el azteca fue titular y su compañero entró en el 70’). En Riazor, el murciano sustituyó al mexicano en el 83’.