La semana de Fabián y Rubén Castro

El Betis espera reunirse en breve con los agentes del palaciego para plantearle una mejora de contrato (y cláusula) y con los del canario, que son los mismos que tiene Mikel Merino, para encontrar la mejor salida posible. El club puede ofrecerle un partido homenaje a modo de despedida

05 jun 2018 / 07:00 h - Actualizado: 05 jun 2018 / 17:43 h.
"Real Betis","Rubén Castro","Fabián"
  • Rubén Castro y Fabián, además de Rafa Navarro, atienden a Quique Setién en un entrenamiento / Manuel Gómez
    Rubén Castro y Fabián, además de Rafa Navarro, atienden a Quique Setién en un entrenamiento / Manuel Gómez

A falta de un mes y un día para que el Betis 2018-19 inaugure su pretemporada, la actividad en las oficinas del estadio Benito Villamarín y fuera de allí es incesante por parte de la dirección deportiva que comanda el vicepresidente Lorenzo Serra Ferrer. Si se cumplen las previsiones más optimistas por parte del club, es posible que esta semana haya importantes avances en algunas operaciones. Entre ellas, la que afecta al futuro de dos futbolistas que representan el cambio generacional que también ha marcado la primera temporada de Quique Setién en el banquillo. Los protagonistas son Fabián y Rubén Castro.

El Betis quiere volver a renovar el contrato de Fabián. Ya lo hizo en el último día de enero de este mismo año, a modo de fichaje invernal de ultimísima hora. Entonces le mejoró la ficha, hasta ese momento de las más bajas de toda la plantilla; elevó su cláusula de rescisión hasta los 30 millones de euros; y amplió la relación hasta 2023. En todo caso, ese mismo día ya sabían los dirigentes verdiblancos que el precio del canterano, uno de los futbolistas revelación de la campaña en la Liga española, debía ser mucho más alto que el que acordaron con sus agentes. Es más, ni siquiera los 30 millones de la cláusula serían para el club, ya que unos 3 corresponden al jugador y sus representantes, aunque una eventual venta sí sería la mejor de la historia de la entidad. El récord hasta ahora está en los 25 millones que el Valencia pagó por Joaquín en 2006.

Aunque parezca mentira, o no, el escenario de hace cuatro meses ya no les vale ni al Betis ni a Fabián. El futbolista, titular en un equipo europeo y en la sub 21 española, empieza a recibir ofertas que multiplican lo que cobra en Heliópolis y sus agentes, lógicamente, no pueden estar de espaldas al mercado. El Betis, tampoco. Por eso quiere reunirse con quienes llevan los asuntos del palaciego, con los que la relación es fluida y muy buena, para plantear una propuesta que disuada al centrocampista de no caer en lo que le ha llegado desde Nápoles. Esa negociación, no puede ser de otra manera, pasa por colocarlo a la altura de los mejor pagados y trasladar ese salto de calidad a la cláusula de rescisión hasta situarla en el entorno de los 50 millones.

Además de verse con los agentes de Fabián, el Betis también prevé un encuentro con la inevitable Bahía, que cada verano consigue ser protagonista en La Palmera. En este caso hay dos motivos: Mikel Merino y Rubén Castro. Los dos comparten agencia y los rectores verdiblancos aprovecharán la negociación por el mediocampista pamplonés del Newcastle para tratar también la salida del delantero canario. O viceversa.

A día de hoy, Mikel Merino sigue debatiéndose entre las varias ofertas que también tiene, como la del Athletic, porque la contratación ya oficial de Dani García no es incompabible con la suya. En cuanto a Rubén, empieza a ser codiciado por más de un equipo de Segunda División, entre ellos el Córdoba. Su director deportivo, Luis Oliver, recordó ayer en la Cope que «la relación con el Betis es fluida» una vez superados los conflictos judiciales que enfrentaban a ambos y que espera que los verdiblancos lo «ayuden» de cara al próximo curso, «y no sólo con Rubén Castro». El máximo goleador histórico del Betis ya no tiene sitio en el equipo, pero la intención del club es ofrecerle la salida que se merece. Incluso le puede plantear la posibilidad de despedirse en un partido homenaje.

Y hablando de Oliver, otra de las cosas que apuntó fue que Narváez, determinante en la salvación del Córdoba, realizará la pretemporada con el Betis porque Setién «cuenta con él». Así se lo ha comunicado ya el club, aseguró. Otro que debería retornar es César de la Hoz tras un buen curso en Albacete. «Me debo al Betis, pero he pasado un gran año aquí», dijo el cántabro tras la última jornada en Segunda, en la que por cierto anotó un gol que también ayudó a su equipo a permanecer en la categoría.