Musonda: «El mejor consejo es el de Adán: los pies en el suelo siempre»

—¿Están más tranquilos después de ganar al Levante?

—Sí, el objetivo está cumplido o cerca de cumplirse y es bueno para el equipo.

—¿Por qué jugó el Betis tan mal contra el último? ¿El ambiente o la importancia del partido los presionó?

—No sé. Para mí lo importante en este partido era ganar. No puedo decir si los demás juegan con presión o no. Cada futbolista es diferente, pero hay muchos con experiencia en este equipo y si el jugador se siente un poco presionado es normal, necesitábamos ganar.

—¿El Betis tiene futbolistas para jugar mejor?

—Es fútbol. No puedes jugar magnífico todos los partidos. Claro que en el último partido pudimos jugar mejor, pero era importante ganar. En otros partidos jugamos bien, contra el Rayo o contra el Sporting, y no ganamos. Lo más importante en el fútbol es el equilibrio, jugar bien y ganar, pero a veces necesitas ganar y sufrir un poco. En este momento, en este partido, lo importante era ganar.

—¿Jugarán mejor cuando haya más tranquilidad?

—No cuando estemos más tranquilos. Es importante jugar bien todos los partidos contra cualquier equipo. Con esta afición, con 40.000 personas a las diez de la noche es importante jugar bien, lo sé. Fue un partido un poco gris, pero ganamos. Todos los jugadores queremos dar siempre lo mejor por la afición.

—¿Se ha acostumbrado ya a jugar delante de 40.000?

—Es un espectáculo. La afición es fantástica y es fantástico jugar por ella. Cuando tengo la posibilidad de jugar en el Villamarín estoy contento y doy lo mejor por esa afición. Por eso me emociona jugar, es un sueño jugar por esta afición.

—Tiene 19 años, pero la cabeza le va fenomenal, ¿no?

—No sé si soy perfecto, pero es importante dar el máximo de tu potencial. Cuando eres joven es lo mismo. Lo más importante es aprender de los jugadores que tienen experiencia. Siendo joven es importante la actitud, el trabajo. Para mí el 100% del tiempo, las 24 horas, hay fútbol en mi cabeza y nada más. ¿Maduro? Es mi actitud ante el fútbol. Vivo por el fútbol.

—Ha sido ídolo en el Betis desde el principio, pero el éxito no lo vuelve loco...

—No, sólo soy feliz. Es una buena experiencia para mí, pero lo más importante es la tranquilidad, los pies en el suelo el y trabajo. Si los fans están conmigo, yo estoy contento de firmar autógrafos o jugar con niños. Eso también es importante para mí, es parte de mi estil. Pero lo más importante es tener los pies en el suelo.

—¿Las expectativas de la afición le presionan?

—Es bueno que la afición espere tanto de mí, pero no es presión, es fútbol. Nunca he tenido presión, no conozco la presión, para mí el fútbol es el mismo juego desde que tenía cinco años hasta ahora. Para mí es una suerte pensar que en los próximos diez años estaré jugando al fútbol.

—Entonces juega igual que cuando tenía cinco años.

—Es mi estilo de juego. Sólo es fútbol. Jugar en la calle o en un terreno de juego... para mí es la misma actitud. Se trata de disfrutar.

—¿Es más un juego que una profesión?

—Sí, pero sé que esto es un trabajo y por eso soy muy profesional. Pero es un juego antes que una profesión. Es jugar y disfrutar. Tengo la suerte de jugar al fútbol, pero necesito disfrutar antes que nada para hacerlo bien.

—¿Por qué objetivo debería pelear un club con una afición así?

—Es muy difícil decir. La afición merece mucho, es muy grande y muy buena, pero es difícil. Cuando vine, el equipo estaba abajo y el objetivo es la permanencia. Después de cuatro o cinco partidos, vi que el equipo puede estar entre los ocho primeros. Es un gran club y podríamos estar entre los ocho primeros, jugando por Europa.

—¿Qué balance hace después de tres meses en el Betis?

—Soy muy feliz aquí. Son mis primeros partidos en una gran competición con los mejores del mundo. Empezó muy bien y después ha sido una montaña rusa: buenos partidos, un poco menos buenos, partidos malos... Yo doy todo cada vez que juego y soy joven, así que para mí es una experiencia increíble. estoy muy agradecido al Betis y al míster por darme esta oportunidad.

—¿También es un examen para ver si está capacitado para jugar en la élite?

—No tengo ninguna duda de que puedo jugar en cualquier competición de Europa en el futuro. Soy joven y necesito aprender, pero no tengo ninguna duda. En el Betis me va bien, es una experiencia que necesito y es bueno para mí estar en un equipo que necesita ganar partidos y jugar bien. No estoy en un equipo como el Levante, que está en una posición muy difícil. El Betis está en una posición muy buena y puede ganar a cualquier equipo.

—¿Su fútbol está mejorando?

—Sin duda. Es normal. Estuve cinco meses con el sub 21 en Inglaterra y ahora directamente jugué contra el Valencia. Cuando entreno con Rubén, Joaquín... y juego partidos difíciles, como el del Atlético o el Athletic, sabes que eres mejor, aunque pierdas. La progresión es normal cuando juegas delante de 40.000 personas en el Villamarín. Tácticamente necesito trabajar mucho, hay un largo camino que recorrer y necesito aprender mucho. Pero la actitud es más profesional. En una gran Liga necesitas ganar todos los partidos y estar al 100% en cada partido, porque un pequeño error te cuesta un gol. ¡Aprendo en cada partido y soy mejor porque todos los partidos son difíciles.

—De todos los consejos que le dan Merino o sus compañeros, ¿con cuál se queda?

—Son muchos y buenos. El míster dice que juegue sin miedo y que tácticamente trabaje por el equipo. Joaquín me dice que cuando pueda driblar, lo intente. Y Antonio [Adán], el portero, dice sólo que tenga los pies en el suelo. Este es el mejor consejo. Estoy aquí para aprender y tengo suerte de jugar con Rubén, Joaquín y Adán.

—Ahora regatea un poco menos que antes...

—Los últimos partidos fuera de casa han sido muy difíciles, no he tenido muchos espacios para jugar y no soy un jugador que lleve diez años y pueda cambiar el partido, como Cristiano o Messi. Es difícil cuando el equipo no tiene mucho el balón o cuando el rival te presiona como hacen el Atlético o el Athletic. Es normal que no regatee mucho. Pero me tomo cada partido como viene. Si tengo la posibilidad de uno contra uno, lo hago, pero si el partido es más cerrado, debo trabajar más y correr por el equipo. Los últimos partidos fueron un poco así. Contra el Valencia tuve muchas posibilidades de contraataque, pero contra Atlético y Athletic fue más difícil. Es normal que un joven de 19 años no pueda regatear igual contra estos equipos, así que no me preocupa. Si tengo la posibilidad, soy el primero que intentará driblar, es mi estilo.

—Los rivales también lo conocen más, claro.

—Es verdad. Contra el Atlético y el Athletic no tuvimos mucho el balón y también el rival me conoce más, pero no es ninguna excusa porque eso es el fútbol. Cuanto mejor juegues, más te analizarán. Es parte del fútbol.

—¿Sabe qué significa ‘patada’? Desde que está aquí recibe más que nadie...

—No lo sabía, pero es parte del juego y no me preocupa, aunque mis rodillas están un poco... (ríe). También es bueno para mí. Si driblo mucho y recibo patadas, aprendo para la próxima vez. No me preocupa. Si estoy en el suelo, me levanto y sigo jugando.

—Diferencias entre el Chelsea sub 21 y el Betis.

—Este es otro mundo, el mundo real. Jugar por tres puntos, ante una afición, contra los mejores, grandes partidos, Sevilla y Barcelona en dos semanas... Es fantástico, es un sueño para un joven de 19 años.

—¿Y diferencias entre Londres y Sevilla?

—El sol (ríe). Y la comida. Mejor aquí. Y el fútbol también.

—Ha dicho que su jugador favorito es usted mismo...

—Me gusta como juego, pero no intento decir que soy mejor que Cristiano, Messi o Neymar, que son los tres mejores del mundo. Y en este equipo también está Rubén Castro, que marca cuando el equipo lo necesita; Antonio, que hace paradas en todos los partidos; y Joaquín, que es la estrella de este club.

—¿Sabía quién era Rubén antes de venir al Betis?

—No. Yo vi el partido del Betis contra el Real Madrid y jugó muy bien. Vi una acción entre Pepe y Kroos y casi marcó. En este partido conocí a Rubén. Y cuando vine aquí, en el primer entreno directamente vi que era un gran jugador. Es un espectáculo.

—¿Dónde se ve dentro de cinco años?

—No puedo decirlo. Espero jugar al fútbol como ahora, a un nivel muy bueno, y ganar títulos. Pero lo importante es jugar al fútbol. Paso a paso. Ahora mi paso es el Betis y lo más importante es ahora.

—Una pregunta que no le habrán hecho todavía. ¿Se ve en el Betis la próxima temporada?

—Sí, cuando estoy durmiendo, en mis sueños también me preguntan ‘¿te quedas en el Betis?’ (ríe). No lo puedo decir, pero sí puedo decir que estoy muy contento aquí, que todo está muy bien y que lo más importante para mí en este momento no es pensar en la próxima temporada, sino en el objetivo del Betis.

—Si el Chelsea le pregunta, ¿le dirá que el Betis es una buena opción?

—Pienso que es mi decisión y que estoy contento aquí. El míster también me ha hecho muy fácil la adaptación. Pero no quiero hablar de la próxima temporada. Lo importante es tener los pies en el suelo y los partidos contra el Celta, Las Palmas y el derbi.

—El derbi y el Barça. Partidos para lucirse, ¿no?

—Lo importante es el equipo, que el mundo vea que el Betis es un gran equipo que puede jugar contra otros grandes equipos, no por decir que Musonda puede jugar contra el Barcelona o el Sevilla. Para mí es toda una experiencia. Jugar el derbi con 19 años será un honor.

—Casi fichó por el Barça hace cuatro años...

—El Barcelona es un club de ensueño, pero no quiero hablar del pasado ni del futuro. Es importante vivir en el momento y el momento es aquí. Es un sueño jugar en la Liga y se lo agradezco al Betis.

—¿La Liga es más fácil para su juego?

—No es cuestión de que sea fácil, no hay partido fácil en la Liga. Pudo verse contra el Levante, que va último. Sólo digo que la Liga es buena para mí, que la mentalidad en España es como la mía, a todo el mundo le gusta mucho el fútbol y por eso me gusta mucho la Liga.

—¿Se ve en la Eurocopa?

—Es el futuro y nadie lo sabe. Si estoy, daré todo por mi país. Si no, tendré vacaciones y meteré mis rodillas en hielo (ríe).

—¿Es verdad que John Terry sabía quién era Musonda cuando se fue al Chelsea?

—No sé si me conocía bien, pero conoce a todos los que llegan al club. Fue sorprendente que supiera que era belga, cómo jugaba....

—Cuando lo quiso el Chelsea, con 15 años, el Anderlecht le aseguró que tendría sitio en el primer equipo y usted replicó que prefería seguir con su formación.

—Me dijo que tendría sitio en el primer equipo si me quedaba, pero lo más importante era continuar con mi formación. Estoy contento con mi formación en el Chelsea y con 19 años fue el momento perfecto para empezar a jugar, no antes. Mi formación desde los 15 a los 19 años en el Chelsea fue perfecta para empezar a jugar ahora en una gran competición.