Setién espera que "secuelas físicas y anímicas" no afloren ante el Villarreal

El técnico cántabro es consciente de que "las expectativas que se habían creado no se están cumpliendo"

07 abr 2019 / 13:50 h - Actualizado: 07 abr 2019 / 13:56 h.
"Real Betis","Quique Setién"
  • Setién espera que "secuelas físicas y anímicas" no afloren ante el Villarreal

El entrenador del Real Betis, Quique Setién, admitió este sábado que sus jugadores están "físicamente y en el aspecto anímico afectados" por las "secuelas del partido" perdido "contra la Real Sociedad" el pasado jueves (1-0) pero "confiados" en "afrontar con garantías" el duelo del domingo frente al Villarreal en el estadio Benito Villamarín.

Setién advirtió, en rueda de prensa que ofreció en la ciudad deportiva bética tras el entrenamiento, que "el de mañana será un partido complicado" porque "en esta Liga, nadie gana fácil" y los castellonenses llegan "en una situación incómoda, querrán sumar para verse desahogados" en la tabla.

El técnico cántabro es consciente de que "las expectativas que se habían creado no se están cumpliendo" porque el Betis está alejado de la zona europea, "pero quedan ocho partidos por disputar" en los que tiene "confianza en unos jugadores que lo van a hacer bien" y además tienen "capacidad para ganarlos todos".

Pese a que los verdiblancos sólo han ganado cinco de sus últimos veintidós partidos oficiales, "la sensación es de tranquilidad" porque "así lo han transmitido tanto el presidente -Ángel Haro- como el vicepresidente -José Miguel López Catalán-", aunque es cierto que "en el club también están preocupados, pero pensando" que es posible "sacar la situación", afirmó.

Setién, que anunció la reintegración en la convocatoria del lateral zurdo Junior Firpo, lesionado hace casi dos meses, lamentó que "dar trescientos y pico pases" en Anoeta "no fue suficiente para ganar" aunque esa cifra demuestra "que el equipo no se ha caído" aunque le "falta ese punto de agresividad" necesario para "crear más ocasiones", argumentó.

El preparador santanderino no quiso pronunciarse sobre la posibilidad de una destitución aunque recordó que sus "números son como los del Valencia, pero al revés" y a "Marcelino lo querían echar", si bien admitió que "ha sido un año difícil, con cosas complicadas de gestionar como jugar en Europa o la semifinal de Copa".

"Hace mucho tiempo que soporto los chaparrones. Me toca apechugar. Sé la profesión que he elegido. Trabajo para que las cosas salgan bien. Estoy centrado en lo que me tengo que centrar y que todo lo que planteemos salga, lo demás no lo puedo controlar", añadió al respecto.

Setién tiene contrato hasta junio de 2020 y recordó que en mayo pasado afirmó que "había conseguido en un año lo que pensaba conseguir en tres. Todo el mundo quiere más y habrá gente que lo ve todo mal y "otros que verán el futuro con optimismo".