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Una columna vertebral con futuro

El Betis renueva a Bruno hasta 2019 tras hacer lo mismo con Dani Ceballos (2020) y Adán, que también tiene tres años de contrato, como N’Diaye, Petros, Fabián o Piccini. El primer gran problema es Rubén Castro: acaba en 2017

10 feb 2016 / 09:00 h - Actualizado: 09 feb 2016 / 22:33 h.
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  • Dani Ceballos, Adán y Bruno, las tres grandes renovaciones del Betis esta temporada, en un entreno / José Luis Montero
    Dani Ceballos, Adán y Bruno, las tres grandes renovaciones del Betis esta temporada, en un entreno / José Luis Montero

El Betis se había marcado como prioridad la renovación de Bruno, uno de los futbolistas más importantes de su plantilla, y se ha salido con la suya. El club y el central ya habían alcanzado un principio de acuerdo para que su relación se amplíe dos años más, de manera que no acabe en 2017, como estaba firmado hasta ahora, sino en 2019, y lo hicieron oficial ayer por la tarde. La entidad de Heliópolis cierra así el círculo de renovaciones de algunos de los jugadores imprescindibles en su actual esquema, tarea que el director deportivo, Eduardo Maciá, abrió en otoño con Adán y Dani Ceballos.

Bruno, que llegó a Heliópolis en el verano de 2014, es ahora mismo el defensa más regular de la plantilla y un elemento imprescindible en las alineaciones. Y eso que debutó como profesional verdiblanco con una nefasta actuación, en el feudo de la Ponferradina (4-1), pero se rehízo con firmeza y acabó siendo el zaguero más regular de toda la temporada en el equipo que al final acabó dirigiendo Pepe Mel.

Su magnífico papel hizo que la dirección deportiva, ya a las órdenes de Maciá, se plantease esa mejora y prórroga de su contrato como uno de sus principales objetivos. En Primera, además, ha confirmado su progresión y es el tercer jugador del plantel que más minutos lleva en lo que va de Liga (1.817), detrás de Rubén Castro (2.039) y Adán (1.951) y por delante de N’Diaye (1.746). En su demarcación no tiene rival: Westermann, en blanco desde que se lesionó hace un mes y medio en el Camp Nou, lleva 1.145 minutos, mientras que Pezzella, titular al principio de la competición y ahora tras el percance del alemán, acumula 916. Jordi paró en 167 y Tarek se marchó a Estados Unidos sin jugar un minuto.

La renovación de Bruno garantiza al Betis la continuidad de su columna vertebral a corto e incluso medio plazo, aunque huelga decir que todo depende de lo que ocurra en el mercado, sobre todo si entran en acción poderosos pretendientes que a base de talonario trastoquen las circunstancias en vigor. En teoría, el club de La Palmera podría estar tranquilo esta temporada y otra. En 2017 expira el primer gran contrato de la plantilla: Rubén Castro. Maciá, por tanto, tiene un año para renovar al mejor delantero de la historia del Betis... o encontrar un sustituto fiable.

En octubre del año pasado, el club verdiblanco también alcanzó por fin la renovación de Dani Ceballos hasta 2020. En noviembre, el que renovó fue Adán, en su caso hasta 2019 (igual que Bruno). Ese mismo año acaban también los contratos de N’Diaye; de su compañero en el doble pivote, Petros, contratado el pasado verano; del acompañante de ambos hasta que se lesionó, el canterano Fabián; y de Piccini. Además, Varela renovó hasta 2017; Westermann firmó hasta ese mismo año (con opción de prolongarlo uno más en función de objetivos); Joaquín, Portillo y Digard, hasta 2018; Pezzella, hasta 2020...

El único futbolista relevante en la historia reciente del Betis con contrato sólo hasta junio es Jorge Molina. Están igual Vadillo y Molinero. Xavi Torres, que cuenta poco o nada, acaba en 2017.