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Ben Yedder celebra el segundo de sus goles al Maribor. / Manuel Gómez
El Sevilla cumplió este martes con los pronósticos y goleó a un impotente Maribor en la segunda jornada de la fase de grupos de la Champions. Un 3-0 que demostró las diferencias entre ambas escuadras, el idilio con el gol de Ben Yedder en la Champions –triplete para el francés– y que coloca al cuadro de Eduardo Berizzo como líder del grupo E tras el empate entre Spartak de Moscú y Liverpool en Rusia. Una noche plácida en Nervión, que disfrutó de su equipo y de la magia de la Champions League, donde también marcha con paso firme el Sevilla.
Los nervionenses salieron decididos a poner una marcha más que de costumbre. Ordenó Berizzo mayor rapidez en el juego y puso en el campo a Correa en vez de Navas y a Franco Vázquez en lugar del esperado Ganso, quien apunta más al sábado ante el Málaga. De hecho, en el 6’ Ben Yedder casi marca tras un saque rápido de Nolito en una falta lateral. Más tarde el francés cabeceó en el área chica obligando a lucirse a Handanovic: también tras un saque veloz de esquina que cogió algo desprevenida a la defensa del Maribor. Parecía ponerle voluntad el equipo nervionense, aunque seguía mostrado defectos a la hora de controlar el partido. En demasiadas ocasiones se podía observar un amplio margen del campo, por el centro, sin ningún jugador sevillista ofreciéndose en la salida de balón de Banega o N’Zonzi. Varias pérdidas en esa zona originaron acercamientos peligrosos de los eslovenos. Pareja evitó el remate de Ahmedi muy cerca de Rico y Escudero el de Tavares desde la frontal. El brasileño lo intentó sin oposición un par de veces más, pero sin puntería.
Pese a todo, el Sevilla rondaba el área del Maribor con peligro. Los movimientos inteligentes de Ben Yedder creaban espacios. Y esta vez Berizzo dejó rienda suelta a los laterales, por lo que se vio a Corchia y a Escudero apoyando a Correa y Nolito con asiduidad. Es más, en el arranque se vio al Sevilla recurriendo a un arma desechada casi por sistema: los tiros lejanos. Lo probó Nolito con un tiro cruzado y dos veces Franco Vázquez con empalmes que se fueron altos por muy poco. Fue antes de la media hora cuando Ben Yedder, a la tercera, batió a Handanovic. Lo hizo empujando a placer un servicio de Correa, que se marcó un eslalon desde la banda para llegar a la línea de fondo tras dejar atrás a cinco rivales. Una pequeña-gran muestra de lo que se espera del argentino, tan irregular y desesperante como espectacular a veces.
El 1-0 tranquilizó al Sevilla, que confiaba en su mayor calidad para no verse sorprendido por alguna que otra pérdida en la medular. Lenglet, inconmensurable, se encargaba de vigilar, ayudando a un Pareja cada vez más limitado. Corchia y Escudero se podían sumar al ataque con relativa comodidad. Una internada en el área del francés derivó en penalti no pitado, justo antes de que Nolito probara de nuevo fortuna ante Handanovic, pero de nuevo le salió flojo. Justo antes del descanso llegó el remate del Sevilla. De nuevo Ben Yedder, esta vez trabajándose el gol con un buen desmarque y una excelente definición con la zurda, cruzándola tras un magnífico pase de Franco Vázquez.
El partido estaba visto para sentencia. Sólo le quedaba al Sevilla no correr riesgos innecesarios y, si podía, mostrar algo de brillo en sus combinaciones. El equipo hispalense, con 2-0, se gustó en la segunda parte rescatando su juego pausado de toque y toque, a veces con posesiones que se le hacían interminables. Un escenario ideal para Banega y un Franco Vázquez que se hace necesario en el equipo. De hecho, el Mudo se sacó de la chistera un enorme pase al área para que Ben Yedder, esta vez, se topara con Handanovic, que acertó su tiro raso casi a bocajarro. El Maribor apenas podía acercarse con peligro. Sólo Viler, de tiro ajustado pero flojo, puso un paréntesis al aburrimiento de Sergio Rico.
A falta de media hora, llegó el carrusel de cambios. Milanic buscaba un milagro con Kramaric y Hotic, mientras que Berizzo daba descanso a Nolito, al que le faltó chispa, y Franco Vázquez. Con Sarabia y Navas, el Sevilla seguía siendo insistente y rozó el 3-0 en varias ocasiones. La más clara fue de Navas, quien robó en la frontal y se topó con el larguero tras una talentosa vaselina. Remataría la faena de nuevo Ben Yedder, completando un triplete histórico –el primer sevillista que lo hace en la Liga de Campeones– gracias a un penalti clarísimo de Pihler sobre Corchia. Una noche redonda para el francés, que ya lleva siete goles, y para el Sevilla, que se coloca primero del grupo con dos puntos de ventaja respecto al Liverpool.
FICHA TÉCNICA
Sevilla FC: Sergio Rico; Corchia, Lenglent, Pareja, Escudero; N’Zonzi, Banega (Pizarro, min.86), Vázquez (Sarabia, min.79); Correa, Nolito (Jesús Navas, min.67) y Ben Yedder.
NK Maribor: Handanovic; Milec, Rajcevic, Billong, Viler; Kabha (Hotic, min.74), Vrhover; Pihler, Bohar (Kramaric, min.70), Ahmedi; y Tavares (Mesanovic, min.87).
Goles: 1-0, min.27: Ben Yedder. 2-0, min.38: Ben Yedder. 3-0, min 83: Ben Yedder (penalti).
Árbitro: Aleksei Kulbakov (BLR). Amonestó a Escudero (min.56).
Estadio: Ramón Sánchez-Pizjuán. 34.705 espectadores.