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Vitolo se felicita con Banega en el primer gol del Sevilla. / Manuel Gómez -
Tremoulinas da un pase ante la defensa de Neymar. / Manuel Gómez -
Coke pugna por un balón con Iniesta. / Manuel Gómez -
Busquets le pelea un balón a Bacca. / Manuel Gómez -
Carlos Bacca protesta una acción al árbitro. / Manuel Gómez -
Alves golpea la pelota ante el marcaje de Vitolo. / Manuel Gómez -
Bacca aplaude al final del partido. / Manuel Gómez
Sevilla vs Barcelona 2-2 All Goals and... por enteritament
Cuando a las 20.30 dos genios como Messi y Neymar habían silenciado el Sánchez-Pizjuán con dos golazos marca de la casa, medio mundo creyó que el Sevilla-Barça estaba visto para sentencia. El típico error de quien no se entera de cómo es el Sevilla. A las 21.50, el 2-2 que lucía el marcador del estadio proclamaba la justicia de un empate que se labró el equipo de Emery palmo a palmo, en un partido vibrante, con un Barça esplendoroso en la primera media hora y un Sevilla que no se rinde, que nunca se rinde. Así ocurrió todo, así fue una tarde de fútbol maravillosa en el Sánchez-Pizjuán:
Los 40.000 espectadores que se dieron cita en la Bombonera nervionense esperaban a un Barça dominador y a un Sevilla agazapado para dar zarpazos a la contra. Pero todos quedaron boquiabiertos tras ver una primera media hora primorosa del Barcelona, que tocaba, tocaba y tocaba, recuperaba el esférico en sólo segundos y apenas dejaba respirar a un Sevilla agobiado hasta límites que no se le recordaban. Un recital. En esa media hora, Messi y Neymar, con dos golazos, habían puesto el partido imposible para los de Emery (después se comprobaría, una vez más, que esa palabra no existe en el diccionario del sevillismo). No había protestas en Nervión. Era la reencarnación del mejor Barça de Guardiola, sobre todo a nivel defensivo. Un nivel que el Sevilla no es capaz de alcanzar.
El metro que Tremoulinas, al cuarto de hora, le dio a Messi en el área lo convirtió el astro argentino en una alfombra roja desde la que poner el esférico en el palo largo de Sergio Rico, que nada pudo hacer. Messi y el Sevilla, la historia de un abuso humillante. El toque del Barça acomplejó al Sevilla, que se limitaba a achicar agua como podía, a veces con faltas al borde del área. Así llegó el 0-2, obra de Neymar, que a balón parado la puso en la escuadra derecha de Rico, otra vez mero espectador. Incluso Luis Suárez pudo hacer el tercero, pero remató alto.
Dos golazos y una primera media hora de auténtico recital espoleó al público de Nervión, que siempre aparece en los momentos más débiles para sus jugadores. Cantó que le echaran huev... y los de Emery probaron a salir de la cueva, aún corriendo el evidente riesgo. Fue Iborra quien estrenó el área culé, rematando alto dentro del área. Entonces el Sevilla se dio cuenta de que tenía que arriesgar. Lo hizo y obtuvo premio. Banega se sacó un derechazo desde más de 30 metros que dobló la mano de Bravo, golpeó el palo y se coló en la portería. Se volvió loco Nervión y segundos más tarde, el argentino estaba plantado dentro del área, sin oposición para batir a Bravo, pero tardó unas milésimas de más que aprovechó Messi para taponarle el disparo. El Sevilla ya estaba excitado, resucitado.
El Sevilla no se rinde jamás. Quiso seguir atacando tras el descanso, generando peligro en las dos áreas. Dejó espacios atrás (Rico le detuvo un mano a mano a Iniesta y Luis Suárez, sin oposición, la tiró alta) y abrió huecos arriba (Bacca disparó alto desde dentro de área tras internada de Tremoulinas). El partido estaba muy divertido, podía llegar el 2-2 o el 1-3 jugada tras jugada. Luis Enrique pidió calma y apareció Iniesta para dormir el partido. Fue un desvelo. Emery reactivó el encuentro introduciendo a Mbia y Reyes. Luis Enrique reaccionó intentando esconder la pelota con Xavi. Pero ya nadie frenaba la excitación del Sevilla y de una grada poseída.
Las fuerzas las iba agotando el Sevilla, pero tiraba de corazón. Unai quemó las naves introduciendo a Gameiro por un agotado Bacca. Y volvió a acertar el vasco. Un tremendo error de Piqué, que hasta entonces estaba firmando un partidazo, lo convirtieron en el 2-2 Reyes, Aleix y Gameiro. Un contra letal, rápida. El espectacular Barça de la primera parte se había esfumado a base de la garra del Sevilla, que además puso la calidad que atesora. Los cinco últimos minutos sobraron, con el Barça arrodillado y el Sevilla extenuado. Tablas para dinamitar la Liga. Tablas para creer en este Sevilla impenetrable. El líder tampoco pudo con la fortaleza de Nervión. De pie ante el Sevilla.
FICHA TÉCNICA:
Sevilla FC: Beto; Coke, Nico Pareja, Carriço, Trémoulinas; Krychowiak, Iborra (Mbia, m.70); Aleix Vidal, Banega, Vitolo (Reyes, m.70); Bacca (Gameiro, m.75).
FC Barcelona: Bravo; Dani Alves, Piqué, Mathieu, Jordi Alba; Rakitic, Sergio Busquets, Iniesta (Pedro, m.86); Luis Suárez, Messi, Neymar Jr (Xavi, m.73).
Goles: 0-1, M.14: Messi. 0-2, M.30: Neymar, de falta directa. 1-2, M.38: Banega. 2-2, M.84: Gameiro.
Árbitro: Juan Martínez Munuera (C. Valenciano). Amonestó a los locales Krychowiak (m.29), Iborra (m.46), Banega (m.57), Reyes (m.77) y Mbia (m.82), y a los visitantes Busquets (m.61) y Piqué (m.62),
Incidencias: Partido de la trigésima primera jornada de la Liga disputado en el estadio Ramón Sánchez Pizjuán, que registró un lleno absoluto con cerca de 45.000 espectadores. Césped en perfecto estado. EFE