El Sevilla le gana al Betis el derbi del silencio (2-0)

Los de Lopetegui impusieron su superioridad en un Sánchez-Pizjuán en el que la falta de público no fue una merma para los locales

Juanmi Vega @Juanmivegar /
12 jun 2020 / 00:05 h - Actualizado: 12 jun 2020 / 00:05 h.
"Real Betis","Sevilla FC"
  •  Sevilla eclipsa al Betis en el regreso de la Liga. / EP
    Sevilla eclipsa al Betis en el regreso de la Liga. / EP

Había ganas por volver a disfrutar del fútbol y qué mejor que un derbi. Dijo Tebas hace unos días que será el Sevilla Betis más visto de la historia, pero la realidad es que, sin los aficionados, esto es un derbi descafeinado. Aún así, el Sevilla se impuso en su casa a un Betis al que no le dio ninguna oportunidad.

El Sevilla salió con Vaclik, Navas, Diego Carlos, Koundé y Reguilón en la defensa, Jordán Fernando y Óliver Torres en la medular. Bandas para Ocampos y Munir y con L. de Jong de delantero centro. El Betis formó con Joel, Álex Moreno, Sidnei, Barta y Emerson. Aleñá, Guido Rodríguez y Canales en el medio. Bandas para Tello y Fekir y en punta Borja Iglesias.

Los primeros minutos del partido fueron para descubrir y empezar a hacerse a la idea de lo que será el fútbol el resto de la temporada. Partidos donde se escuchan a los futbolistas pedir el balón, anunciar un desmarque o avisar al compañero de la presencia de un rival. Las voces de los entrenadores también son protagonistas.

Sevilla y Betis jugaron a lo que saben. El primero a jugar por las bandas y a buscar la cabeza de De Jong para que la baje y abra a Ocampos o a Munir. El Betis a tocarla y tocarla buscando la genialidad de Fekir o el disparo acertado de Canales. En los primeros 45 minutos, ninguna de las dos ideas funcionó.

El Sevilla estuvo más cerca de conseguir adelantarse en el marcador gracias a Ocampos en dos ocasiones. La primera, tras una finta a Alex Moreno y un disparo que se estrelló en la escuadra de la portería de Joel Robles. La segunda, en el tiempo extra, tras una buena jugada de De Jong, que abrió para Ocampos y éste tiró muy centrada, rechazándola Joel Robles sin problemas.

Los locales tuvieron otra oportunidad muy clara en la cabeza de Koundé, tras rematar un córner que se fue rozando el palo.

El Betis demostró en los primeros compases del encuentro que no iba a renunciar a su filosofía de juego, en la que saca el balón desde atrás y la toca esperando encontrar el hueco para que sus delanteros marquen.

Hubo varias ocasiones en las que esa salida desde atrás de la pelota estuvo a punto de jugarles una mala pasada.

El Betis se veía incapaz de llegar al área de Vaclik con peligro y no fue hasta el minuto 38, cuando Canales disparó desde fuera del área con mala fortuna.

En estos primeros cuarenta y cinco minutos, hubo momentos para recordar a Antonio Puerta, Miki Roqué y una ovación virtual, en el minuto, 20 emulando los aplausos dedicados a los sanitarios en pleno confinamiento.

La segunda parte comenzó con el único cambio de Feddal por Sidnei en el Betis.

El Sevilla arrancó muy enchufado. En el primer minuto de la primera segunda parte, Navas penetró por su banda y puso un balón al punto de penalti que Jordán no supo rematar.

En el minuto 54, Mateu Lahoz fue el protagonista. Un salto de Bartra sobre Luuk de Jong, que puso sus manos sobre el sevillista, fue interpretado como pena máxima. El VAR refrendó la decisión del colegiado.

Ocampos cogió el balón y chutó fuerte a la izquierda del portero para hacer el primer gol de los sevillistas, del derbi y del fútbol post confinamiento.

El gol fue producto de la superioridad del Sevilla, que poco a poco fue imponiendo su juego. Para que te piten un penalti, sea discutido o no, hay que llegar al área y el Sevilla llevaba 5 ocasiones de gol cuando le pitaron la pena máxima.

El gol supuso un chute de energía para el equipo blanquirrojo, que empezó a entrar por las bandas y a poner balones al área sin que ninguno de los jugadores de arriba fuera capaz de engancharla.

Rubi movió el banquillo y sacó al joven Diego Lainez por Cristian Tello, pero no le sirvió de nada porque la estrategia del Sevilla hizo acto de presencia.

Un córner sacado en corto, que puso Jordán al primer palo, Ocampos le dio de espuela y Fernando remató al fondo de la red. Segundo gol del Sevilla y casi treinta minutos por delante para el final del partido.

Cuando parecía que el Sevilla iba a seguir con el rodillo, el Betis empezó a sumar sus mejores minutos. Un balón de Alex Moreno, rematado por Borja Iglesias, se fue muy cerca de la portería de Vaclik.

Rubi decidió meter más dinamita y entraron en el campo Joaquín y Loren por Borja Iglesias y Aleñá.

Lopetegui no se quedó quieto y también movió el banquillo. Ocampos y de Jong se marcharon y entraron Banega y En-Nesyri. Un minuto después, Munir no pudo continuar y entró Suso.

Loren tuvo una oportunidad de oro para reducir distancias en el marcador tras una gran jugada de Lainez, que se la pasó a Emerson dentro del área y el brasileño se la pasó a Loren, que fue incapaz de rematar.

Ambos entrenadores aprovecharon sus cinco cambios y Rubi los completó dándole salida a Pedraza por Alex Moreno y Lopetegui al Mudo Vázquez y a Escudero por Reguilón y Óliver Torres.

Los últimos cinco minutos del partido fueron los mejores del Betis, con Fekir percutiendo como quería y Joaquín teniendo una oportunidad que gracias al cuerpo de Diego Carlos no fue gol.

Lo cambios de Rubi sí mejoraron al equipo, cosa que los de Lopetegui no consiguieron. Banega y el Mudo ni están ni se les espera y En-Nesyri no las huele. Loren, Joaquín y Lainez sí crearon peligro y mejoraron al equipo verdiblanco.

Con los cambios, las interrupciones y la pausa para hidratarse, Mateu Lahoz prolongó seis minutos el derbi del desconfinamiento y la desescalada.

El Sevilla ha demostrado que sigue igual que antes del parón y que es un claro candidato para la plaza de Champions. Al Betis le sigue sobrando ese último pase que hace que la pólvora llegue mojada al área. Mucho que trabajar, pero Europa sigue siendo posible.