La alarma en números

Las estadísticas sirven para corroborar sensaciones en la mayorías de los casos, y en el del Sevilla sólo hacen confirmar que el rendimiento hasta la fecha está muy alejado de lo que se le demanda a un equipo con las aspiraciones del nervionense, que ya ha tenido que cambiar de entrenador ante la crisis palpable. Si partido tras partido, salvo honrosas excepciones, el equipo sevillista ha venido demostrando dificultades tanto para atacar como para defender, las estadísticas acumuladas en la Liga tras 18 jornadas dicen que el Sevilla es el equipo cuyos porteros menos paradas realizan (38), penúltimo en intercepciones realizadas (184) y el octavo equipo más goleado (27, bastante lejos de sus competidores por los cuatro primeros puestos), además de tener a los delanteros que más veces caen en fuera de juego (77), ser el 10º equipo con más goles marcados (23) y el 9º en remates realizados al rival (166).

Hasta el momento, con la llegada de Vincenzo Montella se ha percibido cierta mejoría en la manera de atacar, pues el Sevilla acumula más hombres cerca del área rival (apostando por una idea más parecida a la del año pasado con Jorge Sampaoli, sobre todo en lo que a los laterales se refiere) y trata de hacer las transiciones más rápidas, aspecto en el que aún debe mejorar. Sin embargo, los problemas defensivos perviven en su máximo esplendor, como se pudo ver ante el Betis y el Cádiz en la media hora final de los dos encuentros dirigidos por el técnico italiano.

Es precisamente Montella quien, además de José Castro y Óscar Arias, presidente y director deportivo del Sevilla, centra gran parte de la atención por si decide cambiar el sistema hacia un 1-3-5-2 que el exjugador ha utilizado ya en sus anteriores equipos y que dio resultados positivos a Sampaoli la temporada pasada. El fichaje de Arana y el pretendido de Aleix Vidal invitarían a ese giro táctico demandado desde muchos foros. El cambio de dibujo estaría sustentado en intentar evitar estas estadísticas tan incompatibles con las alturas, pues hasta ahora la pizarra de Montella se parece en demasía a la del destituido Berizzo. El Sevilla sería 11º en la clasificación de las últimas 10 jornadas (el Leganés tiene un partido menos y le podría dar caza) y, algo que refleja el estado de forma de manera más notable, estaría en puestos de descenso en la clasificación del último mes y medio (cinco jornadas últimas): sólo el Levante (3 puntos) sumó menos que el Sevilla (4).