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Gameiro, Llorente e Immobile pueden hacer las maletas esta misma semana. / M. Gómez, P. Herrera y J.L. Montero
En cuestión de días –y quién sabe si de horas– el Sevilla verá cómo su delantera, la que diseñó hace ahora un año con vistas a la campaña 2015/16, cambia por completo. Tras la marcha de Carlos Bacca al Milan y de Iago Aspas al Celta, Kevin Gameiro quedó como único superviviente en lo que a puntas de lanza se refiere, si bien poco después presenció tanto la llegada de Ciro Immobile como la de Fernando Llorente. Dos futbolistas de distinto corte y con mucho que demostrar después de que sus respectivas etapas en el Borussia Dortmund y en la Juventus no fueran para ellos todo lo positivas que ambos habrían deseado en cuanto a protagonismo en el equipo. Sin embargo, las grandes expectativas creadas por su llegada a Nervión a base de talonario nunca encontraron la respuesta que los sevillistas esperaban.
Kevin Gameiro fue el único de los tres que rindió a buen nivel. Y más que a buen nivel... a un nivel excelente, lo que le permitió erigirse en el gran nombre propio del Sevilla en el curso 2015/16. Nada menos que 29 goles en una temporada para enmarcar... que ahora le sitúa en la rampa de salida. El Atlético de Madrid puja por él, hasta el punto de que su traspaso podría cerrarse en cualquier momento.
El conjunto de Simeone se marcha hoy a Australia, viaje que podría perderse Luciano Vietto, a quien el Sevilla pretende con el Barcelona de fondo. Ayer, Gameiro se entrenó con sus compañeros en tierras alemanas y no se descarta que pueda abandonar la concentración en cualquier momento, una vez que el club de Nervión le de vía libre, previo acuerdo con el Atlético.
El Sevilla es consciente de lo que supone la marcha de Gameiro y de lo atenta que está su afición, que no quiere ver marchar a su ídolo a un equipo como el colchonero y encima por una cantidad inferior a los 40 millones de su cláusula de rescisión.
Paralelamente, la entidad aguarda la desvinculación de Immobile (en Italia ultimando su fichaje por el Lazio) y de Llorente, que no viajó con el plantel y podría tener su futuro en la Real Sociedad. O lo que es lo mismo: el Sevilla puede quedarse sin delantera prácticamente de un plumazo, aunque la llegada de sus sustitutos debe producirse también con celeridad. Viettto, Lucas Pérez... La lista de opciones está ahí y la completan más atacantes, pero el club guarda con celo sus cartas y no se descarta, de hecho, alguna sorpresa... e importante.