Pegados al banquillo

Los suplentes del Sevilla, sobre todo Ganso y Correa, no inquietan a los titulares

13 nov 2016 / 07:43 h - Actualizado: 12 nov 2016 / 20:51 h.
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  • De izquierda a derecha, Ganso, Iborra, Kranevitter, Correa, Kiyotake, Ben Yedder y Sirigu, durante el partido del Sevilla ante el Barcelona.. / M. Gómez
    De izquierda a derecha, Ganso, Iborra, Kranevitter, Correa, Kiyotake, Ben Yedder y Sirigu, durante el partido del Sevilla ante el Barcelona.. / M. Gómez

El partido que el Sevilla jugó el pasado viernes ante el Boca Juniors volvió a demostrar que existe un amplio margen entre los habituales titulares y los que moran en el banquillo de forma asidua. Que Sampaoli ha encontrado a un once titular fiable y que está a un excelente nivel es tan evidente como que jugadores llamados a desempeñar un papel importante en esta temporada aún no se han adaptado a la velocidad de crucero adoptada por el Sevilla. Joaquín Correa (13 millones), Paulo Henrique Ganso (9) e Hiroshi Kiyotake (6) son los tres casos más representativos, aunque con matices.

Mientras el centrocampista brasileño llegó más tarde que el resto y lesionado, el argentino es uno de los fichajes más caros de la historia del club y aún no ha dado muestras de su calidad, desaprovechando oportunidades como ante el Boca Juniors. El caso de japonés es diferente: no ha rendido mal en sus apariciones, pero sus continuas citaciones con Japón lo han apartado de no pocas convocatorias de Sampaoli, que así lo reconoció. Mientras Ganso parece que va adaptándose al ritmo europeo y poco a poco va aprovechando sus escasos minutos –ante el Boca Juniors, aunque sin brillar, mostró compromiso y personalidad–, el Tucu Correa no despierta. En los dibujos habituales del equipo (1-3-5-2 o 1-4-3-2-1), el ex de la Sampadoria sólo encontraría hueco apartando a Vitolo o Franco Vázquez del once, algo casi imposible en estos momentos. Pero es que además, otro de los habituales suplentes que sí hace por despegarse del banquillo, Pablo Sarabia, le ha adelantado por la derecha a base de buenas actuaciones acompañadas de asistencias y goles importantes. La otra posibilidad que se le presenta es dar respiro a los delanteros, en una posición más adelantada que también se le cierra a cal y canto en cuanto sólo juega un punta. A Correa, más allá del precio que costó, parece faltarle un punto más de competitividad.

Ben Yedder, sin embargo, es otro de los que se salvan. Aunque el francés es demasiado intermitente –no se le recuerdan dos buenos partidos consecutivos–, lleva un buen promedio de goles y la falta de un tercer delantero, unida al apretado calendario, le hace ser el jugador número 12 o 13 para el entrenador. Situación muy parecida a la antes referida de Sarabia y algo mejor que la de un Vicente Iborra que no parece agachar la cabeza ante el empeoramiento evidente de su situación con el cambio de entrenador, quien incluso ha preferido en las últimas ocasiones a Kranevitter antes que al valenciano. Ninguno brilló cuando jugó en este equipo destinado al toque y a pocos pelotazos.

Más problemas tiene el Sevilla en la defensa. Con Sergio Rico, Mariano, Rami, Pareja, Escudero y Mercado a un nivel excelente, las apariciones de Sirigu, Kolo y Carriço han generado una clara desolación en Sampaoli, quien directamente ha apartado al francés de las últimas convocatorias y tiene reservado un papel totalmente secundario para el portero italiano y el central luso.