Roque Mesa: más que un fichaje, un pilar

El centrocampista ha pasado de pensar en dejar Nervión por su ostracismo con Montella a convertirse en uno de los estandartes del nuevo proyecto

23 jun 2018 / 08:00 h - Actualizado: 22 jun 2018 / 21:20 h.
"Sevilla FC","Roque Mesa"
  • Joaquín Caparrós anima a Roque Mesa en su primer partido juntos, ante la Real Sociedad. / Manuel Gómez
    Joaquín Caparrós anima a Roque Mesa en su primer partido juntos, ante la Real Sociedad. / Manuel Gómez

Ver a un futbolista como Roque Mesa en el banquillo e incluso en la grada llamaba poderosamente la atención. Su llegada al Sevilla en el mercado invernal del pasado curso supuso una excelente noticia para un equipo necesitado de efectivos con calidad y fuelle. En su día, Monchi tuvo prácticamente cerrado su fichaje, pero el canario se quedó finalmente en la Unión Deportiva Las Palmas, siendo traspasado más tarde al Swansea.

En el conjunto de la Premier, lejos de poder mostrar su nivel, Roque Mesa careció de protagonismo y el Sevilla, atento a su situación, le convenció para que se incorporase al equipo. Una apuesta sin visos de otro resultado que no fuese ganador.

Sin embargo, las grandes expectativas del centrocampista chocaron con las decisiones de Vincenzo Montella. El entonces entrenador del Sevilla tan sólo le dio 72 minutos de juego, repartidos en tres encuentros. Un ostracismo que llevó al canario a replantearse su futuro seriamente... antes de la llegada de Joaquín Caparrós.

El utrerano se hizo cargo del plantel con el reto de clasificar al Sevilla para la Europa League y desde el primer día contó con él. Tanto que fue indiscutible en tres de esos cuatro choques –saldados con tres victorias y un empate– y sólo en uno de ellos (Real Madrid) se quedó inicialmente en el banquillo.

Para Caparrós, Roque Mesa debía ser titular. Por ello, le dio su sitio, confianza y minutos sobre el césped, y el canario respondió como mejor sabe: desplegando su fútbol y brillando con luz propia en aquellos cuatro decisivos partidos, esa luz que la afición esperaba ver desde hace mucho tiempo.

CONSECUENTES. El final de la temporada propició un cambio de escenario. Por un lado, Roque Mesa tenía que regresar al Swansea tras su cesión; por otro, Caparrós asumía el cargo de director de fútbol. No fue problema: el futbolista y el club decidieron prolongar su vinculación ejecutando la opción de compra firmada en su día, que ronda los 8 millones de euros. El Sevilla lo tuvo claro: Roque Mesa debe ser uno de los pilares de su nuevo proyecto y lo será oficialmente en los próximos días. Sin duda, una gran operación a priori con un jugador de nivel e identificado con la causa.