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Los jugadores del Manchester City celebran un gol. / MCFC
Matemáticamente el Sevilla aún no está clasificado para la próxima Champions League, aunque todo hace indicar que lo certificará en las dos jornadas que le restan a la Liga 2016-17, pues a los de Jorge Sampaoli les hace falta sumar un solo punto. De hecho, el Sevilla todavía tiene opciones incluso de quedar tercero –tendría que ganar en el Santiago Bernabéu al Real Madrid y al Osasuna en el Sánchez-Pizjuán y que el Atlético perdiera sus dos encuentros ante el Betis y el Athletic–. Lo normal, salvo hecatombe sevillista o atlética es, pues, que el Sevilla finalice en cuarto lugar.
Tal puesto le haría debutar en la Champions a finales de agosto, en la ronda de play off que los tres primeros clasificados en la Liga se saltan. Y en ese play off, que lo jugaría en el grupo de no campeones de liga, se codearía con equipos de gran potencial, siendo perfectamente posible un cruce con un equipo puntero en Europa.
De hecho, a falta de muy pocos partidos para el final en las diferentes ligas europeas, en Alemania el Hoffenheim le pelea seriamente al Borussia de Dortmund (que lo aventaja en dos puntos y el goal average) el último billete directo a la fase de grupos, y en Inglaterra se clasificará uno de estos grandes: Manchester City (actual cuarto), Liverpool (tercero), Manchester United (quinto) o Arsenal (sexto). En Italia, cuyo tercer clasificado es el que jugará el play off, el puesto se lo jugarán entre Roma y Nápoles –un punto de ventaja para el equipo de Monchi–, aunque el Lazio aún tiene opciones matemáticas de coger al cuadro napolitano. Mientras que en Portugal, en similar escalafón que Italia, el tercero será, salvo sorpresa, el Sporting de Portugal, que aventaja en cinco puntos al Vitoria de Guimaraes (cuarto) y tiene seis de desventaja con el Oporto (segundo).
Y es que esa primera ronda de la Liga de Campeones se dividirá en dos: por un lado jugarán entre sí aquellos equipos que superaron la fase previa y que fueron campeones en sus respectivos países pero que por coeficiente de su liga no acceden a la fase de grupos directamente (Grecia, República Checa, Rumanía, Austria, Croacia, Suecia, Serbia, Polonia y Escocia, entre otros); y por el otro, el resto de equipos no campeones de liga, entre los que se encontrarían los grandes cocos, es decir, los equipos punteros de los grandes torneos y los que pasaron la fase previa y no conquistaron el título en su país.
La situación que le esperaría al Sevilla sería similar a la vivida por el Villarreal la pasada temporada, en la que se despidió de la Champions precisamente en esta primera ronda. Al cuadro castellonense le tocó el Mónaco, tercer clasificado en la pasada Ligue 1 –y que participó en la fase previa– y actual semifinalista del torneo, nada menos. También jugaron el play off en la parte de no campeones de liga –la que disputaría el Sevilla– Manchester City, Oporto, Roma, Ajax o Borussia de Monchengladbach, entre otros. Buena muestra del nivel que provoca la división en dos de esta ronda inaugural de la Liga de Campeones. Además del Villarreal, quedaron apeados a las primeras de cambio la Roma y el Ajax, con un pie en la final de la Europa League.
La única vez que el Sevilla perdió el play off fue en 2010 –la última ocasión en la que se clasificó para la Champions a través de la Liga, con Manolo Jiménez y Antonio Álvarez a los mandos–. Entonces el proyecto Champions se torció nada más empezar, pues el equipo sevillista cayó contra todo pronóstico frente al Sporting de Braga portugués, posteriormente subcampeón de la Europa League. En 2007 sí superó la eliminatoria ante el AEK de Atenas.
El Sevilla, eso sí, sería uno de los cabezas de serie en el sorteo, por lo que evitaría a otros favoritos. En el ránking UEFA actual sólo el Dortmund supera en coeficiente a los de Nervión, octavos.