Brahim se reivindica con Marruecos y su 'amigo' Mbappé alucina con él

Todos los focos están puestos en la llamada ‘BMV’, siguiendo al segundo los movimientos, gestos y acciones de Bellingham, Mbappé y Vinicius. Algo que ha soliviantado a un Rodrygo que ha mostrado sus celos por quedarse fuera de las portadas en este inicio de temporada, en la que se siente maltratado por la prensa y por el jurado del Balón de Oro, que no lo ha incluido entre los 30 candidatos a ganar el galardón.

Sin embargo, hay una figura que está destacando sobre el césped pese a no levantar la voz ni reclamar la atención en las redes sociales. Se trata de Brahim Díaz, un jugador que se ha ganado un estatus que, pese a no corresponderse con los minutos de los que disfruta, no ha dejado de ganar peso dentro de la plantilla.

El jugador número 12

A sus 25 años, el malagueño es un jugador que cuenta con el respaldo del staff, ya que tanto Carlo Ancelotti como especialmente su hijo Davide, le tienen en alta estima por lo que puede aportar al equipo. Titular en uno de los cuatro partidos en Liga de los blancos, en los 93 minutos de los que ha disfrutado hasta el momento ha anotado un gol y participado en otro con una asistencia. Números que confirman lo que mostró la pasada temporada, que es un jugador desequilibrante en el tercio final del campo. La pasada campaña participó en 31 partidos de Liga, siendo titular en 18, en Los que anotó 8 goles y repartió 6 asistencias en los 50 minutos de promedio de los que disfrutó por encuentro. Al concluir el curso intervino en 21 goles del campeón de la Champions, marcando 12 y asistiendo en 9 en los 2066 minutos que jugó. Generando, por tanto, una media de un gol por partido.

Al finalizar la temporada los Ancelotti le felicitaron por su desempeño y su actitud y el jugador se marchó de vacaciones muy afianzado en el vestuario, en el que se convirtió en el jugador número 12 de la rotación. Una de las cosas que han destacado siempre Carletto y su hijo de Brahim es que es el primer jugador en activar la presión arriba, lo que arrastra al resto del grupo a apretar a los rivales. Es un jugador que contagia al equipo. Su agresividad ofensiva y defensiva es muy del gusto de los técnicos blancos. Además, no hay compañero que no hable bien del internacional marroquí, que además se ha convertido en el jugador más cercano a Kylian Mbappé.

El amigo de Kylian

Kylian, que ha llegado al vestuario con perfil bajo y con humildad, ha encontrado en Brahim una complicidad que le ha facilitado enormemente la integración en el grupo. En los entrenamientos comparten ejercicios juntos y se desafían continuamente, relación que también han estrechado fuera de la cancha, donde han llegado a salir a cenar como buenos amigos que son en más de una ocasión.

A todo esto se suma que desde que Brahim ha dado el paso de nacionalizarse marroquí, en virtud al origen de su madre, su estatus de estrella internacional se ha disparado en el panorama. En los seis partidos en los que ha lucido el 10 de los ‘Leones del Atlas’ no ha dejado de crecer. En la pasada ventana de selecciones pasó de protagonista a héroe después de marcar en los dos partidos de clasificación para la Copa de África. Primero anotando un gol en la goleada de Marruecos (4-1) sobre Gabón y luego saliendo del banquillo para rescatar a Marruecos con el tanto el gol de la victoria de los norteafricanos sobre Lesoto (1-0) en el minuto 93. Eran sus dos primeros goles, que sumaba a dos asistencias que ya había repartido ante Zambia y Congo. La ‘Brahimania’ se ha desatado en Marruecos.

El madridista regresa muy reforzado de la ventana de selecciones y los Ancelotti son conscientes del buen momento de juego del ex del City. Tanto Carlo como Davide fueron los primeros en aprobar el regreso del jugador de Milan, donde se convirtió en jugador de referencia de los rossoneros junto a Leao y Theo Hernández. La temporada pasada Brahim asumió el rol de ‘relevo de Bellingham’, jugando en su posición y con los galones del inglés en ataque cuando Jude, ya fuera por lesión o por descanso, dejaba su sitio. Pero en este curso parece que Brahim pide más protagonismo por más que la competencia haya aumentado con la llegada de Kylian, el nuevo mejor amigo de Brahim.