Retirada

Iniesta, el hombre de los goles milagrosos, se retira del fútbol a los 40 años

El excentrocampista del Barça anunciará su decisión en un acto en Barcelona el 8 de octubre

Andrés Iniesta celebra el gol que dio a España el Mundial de 2010.

Andrés Iniesta celebra el gol que dio a España el Mundial de 2010. / EFE

Albert Guasch

Andrés Iniesta, el hombre de los goles milagrosos, ha decidido retirarse a los 40 años. El excentrocampista del Barça ha optado por poner punto y final a una de las carreras triunfales del fútbol español. En un acto el día 8 de octubre en Barcelona dará oficialidad a su adiós a un deporte en el que lo ha ganado todo.

El autor del gol en la final del Mundial de Sudáfrica y de Stamford Bridge ha pasado el último año en Dubái con su familia, entrenando y manteniéndose en forma después de una temporada jugando en los Emiratos Árabes tras una larga estancia en Japón.

Iniesta ha meditado durante todo el verano sobre si debía seguir jugando al fútbol un año más o apartarse definitivamente. Había tenido varias ofertas, pero al final ha elegido otro camino. Con un vídeo distribuido en sus redes sociales, insinúa su decisión. En él se ve al artista del grafiti TV Boy que juega con el número 8, el de toda su vida, y lo tumba para mostrar el signo del infinito y en el que se lanza la idea de que ya piensa en el futuro. "To my future", dice.

Futuro como entrenador

Desde hace tiempo piensa en sacarse el título de entrenador y por ahí planea encaminar su futuro inmediato, como ha dicho en diferentes ocasiones. Ahondará en ello en el acto de la semana que viene.

A pesar de que en sus inicios tuvo que superar las dudas que generaba su físico, su calidad le hizo sobresalir por encima de los demás. Llegó a la Masia siendo un niño de 12 años y se fue 22 años después habiendo triunfado con el Barça como solo lo logran los elegidos. Ganó 4 Champions League, 3 Mundiales de Clubes, 9 Ligas, 3 Supercopas de Europa, 6 Copas del Rey y 7 Supercopas de España.

Con la selección española se convirtió en la mayor leyenda de la historia con un Mundial, obtenido gracias a su gol en la prórroga ante Holanda, y dos Eurocopas, con MVP incluido en la de 2012.

Debutó en el Barça con Louis van Gaal (fue el niño que sentó a Riquelme, futbolista hecho) creció con Frank Rijkaard (apareció en la final de París para dar el triunfo en 2006) y sublimó el fútbol con Pep Guardiola (2009) y la España de Luis Aragonés y Vicente del Bosque (2008-2012).

La suerte de los elegidos

Iniesta ha sido un mago del balón, un futbolista que dominaba la finta, el recorte y la carrera larga como si fuera una bailarina con botas. Encima, siempre tuvo suerte. La suerte de los elegidos. En los momentos cruciales aparecía con remates que desbordaban la euforia.

El día que batió a Peter Cech, del Chelsea, en las semifinales de la Champions, miles de catalanes se despertaron eufóricos al día siguiente. Hasta se desveló un repunte de la natalidad nueve meses después. El día que culminó una asistencia de Cesc, en la inolvidable final de Johannesburgo, millones de españoles se lanzaron a las calles para celebrar el primer Mundial de la historia de España. La estrella que pende encima del escudo cada vez que juega la Roja es un recuerdo a aquel empalme infinito, como el 8 tumbado mostrado en el vídeo con TV Boy.

"Hay cosas que no se pueden soñar", dijo en una entrevista a este diario en el décimo aniversario del gol de Sudáfrica. "Cuando era pequeño, yo tenía el sueño de ser jugador de fútbol, de ser jugador de élite, por así decirlo. De Primera División. Pero tampoco cuando era pequeño soñaba con ganar un Mundial. Una vez estás en el lío y estás en todo, pues, evidentemente, que esos sueños se pueden convertir en realidad. Pero también sabes, y más cuando eres ya un profesional, que conseguir cosas así tan elevadas es prácticamente imposible. Pero, al final, lo conseguimos".

Todos sus logros, no obstante, tuvieron un lado amargo. Sufrió varias lesiones musculares que le martirizaron y que pusieron en riesgo su participación en el Mundial y tuvo que confrontar problemas de salud mental, en particular tras la muerte de su amigo Jarque, al que le dedicó el gol de Johannesburgo.

En su libro 'La jugada de mi vida', sobre su depresión, relató: “De repente uno empieza a encontrarse mal. No sabe por qué, pero un día está mal. Y al siguiente también. Y así, día tras día, no mejoras. El problema es que no sabes lo que realmente está pasándote. Me hacen un montón de pruebas. Todas salen perfectas. Pero mi cuerpo y mi mente se desencuentran, se alejan. Nada produce mayor congoja que no saber las cosas que te pasan… La bola se va haciendo cada vez más grande. Te encuentras mal y la gente que te rodea no lo entiende. Y el Andrés que conoce todo el mundo se está quedando vacío por dentro. Eso es duro, muy duro…” 

La carta de Xavi

Xavi, su compañero de mil batallas, escribió una carta a Iniesta hace seis años que publicó El Periódico de Catalunya. "Andrés es, para mí, el jugador con más talento de la historia de España, que yo haya visto, eh…. Tiene un talento espectacular. Si hablamos de la persona, es un escándalo. Un tío admirable en todos los sentidos. Ejemplar, altruista, empático, jugador de equipo, ganador, líder en el campo, siempre quiere el balón… ¿Sabe la gente lo que significa eso? Cuando muchos no quieren la pelota ni en pintura porque es una encerrona, él siempre la pide. Andrés siempre la quiere. Cuando otros jugadores piensan “ay, ay, ay” o “no, no me la des, por favor, ahora no”, Andrés venía y decía: “Venga, dámela. Dámela ya, por favor. Es una bendición para los demás. Eso es tener personalidad, eso es ser un líder de verdad. Líder silencioso, pero líder auténtico".