Topuria cimenta su legado en UFC con un KO histórico a Holloway

Ilia Topuria (16-0) demostró ante Max Holloway (26-8) en el UFC 308 por qué el cinturón mundial del peso pluma de la UFC no pertenece en otro lugar que sobre sus hombros.

El hispanogeorgiano, como una fuerza indomable que jamás retrocede, no tuvo piedad ante una leyenda de la empresa, a quien noqueó en el tercer asalto para cimentar, ahora si, su legado en la mayor liga de artes marciales mixtas del planeta. El Etihad Arena lució como un templo de gladiadores para ver florecer la decimosexta rosa de 'El Matador', que también se llevó el bono a 'Actuación de la noche'.

Topuria se mostró como el campeón inquebrantable de las 145 libras. Ha venido para quedarse y no tiene intención de claudicar en el octágono. No hubo piedad en sus golpes, ni vacilación en su mirada. Cada movimiento fue un verso en el poema feroz de un guerrero que pelea como si el destino mismo se esculpiera en cada round.

Topuria reta a Max al centro

El inicio fue el esperado. Ilia Topuria, como llevaba avisando esta 'Fight Week', retó a Holloway al centro del octágono en los primeros segundos. No nos había mentido y quería el KO más espectacular de la historia. Max no aceptó el desafío y ahí empezó el hispanogerogiano a dominar el centro del octágono. Intercambio de jabs entre ambos. Max quería mantener la distancia y sacaba de su arsenal patadas a la pantorrilla que no eran nada para su rival. Eso sí, a Ilia le estaban entrando algunos rectos aunque lo negase con una sonrisa.

Estaba juguetón y eso era bueno para sus intereses. La tensión podía cortarse con un cuchillo y el respetable abucheaba al hispanogeorgiano, que mantenía el centro de gravedad bajo y cabeceaba como si de un tiburón acechando a la presa se tratase.

Ilia noquea a la historia

En el segundo asalto Ilia empezó a encontrarse cómodo con las low kicks y afilaba la puntería en sus combinaciones, pero siempre le faltaba el golpe final. Max era ágil y conseguía evitar los golpes de poder, afectando el rostro de Topuria también en los contraataques. El púgil de 32 años no estaba cómodo, sabía que el huracán de Georgia acechaba.

Pero si Ilia había avisado que iba a ser el primero en apagarle las luces a Holloway era por algo. Ya en el tercer asalto, 'El Matador' consiguió entrar en la distancia del hawaiano y desató su descomunal volumen de golpeos. Era una máquina de sacar 'bombazos' y, tras arrinconar a su presa, sacó un crochet de izquierdas venido del mísimismo infierno para mandar a Max a la lona y finalizarlo con 'Ground and pound'. Topuria seguía siendo el rey y era el primero en noquear a Max Holloway en su carrera. Se desataba la locura en el Etihad Arena, con decenas de aficionados españoles celebrando otro histórico triunfo de Ilia.

Ilia Topuria sigue siendo el campeón del mundo de la UFC, ya no necesita palabras para demostrar su grandeza. En la capital de los Emiratos Árabes, Ilia no solo retuvo el cinturón; se consagró una vez más como el dueño absoluto del peso pluma.

Quiere una revancha ante Volk

Ilia se deshizo en elogios a su rival nada más finalizar el pleito: "Derrotar a una leyenda como Max Holloway es algo que no me puedo creer. Él ha sido un ejemplo para una generación y yo quiero representar a esta nueva generación"

Topuria afirmó también que quiere la revancha con Volkanovski: "Lo volveremos a hacer. Si alguien se merece la revancha es él" dijo el hispanogeorgiano, que también tiene el nombre de Diego Lopes en su cabeza.

¿Qué sigue para Topuria?

Esta victoria ante Holloway servirá como 'trampolín' para Ilia y su capacidad de decisión respecto a su futuro inmediato. Los matchmakers de son los que tendrán la última palabra, aunque hay dos caminos claros. El primero, el más sensato, el de hacer otra defensa dentro del peso pluma. Los principales candidatos a medirse con 'El Matador' serían Diego Lopes, el mayor talento emergente dentro la división y sustituto de emergencia en el combate estelar del UFC 308, y la revancha con Alexander Volkanovski, a quién Topuria le arrebató este mismo cinturón en febrero. El segundo, el más atrevido, el subir una categoría y medirse al mejor peleador del mundo y número uno en el libra por libra, Islam Makhachev, en busca de la doble corona.

Una cartelera espectacular

Khamzat Chimaev no decepcionó a la parroquia local y sometió a Robert Whittaker en el combate coestelar de la noche. El checheno atacó el double leg nada más empezar y desgastó al australiano hasta la extenuación. Le acabó asfixiando en los últimos segundos del primer asalto. Khamzat vuelve a irrumpir en la promotora por la puerta grande y tiene una cosa entre ceja y ceja, el cinturón del peso medio.

La cartelera estelar arrancó con un TKO espectacular de Shara 'Bullet' Magomedov sobre Arman Petrosyan en el segundo asalto. El daguestaní, tras un tanteo en el primer round, sacó su mejor Muay Thai y finalizó al armenio con un doble codazo que levantó a todo el público. Shara sigue invicto y amplía a 15-0 su récord profesional; tiene mucho que decir dentro del peso medio. Más apático fueron Ige y Murphy en un enfrentamiento que se llevó el inglés por decisión unánime para mantener, también, su récord perfecto (15-0). El de Manchester pidió a Josh Emmett, ex víctima de Topuria, para su siguiente combate en el peso pluma. Lerone incluso tuvo tiempo para guiñar un ojo a SPORT en su salida camino a vestuarios.

El Ankalaev y Rakic, duelo en la categoría del semipesado, fue un pleito de poder a poder en el que el daguestaní dominó, encontró el centro, pudo soltar unos directos de izquierda devastadores, pero no fue capaz de tumbar a Rakic. El ruso se llevó la decisión unánime y pidió ser el próximo rival al trono de Alex Pereira: "Para de huir de mi" dijo el ruso al finalizar.

'El Maño' salió lesionado en la preliminar

Chris Barnett, el otro representante español de esta cartelera, fue uno de los grandes perdedores de la noche y cayó por TKO en el primer asalto ante Nzechukwu. 'El Maño' fue víctima de una lesión en su rodilla que lo limitó por completo a los pocos minutos de empezar . Su rival, un 'monstruo' nigeriano de 2'11 metros, lo encerró de espaldas a la jaula y Barnett acabó claudicando ante los puños de hierro que caían desde el cielo. El nacido en Zaragoza tuvo que ser ayudado por su equipo al salir de la jaula.

Unos minutos más tarde vivimos la batalla más sangrienta de la cartelera. Mateusz Rębecki venció por decisión dividida a Myktybek Orolbai en un combate épico y lleno de violencia que encendió a la parroquia del Etihad Arena.

No quedó más que levantar y aplaudir a estos dos guerreros, sobre todo al de Kirguistán, que se fue sin el premio pero con el rostro completamente hinchado. En el resto de la cartelera preliminar obtuvieron victorias Fakhretdinov (unánime), Naurdiev (unánime), Basharat (unánime), Magomedov (sumisión), Geoff Neal (TKO) y Aslan (TKO).