Más de la mitad de los andaluces ve inasumible acceder a una vivienda

El acceso a la vivienda es una de las grandes preocupaciones de la población española, especialmente entre los jóvenes. La subida de los precios, tanto en lo que se refiere a compra como al alquiler, dificultan la emancipación de muchos andaluces y también el cambio de hogar entre las familias que ya cuentan con un sitio en el que vivir. Se trata, de hecho, de uno de los problemas que aparecen de manera recurrente en los barómetros del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS). En el mes de octubre, era percibido por los encuestados como el tercer problema que más les afecta directamente -era el quinto hace apenas tres meses-. El portal Idealista asegura que, en un año, el coste de la venta de inmuebles se ha incrementado casi el 10% en Andalucía.

El II Informe El viaje del comprador en España, elaborado por la plataforma inmobiliaria Culmia y que recoge datos de la comunidad, asegura que más de la mitad de los andaluces encuestados (el 54%) considera que las opciones de vivienda en el mercado actual "no se ajustan a sus expectativas económicas". "Este dato confirma la tendencia expuesta en el informe anterior, que señalaba que todos los grupos de edad coinciden en la necesidad de contar con más viviendas con precios y condiciones más asequibles", señala el estudio. Solo el 14% declara que sí cumple con sus expectativas.

Una cuestión que está íntimamente relacionada con el porcentaje que ha pensado acceder a una vivienda asequible o con algún tipo de subvención pública, en concreto, seis de cada diez. Sin embargo, el 17% no ha solicitado ayudas al considerar que no les corresponde, y solo el 4,6% ha pedido un aval del ICO, mientras que casi el 5% ha optado a las ayudas dirigidas a la adquisición en el entorno rural que contempla el Plan Estatal de Vivienda.

"Estos porcentajes refrendan las conclusiones del informe que Culmia presentó el pasado julio en Andalucía referente a las necesidades de vivienda asequible de la comunidad", señala la plataforma inmobiliaria, un estudio que mostraba que la comunidad precisa de un total de 160.000 viviendas, divididas entre viviendas asequibles y públicas, sumadas a otras 39.000 que requerirían ayudas de cara a fomentar la incorporación al mercado Build to Sell (construir para vender). "Y que para satisfacer esta demanda, se necesitaría una inversión pública de 7.731 millones de euros, lo que implica un gasto anual de 386,5 millones de euros en un programa a 20 años, equivalente al 0,21% del PIB de Andalucía", añade. 

La vivienda en propiedad, la opción mayoritaria

Esta circunstancia casa además con otro de los resultados que arroja el informe y que se refiere a que, aunque la propiedad sigue siendo la preferencia mayoritaria, crecen las alternativas como el alquiler asequible y la Vivienda de Protección Oficial. De este modo, son ya más del 15% los que prefieren la primera opción.

Otra de las cuestiones que refleja el estudio está relacionado con las expectativas más allá de la cuestión económica entre los compradores. Así, el 18,5% de los andaluces encuestados aseguran que las opciones de vivienda que actualmente hay en el mercado inmobiliario "no se adecúan a sus intereses de espacio y diseño", mientras que más del 33% afirma que el hecho de que la vivienda sea saludable -que ofrezcan elevados estándares de sostenibilidad y salud- determina su compra. En este último caso, son los mayores de 65 años los más condicionados por esta circunstancia.

¿Cómo será la vivienda del futuro?

Sobre la vivienda del futuro, el informe de Culmia explora también la percepción de los andaluces respecto a la vivienda del futuro, y analiza las tendencias emergentes que moldearán los hogares en el medio y largo plazo. Entre los valores imprescindibles que los andaluces relacionan con la casa del futuro se encuentra el precio asequible, en un 28,5%, la sostenibilidad y eficiencia del hogar, 27%, seguido de la autosuficiencia energética, un 22%.

Como novedad en esta edición, el estudio analiza la opinión de los niños y las niñas respecto a este asunto. "Imaginan un futuro donde las casas estarán profundamente ligadas a la inteligencia artificial, con todos los dispositivos y electrodomésticos conectados a internet. Visualizan hogares automatizados, donde la luz, los aparatos y las tareas del hogar serán gestionados por robots y controlados mediante comandos de voz o mandos a distancia. Además, asocian la inteligencia artificial no solo con la comodidad de dar instrucciones, sino también con la eficiencia y el ahorro energético que brindará en el funcionamiento de las casas inteligentes", apunta el informe.