Airbus dice que el A400M es «estable» y pide una inversión sostenida

El A400M, del que España rebirá dos unidades más este año, ha entrado en «una senda de estabilidad»

06 may 2019 / 12:51 h - Actualizado: 06 may 2019 / 13:00 h.
  • Airbus dice que el A400M es «estable» y pide una inversión sostenida

Airbus ha reclamado este lunes unos niveles de inversión en I+D+i para la industria aeroespacial y de Defensa en España, semejantes a los de otros países europeos como Francia, Alemania y Reino Unido y, sobre todo, un "plan predecible" de financiación sostenido vía presupuestos, que supere lo cambios de legislaturas para un sector industrial de "largo ciclo".

Durante el VIII Encuentro Accenture Aerospace & Defense, organizado por Executive Forum, el presidente de Airbus en España, Alberto Gutiérrez, ha afirmado que toca "poner financiación suficiente" y sobre todo, "estable" al recientemente plan sectorial estratégico, con el que se prevé duplicar la facturación del sector aeroespacial español hasta alcanzar el 1% del PIB en 2025.

"El sector aeroespacial y de Defensa no puede estar sometido a los cambios de legislatura, se requiere una política industrial que vaya más allá de las legislaturas", ha insititido Gutiérrez, que ha instado a que España no se "quede atrás" y participe en todas aquellas iniciativas europeas.

Gutiérrez ha recordado que España fue pionera en materiales compuestos y fibra de carbono en los 90 con una inversión de 350 millones de euros, que fue la cifra más alta proporcionada en ayudas, y que generó 35.000 millones de euros, con lo que se partía de una situación "privilegiada".

Según ha explicado, actualmente existen decenas de millones de euros en ayudas distribuidas de forma importante en pequeñas ayudas. Por ello, ha reivindicado que la industria de la Defensa demande en España una contribución mayor al PIB (del 2% frente al 0,9%).

Tenemos una capacidad todavía envidiable en Europa y en el mundo que tenemos que proteger como el mayor activo en nuestro tejido industrial", para reivindicar que Airbus quiere seguir estando ahí. Para Gutiérrez el reto del sector industrial en en España es la contribución al PIB del 14%, que si se suma el energético alcanza el 18%, todavía lejos de países como Alemania que roza el 30%.

En esta línea, Gutiérrez ha incidido en que Europa lleva años sufriendo "una reducción presupuestaria considerable" ante incertidumbres y crisis geopolíticas, a las que se añade el 'Brexit'. Por ello, ha reivindicado que es ya el momento de plantear una defensa política común en Europa donde países como Francia y Alemania ya han dado pasos con proyectos como el 'Eurodrone' o la Política Europea de Seguridad y Defensa PESCO (en sus siglas en inglés).

EL A400M, EN "LA SENDA DE LA ESTABILIDAD".

Cuestionado por la evolución de las ventas del A400M, el avión de transporte militar que se ensambla en Sevilla, el responsable del negocio militar de Airbus y máximo directivo de la compañía en España ha asegurado que el programa ha entrado en "un senda de estabilidad", evitando concretar, tras años de turbulencias y un 2018 en el que se cumpliron objetivos.

Airbus firmó en diciembre un nuevo acuerdo con ajustes de plazos en entregas y costes con los siete países clientes y lanzadores del programa, entre ellos España. El nuevo contrato contempla una producción de 15 aeronaves este año, de once en 2020 y de ocho en 2021, con la posibilidad de mantener o elevar la producción a las once unidades en cualquier momento, para mitigar los riesgos asociados al futuro del programa.

Gutiérrez ha dicho que lo mejor que puede pasar con este programa es que "empieza a ser aburrido", con la concreción de entregas y las nuevas capacidades, con lo que lo único que queda por hacer es "volar mucho", al tiempo que ha celebrado que los operadores hablen "maravillas" del avión. También ha recordado que España, que cuenta con cuatro A400M, recibirá otros dos este año.

El directivo ha señalado que Airbus, que este año cumple su 50 aniversario, es "de las cosas que funcionan bien en Europa" y ha defendido que cuenta con una cartera de 8.000 aviones comerciales, que grantiza la producción para los próximos 10 años "si se hacen las cosas bien", con un ritmo anual de entregas de 800 unidades.

LA DIGITALIZACIÓN, UN RETO.

En este sentido, Gutiérrez ha apuntado que no se puede ignorar que hay una cuarta revolución industrial en marcha, que ha denominado 4.0, en la que habrá problemas para identificar el modelo aplicado al sector naval y de Defensa y en las relaciones con los sindicatos, pero que es "vital".

En cuanto a la transformación digital, indicó que se basa en tres elementos: ser más digitales para ser más eficaces y competitivos para en definitiva, "ser más baratos", reduciendo a la mitad los ciclos de producción, tanto en el ámbito de defensa (que puede llevar diez años) como en el civil (4 ó 5 años) y utilizando la gestión de datos y algoritmos para predecir lo que va a ocurrir.

Al respecto, el directivo ha defendido que si hay "un sector resiliente" a las crisis es el de la industria y ha abogado por la formación en digitalización e innovación, como motor de cambio r impulso a la competitividad para "abordar la transformación digital" y contar con "empresas más eficaces". Para ello, señaló que "Europa es el camino, el de aunar esfuerzos".

Gutiérrez ha reiterado además que la situación del sector es "muy fragmentada" y requiere de "compras más inteligentes", para consolidar no solo la industria sino tamién las políticas de adquisición. Así, recordó que en Europa existen 38 modelos diferentes de vehículos militares y doce tanqueros, mientras que en Estados Unidos existen nueve y cuatro, respectivamente.

Por ello, consideró que proyectos como el programa conjunto MMF (Multinational Multi-Role Tanker Transport Fleet) al que se han unido Alemania, Noruega, Países Bajos, Bélgica y Luxemburgo, para adquirir y operar una flota de aviones de cisterna y transporte a Airbus, con las aeronaves A330-200 MRTT, son un buen ejemplo de dichas políticas.

Finalmente, indicó que la cadena de suministro también debe adapartse a la digitalización y "tomársela en serio" para poder mantener cadencias de producción como las del A320 (de 60 aviones al mes), "en cuanto la cadena de suminirstro aguante" y sincronice sus procesos con la industria.

"INVERSIONES INTELIGENTES".

De su lado, la presidenta de Navantia, Susana Sarriá, ha coincidido en señalar que el crecimiento económico debe ir de la mano de la capacidad industrial, con empleo formado y cualificado, para un sector como el naval y el aeronáutico con enorme potencial de exportación.

No obstante, coincidió en que España todavía tiene "un camino que recorrer", aún siendo uno de los más innovadores, en un mercado "muy reducido y proteccionista por su propia naturaleza", como lo demuestra el hecho de que en los últimos años la contratación naval se ha reducido más de un 35%.

Sarriá se refirió al reciente contrato de fragatas firmado con Defensa, que supone para la compañía pública una "palanca de la transformación digital" de la compañía, uno de los pilares de su Plan Estratégico 2018-2022, aprobado en diciembre, con el que espera potenciar la transformación de los astilleros a partir de la digitalización como herramienta fundamental de sus procesos, productos y modelo de negocio, modernizando las instalaciones para los nuevos programas (Astillero 4.0).

Según dijo, permitirá trabajar con simulaciones en entornos complejos con un 'barco digital' y "sin el coste y riesgo" que supondría en el buque real, así como avanzar en el adiestramiento de personal y en el mantenimiento predictivo, a través del 'Big Data' o de la Inteligencia Artificial.

Para concluir, afirmó que también se requiere de un nuevo marco de relaciones laborales y de un rejuvencimiento de la plantilla, además de "mesura" e "inversiones inteligentes" para llevar a cabo proyectos que "puedan aterrizar en los astilleros" y "seguir siendo una empresa puntera y competitiva".