Del premio a la cuenta de resultados

El proceso. Los ganadores de las distintas ediciones de Startup Weekend se han lanzado al mercado con éxito, pese al hándicap de la financiación y la masificación que impera de ‘apps’

24 abr 2017 / 14:55 h - Actualizado: 24 abr 2017 / 20:57 h.
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  • Integrantes de la empresa sevillana Oblumi. / El Correo
    Integrantes de la empresa sevillana Oblumi. / El Correo
  • Equipo sevillano de The Klouters, plataforma exclusiva de venta para ‘influencers’. / El Correo
    Equipo sevillano de The Klouters, plataforma exclusiva de venta para ‘influencers’. / El Correo
  • Miembros de Ciclogreen, aplicación que permite lograr descuentos o premios por tener una vida saludable. / El Correo
    Miembros de Ciclogreen, aplicación que permite lograr descuentos o premios por tener una vida saludable. / El Correo

Google, Twitter, Facebook, Tuenti, Privalia o Instagram no nacieron de un Startups Weekend, pero son ejemplos de startups que se han convertido en gigantes mundiales. Aunque en Sevilla sean pocas las empresas conocidas más allá de Abengoa, Ayesa, Persán, Azvi o Cruzcampo –ya Heineken–, lo cierto es que existe un buen puñado de firmas que triunfan y que, en la mayoría de los casos, son fruto del emprendimiento y la innovación de personas con un sueño o una idea.

Echando la vista atrás, los Startups Weekend han dado mucho de sí. Precisamente Oblumi –que conecta un termómetro digital de infrarrojos con múltiples funcionalidades al smartphone– fue una de las ideas premiadas en Sevilla Startup Weekend, iniciativa de emprendimiento de la que han salido proyectos de éxito como Ciclogreen, una aplicación que permite lograr descuentos o premios por tener una vida saludable; Ask Vicente, el primer asesor gastronómico virtual del mundo por Whatsapp, y The Klouters, plataforma exclusiva de venta para influencers. Todas estas ideas llegaron sin forma a distintas ediciones de Sevilla Startup Weekend y se convirtieron en negocios con un importante componente tecnológico.

Pero hay más. Indieye, Groupifly, Bagfly, Fitsweet, Oh My Data! o Youfeelm. ¿Qué ha pasado con ellas? ¿Cómo les va? El proceso desde que una idea gana un concurso hasta que cuaja en el mercado es largo, siendo la obtención de la financiación la etapa más complicada. Eso sí, algunos incluso ha conseguido un socio capitalista del mismo jurado del Startup Weekend.

Tecnología para la salud

En el caso de Oblumi, Miguel Ángel Martín explica que tras ganar el segundo Sevilla Startup Weekend en noviembre de 2013 los cuatro integrantes del equipo dejaron sus trabajos –dos de ellos llevaban más de quince años en el sector de la aeronáutica– porque para responder al inversor privado hay que estar «al cien por cien» con el proyecto y «arriesgar igual que él».

Durante todo 2014 buscaron financiación y en 2015 crearon el producto y salieron al mercado. Ahora son 12 personas (en los momentos de mayor producción llegaron a ser 17) y ya venden en Francia, Italia, desde hace unos meses en el Reino Unido, así como en Colombia y Chile. El objetivo, de hecho, es «ampliar el mercado en Europa y seguir creciendo». ¿Cómo? Con nuevos productos que aprovechan la conectividad del móvil con la familia y la salud. Del termómetro a otras aplicaciones que, por ahora, no quieren desvelar.

El canal de las farmacias, de la tecnología y de la puericultura distribuye su producto, que se puede encontrar en Media Markt, Amazon, Phone House o Vodafone.

Movilidad sostenible

Al igual que Oblumi, Ciclogreen ganó Sevilla Startup Weekend en 2013. Ahora es la sociedad limitada con cinco trabajadores que factura «bien» y con clientes por todo el país. Así lo explica uno de sus responsables, Gregorio Magno Toral, quien concreta que ya cuentan con doce clientes nacionales y que, desde el verano, han registrado un crecimiento exponencial gracias a un cambio en su modelo de negocio.

Sandetel, la Agencia de Obra Pública de la Junta de Andalucía, la Universidad de Cantabria, la de Oviedo, los ayuntamientos de Cuenca y Valencia y empresas como Comercial Global Payments están en la lista de clientes de Ciclogreen, plataforma que transforma los kilómetros recorridos en bici en puntos que se pueden canjear por descuentos y regalos. Casi 90.000 euros han recogido en premios de distintas instituciones y empresas. Tras hacer una campaña de crowdfunding de 5.000 euros para lanzar la app para los móviles, Ciclogreen tiene abierta una ronda de inversión de 150.000 euros que le permitirá su expansión internacional, proceso que ya ha empezado. Y es que, 2018 será «el año de la internacionalización» de esta plataforma ahora privada para universidades, empresas e instituciones que quieren promover el uso de la bici.

Gastronomía y turismo

Ask Vicente también fue una de las ideas ganadoras de Sevilla Startup Weekend, pero hoy se ha quedado como uno de los productos de Levelbots. Sus creadores, entre ellos María Romero, han hecho crecer la idea que hoy tiene unas perspectivas de futuro muy prometedoras.

A finales de mayo de 2015 Ask Vicente ganó el concurso de emprendedores, desde entonces, han encontrado la financiación de Tom Horsey –miembro del jurado de aquella edición del Sevilla Startup Weekend– y han lanzado varios productos. El primero, el propio Ask Vicente, el primer asesor gastronómico virtual del mundo por Whatsapp que, según comenta Romero, contó con peticiones de toda España desde su nacimiento. De hecho, incluso aceleraron su expansión por al Algarve portugués. Eso sí, el hecho de que Whatsapp no sea abierto para los negocios hizo que el servicio lo lancen ahora por Messenger.

Pero no se han quedado ahí. Levelbots también ofrece Güelcom, que hace lo mismo que Ask Vicente pero no en gastronomía, si no en alojamientos turísticos. «Los dueños de estos pisos o casas por su Facebook pueden crear un asistente virtual para hablar con sus huéspedes», explica Romero.

Levelbots ya factura y tiene un reto claro: «Posicionarnos a nivel internacional como desarrolladores de chatbot en español, porque hay pocos y en otros idiomas existen muchísimos».

Pero no todas las startups o empresas de reciente creación de contenido tecnológico tienen la misma maduración. El pasado año el Sevilla Startup Weekend encumbró a The Klouters, plataforma exclusiva de venta para influencers, y ahora sus artífices se afanan en encontrar financiación. Ya tienen la plataforma terminada, consiguieron ventas e incluso entraron marcas con las que han logrado colaboraciones con influencers, pero necesitan fondos para, entre otras cosas, poner en marcha una campaña de marketing, según afirma Patricia Martín.

Juegos, ocio y big data

Batió un récord de participantes e Indieye fue la ganadora. La edición del Startup Weekend sobre gamificación y videojuegos fue todo un éxito porque 40 ideas se presentaron y de éstas, diez consiguieron formar grupo con proyectos relacionados con el desarrollo de juegos de realidad virtual aumentada, rutas turísticas basadas en la gamificación, juegos interactivos de corta duración en paradas de autobuses hasta juegos que ayudan a personas con Alzheimer.

En el caso de la ganadora, Indieye, es un proyecto que pretende ofrecer packs reducidos de videojuegos independientes para móviles según temáticas (indi, arcades, puzzles, carreras, realidad virtual...). Pretenden dar más visibilidad al trabajo del desarrollador quien se ve penalizado por la saturación del mercado y, por otro lado, ofrecen nuevos juegos al usuario librándole de la masificación que impera en las plataformas.

Trece proyectos nacieron del Startup Weekend de gastronomía y turismo, en el que triunfó BagFly, una plataforma que pretende formar una red colaborativa de almacenamiento de maletas en espacios particulares o tiendas. Es decir, un Airbnb de consignas. Para no tener que cargar con la maleta cuando no se puede dejar en el hotel o alojamiento.

Carlos de Ory, que junto con Miguel Ángel Prada, Anastasia Zemlianskaia, Natalia Macho, Santiago Martínez y Carmen Romero forman el equipo de BagFly, también es uno de los artífices de Groupifly, que ganó otra edición con un portal para viajar en grupo en el que los usuarios pueden tanto publicar viajes como apuntarse a otros para ahorrar dinero.

Y para originalidad ¡Oh muy data!, plataforma que, usando el big data, realiza diseños personalizados en maillots de ciclista y otras prendas en función de datos personales. El sevillano Manuel Rúa, ingeniero informático de 26 años, es uno de los seis miembros de este equipo y asegura que las prendas llevarían una «imagen abstracta con algoritmos que la marca identifica con un código QR que el propietario de la prenda o cualquier persona puede descifrar y leer, obteniendo todos los datos y la historia vinculada a esa prenda». En el caso del maillot de ciclismo, ese logo podría relacionarse con tiempos realizados, pulsaciones... Todos aquellos datos que un pulsómetro o reloj inteligente, por ejemplo, aporte.

Y para impacto y apoyos, el de Youfeelm, que ofrecen la proyección de películas a la carta en salas de cine. Se crea el evento (película, hora y sala) y si hay un aforo mínimo sólo falta pagar la entrada. Se apoya a creadores emergentes o, simplemente, se reviven viejos títulos. ¿A quién le apetece ver Dirty Dancing o La Gran Ola otra vez en el cine?