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Línea móvil del fuselaje del C295 en la planta de Tablada, que sale con el 65% del equipado eléctrico. / J. L. Montero
Tras la decisión de Airbus Group de disminuir la cadencia de producción anual del C295 de 16 a 10 aviones y del A380 a 12, Airbus Group en España ha comunicado a los trabajadores y al comité de empresa que 360 empleados se verán afectados. En concreto, entre 180 y 210 personas serán recolocadas dentro de la empresa y de 150 a 180 trabajadores temporales no serán renovados o finalizarán sus contratos en 2017. Lo que aún no se conoce es cuántos de estos trabajadores son de las plantas de San Pablo, Tablada, Puerto Real, Getafe e Illescas.
Además, la reorganización de Airbus por la integración de su división de aviones comerciales podría suponer la supresión de entre 750 y 1.000 puestos de trabajo, según las valoraciones de los sindicatos tras las primeras reuniones con los comités de empresa, según informó el diario galo Les Echos. La multinacional no quiso comentar esas cifras porque está negociando con los sindicatos.
En España, la empresa informó al Comité Interempresas que toma estas medias por la «situación del mercado» y tras la decisión tomada de reducir la cadencia de producción del C295 y el A380. Por ello la compañía «está adaptando su nueva planificación de la carga de trabajo de manera acorde y aplicando las medidas de flexibilidad internas y externas disponibles en la empresa para gestionar este tipo de situaciones».
Así, «a través de la flexibilidad interna y las posibilidades que tenemos de trabajar en las distintas ubicaciones de Airbus Group, donde tenemos programas con incremento de carga, estimamos encontrar soluciones internas y recolocaciones para unas 180-210 personas». La compañía, además, también prevé que no renovando y con la finalización de contratos temporales, podrá afrontar el resto (150 a 180 personas), señala Antonio Lasaga, director de recursos humanos de Airbus Group España, en una misiva enviada a los propios trabajadores.
En esta carta, en la que se explica el impacto estimado que tendrá sobre la plantilla en 2017, también se detalla que aunque en los últimos tres años el C295 ha tenido mucho éxito, ahora tienen que abordar «el entorno y las actuales previsiones de ventas para el próximo año y para 2018». «Este segmento específico del mercado siempre ha sido cíclico y tenemos una magnífica trayectoria de adaptación al mismo. Si bien es cierto que algunas previsiones son buenas, éstas aún no se han materializado y, en este punto, había que tomar una decisión», prosigue. Así, añade Lasaga que esperan alcanzar las previsiones de ventas, que prevén obtener nuevos contratos en 2017 y 2018 con entregas en 2019, y estar en un «escenario de incremento en 2019 y siguientes». De forma paralela, y como parte de la estrategia de crecimiento de Airbus Defence and Space, «estamos desarrollando nuevas versiones del C295, creando nuevos mercados y estimulando el incremento de la demanda de nuestros productos». El C295 continúa siendo líder de mercado en su segmento y está perfectamente posicionado para aprovechar las oportunidades tan pronto como el mercado se recupere, añade.
Sobre el A380, Airbus anunció en julio su decisión de fijar un nuevo objetivo de planificación industrial de 12 aviones al año a partir de 2018, por lo que cree necesario adaptar la producción para satisfacer la demanda actual, pero manteniendo todas las opciones abiertas. «El A380 ocupa un lugar especial: a los pasajeros les encanta, las aerolíneas se benefician del potencial de ingresos extra y los aeropuertos agradecen la capacidad adicional. En Airbus creemos en el A380 y en su mercado potencial», concluye Lasaga.