Menú

El FMI rebaja la previsión de crecimiento de España al 2,6%

La institución que dirige Christine Lagarde suaviza una décima su pronóstico para 2016, pero mantiene al país por encima de la media de la zona euro

12 abr 2016 / 20:14 h - Actualizado: 12 abr 2016 / 21:00 h.
"Economía","Finanzas","Crisis","Macroeconomía","FMI"
  • Miembros del Fondo Monetario Internacional, ayer en la sede en Washington. / Jim Lo Scalzo (Efe)
    Miembros del Fondo Monetario Internacional, ayer en la sede en Washington. / Jim Lo Scalzo (Efe)

España continúa al frente las grandes economías de la zona euro, con una expansión prevista del 2,6 por ciento para este año y del 2,3 por ciento para el próximo, pero verá «suavizarse» la tendencia alcista de los últimos semestres, adelantó ayer el Fondo Monetario Internacional (FMI).

«El crecimiento en España se proyecta que se suavice, aunque se mantenga por encima de la media de la zona euro», afirma el FMI.

Estas cifras están incluidas en su informe de Perspectivas Económicas Globales, divulgado ayer al inicio de la reunión de primavera del organismo y el Banco Mundial (BM). Los datos suponen una rebaja de una décima respecto a lo anticipado en enero pasado para este año y dejan sin cambios las proyecciones para 2017.

Sin embargo, implican un cambio de tendencia en las previsiones del Fondo para la economía española, después de varios semestres consecutivos de revisiones al alza. El pronóstico de la institución dirigida por Christine Lagarde es inferior a las previsiones del Gobierno español, que situó el crecimiento para 2016 en el 3 por ciento.

España, pese a la tasa de paro, se mantendrá como la economía de la zona euro que más crece de las cuatro mayores, por encima del 1,5 por ciento de Alemania y del 1,1 de Francia (dos décimas menos que en enero), y del 1 por ciento de Italia (tres décimas menos).

La economía de la eurozona crecerá un 1,5 por ciento este año y un 1,6 por ciento en 2017, dos y una décima menos, respectivamente, de lo augurado tres meses antes. «La modesta recuperación de la economía del euro seguirá en 2016 y 2017, con la debilitada demanda externa compensada por los efectos favorables de los bajos precios de la energía, una leve expansión fiscal y condiciones financieras acomodaticias», indica el documento.

Pero, advierte, «el crecimiento potencial seguirá siendo débil, como resultado de los legados de la crisis». Por ello, recalca la importancia de ahondar en las políticas de estímulo monetario.

En una nueva arremetida contra Alemania, sin citarla, el Fondo asegura que los países con margen fiscal «no deberían esperar a utilizarlo» e insiste en que la inversión en infraestructura debe ser considerada «como atractiva».

España continúa al frente las grandes economías de la zona euro, con una expansión prevista del 2,6 por ciento para este año y del 2,3 por ciento para el próximo, pero verá «suavizarse» la tendencia alcista de los últimos semestres, adelantó ayer el Fondo Monetario Internacional (FMI).

«El crecimiento en España se proyecta que se suavice, aunque se mantenga por encima de la media de la zona euro», afirma el FMI.

Estas cifras están incluidas en su informe de Perspectivas Económicas Globales, divulgado ayer al inicio de la reunión de primavera del organismo y el Banco Mundial (BM). Los datos suponen una rebaja de una décima respecto a lo anticipado en enero pasado para este año y dejan sin cambios las proyecciones para 2017.

Sin embargo, implican un cambio de tendencia en las previsiones del Fondo para la economía española, después de varios semestres consecutivos de revisiones al alza. El pronóstico de la institución dirigida por Christine Lagarde es inferior a las previsiones del Gobierno español, que situó el crecimiento para 2016 en el 3 por ciento.

España, pese a la tasa de paro, se mantendrá como la economía de la zona euro que más crece de las cuatro mayores, por encima del 1,5 por ciento de Alemania y del 1,1 de Francia (dos décimas menos que en enero), y del 1 por ciento de Italia (tres décimas menos).

La economía de la eurozona crecerá un 1,5 por ciento este año y un 1,6 por ciento en 2017, dos y una décima menos, respectivamente, de lo augurado tres meses antes. «La modesta recuperación de la economía del euro seguirá en 2016 y 2017, con la debilitada demanda externa compensada por los efectos favorables de los bajos precios de la energía, una leve expansión fiscal y condiciones financieras acomodaticias», indica el documento.

Pero, advierte, «el crecimiento potencial seguirá siendo débil, como resultado de los legados de la crisis». Por ello, recalca la importancia de ahondar en las políticas de estímulo monetario.

En una nueva arremetida contra Alemania, sin citarla, el Fondo asegura que los países con margen fiscal «no deberían esperar a utilizarlo» e insiste en que la inversión en infraestructura debe ser considerada «como atractiva».