Ante la situación actual de crisis sanitaria causada por el coronavirus y la incertidumbre que genera en la economía del país, los trabajadores de la industria del libro muestran su preocupación por la supervivencia del sector. Editores, libreros y distribuidores comparten una tipología de pequeñas y medianas empresas que suponen un 70% del tejido industrial, y que se encuentran en riesgo de subsistir por las pérdidas económicas, estimadas en mil millones de euros, según la Asociación de Cámaras del Libro de España.
Tras conocerse la decisión del Consejo de Ministros de reducir el IVA de los libros electrónicos y la prensa digital a un 4%, las distintas entidades que forman parte de la industria del libro reclaman a las administraciones medidas urgentes de cara a las pequeñas y medianas empresas por su situación de vulnerabilidad. Entras las medidas solicitadas destacan el fomento de la compra en librerías de proximidad, facilidad de liquidez de las empresas y la incentivación del comercio a través de la adquisición de libros para bibliotecas públicas.
Librerías de barrio
Las pequeñas empresas son las más vulnerables por el volumen de pérdidas previstas, por lo que la Federación de Gremios de Editores de España reclama, en primer lugar, la modificación de la legislación del contrato menor, para que las bibliotecas públicas puedan comprar directamente a las librerías. Asimismo, los trabajadores del sector piden que se declare al libro como bien de primera necesidad, que se facilite el sistema de cheque libro en las familias, y que se ayude a las empresas en su desarrollo en el mercado exterior.
Por su parte, Verónica Durán, directora técnica de la Federación Andaluza de Librerías y codirectora de la Feria del Libro de Sevilla, le da prioridad a un cambio legislativo urgente para poner en valor las librerías. Verónica destaca que la ley actual de contratación pública deja fuera a la pequeña y mediana empresa del sector, por lo que desde la Federación pretenden que sean las librerías las que suministren a las bibliotecas a través de los contratos públicos.
Aumento de la piratería
Unido a la incertidumbre sobre el futuro de las pequeñas y medianas empresas de la industria del libro, destaca el problema de la piratería. Desde que se declaró el Estado de Alarma, se ha triplicado la descarga ilegal de libros, por lo que la Asociación de Cámaras del Libro de España solicita al Gobierno medidas para evitar que se difundan los contenidos de propiedad intelectual a través de páginas webs y dispositivos electrónicos.
Ante esta situación, la Asociación hace un llamamiento a la “responsabilidad de todos” para evitar acudir a las páginas de descargas ilegales de libros y, a su vez, anima a los lectores a hacer uso de plataformas colectivas y páginas webs oficiales de librerías.