La corta campaña del verdeo reduce los jornales a un tercio en el Aljarafe

En 2014 se trabajó casi 30 días y se recogieron 120.000 toneladas, frente a los menos de diez días y las 60.000 toneladas previstas para este año. El calor y los precios bajos hacen mella en la zona

27 ago 2015 / 22:32 h - Actualizado: 28 ago 2015 / 19:32 h.
"Agricultura"
  • Trabajador en el verdeo en una finca del municipio sevillano de Aznalcázar. / Javier Cuesta
    Trabajador en el verdeo en una finca del municipio sevillano de Aznalcázar. / Javier Cuesta

«La campaña ha sido bastante mala en el Aljarafe». Así de claro se mostró ayer Emilio Terrón, secretario del sector agrícola de UGT-Sevilla, sindicato que coincidió con la Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganaderos de Andalucía (Coag) en anunciar el arranque de la campaña de recogida de la aceituna de mesa. Y las previsiones son negativas por los efectos del calor de mayo y junio, la falta de lluvia y los bajos precios registrados en campañas anteriores, que han llevado al abandono de explotaciones.

Según Terrón, el pasado año en la principal comarca de aceituna de mesa, el Aljarafe, se recogieron 120.000 toneladas, mientras que las actuales previsiones rondan los 50.000 o 60.000 toneladas. «Más de la mitad de la cosecha de verdeo se perdió», lamentó.

En cuanto a los jornales, la campaña anterior se trabajaron entre 25 y 30 días, frente a los entre 6 y 10 días que durará el verdeo de este año. «Los jornales se han quedado en un tercio respecto a los del año pasado», sentenció Terrón, quien explicó que en la Sierra Sur sí hay mejor estimación.

En concreto, explicó a este periódico que en la Sierra Sur se prevé una producción que ronde las 100.000 toneladas, «similar a la anterior campaña». Eso sí, advirtió de que muchos empresarios «piensan no verdear esta aceituna y dejarla para el molino porque, dado los precios del aceite, quizás podría ser más rentable», algo que lamentó porque el verdeo «da más trabajo».

Para Terrón lo más importante es el empleo que se genera en el campo, de ahí que denunciase la «muchísima economía sumergida que existe». «Se está dando con demasiada frecuencia que el empresario solo declara las peonadas del primer día de trabajo y, si acaso, de algunos días más sueltos, pero no de todo lo trabajado» criticó, por lo que el sindicalista propone que se investiguen si las toneladas de aceituna que llegan a las cooperativas casan con las peonadas declaradas. «La situación es insostenible porque los afectados no pueden cobrar las prestaciones e incluso se da el caso de que algunos empresarios piden dinero por las peonadas», apostilló Terrón preocupado por la situación de los jornaleros, «en un absoluto olvido».

Antonio Rodríguez, responsable de aceituna de mesa de Coag-Andalucía, subrayó en declaraciones a este periódico el «problema estructural grave que sufre el sector porque no hay autorregulación». Si no reacciona la industria y paga lo suficiente, el agricultor optará esta campaña, según Rodríguez, por destinar su producción a aceite, dada la recuperación del precio este año y las malas previsiones de cosecha del oro verde.

¿Y cuánto debe recibir el agricultor por esta aceituna de mesa? Rodríguez apuntó que, según un estudio de la Junta de Andalucía, el coste de producción es de 90 céntimos en el caso de la manzanilla (que se recoge a mano), diez céntimos menos si se recolecta con máquina, mientras que la aceituna gordal debería pagarse a 1,10 euros. «El abandono es muy importante. Estamos por debajo del coste de producción y ya van muchas campañas», sentenció.

La variedad más avanzada en el verdeo es la gordal, que comenzará a recogerse la semana que viene, mientras las otras variedades, manzanilla y hojiblanca, se empezarán a recolectar a partir del día 10 de septiembre.

Coag coincide en que la cosecha será corta por la meteorología y los bajos precios de las anteriores campañas, así como señala que el calor y la falta de lluvia –en algunas zonas fue un 50 o 60 por ciento por debajo de lo normal– han provocado un «problema de aceituna agostada, arrugada, en un 30 o un 40 por ciento». Según los técnicos de esta organización agraria, el aforo estará muy por debajo de la media, no llegando a las 400.000 toneladas en todo el país.

Coag recomienda a los productores no vender su cosecha sin precio y exigir a las cooperativas con excedentes una gestión de autorregulación que tenga en cuenta la recuperación del precio del aceite. Defiende la necesidad de poner en marcha contratos tipo, el control del intrusismo y las figuras de calidad en la aceituna de mesa, como la que se está gestionando para la IGP manzanilla y gordal de Sevilla, y que se intentará trasladar a otras zonas y variedades de Andalucía.