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José Hernández (Cooperativa Virgen de Belén), José Leocadio Ortega, Antonio Sanz y Ricardo Serra. / El Correo
En Sevilla, desde 2013, se han reducido las denuncias por robos en el campo un 51,7 por ciento. Este año se han registrado ya 344 denuncias, 581 detenciones, 650 casos investigados y 284 reuniones con colectivos agrarios. Pero «queda mucho por hacer», reconoce el delegado del Gobierno de España en Andalucía, Antonio Sanz, quien avanzó en la XXXV Jornada de Aceituna de Mesa organizada por Asaja que habrá más efectivos en 2018 y se endurecerá la normativa para frenar las sustracciones y el transporte y la venta de productos agrícolas robados.
De hecho, aprovechó la cita en el antiguo seminario de Pilas, ahora residencial Lantana Garden, para presentar la nueva instrucción para la ordenación de la circulación, recepción y venta de productos en las campañas agrarias, con la que, atendiendo a las necesidades y demandas del sector y tras la reiterada petición de Asaja durante los últimos 14 años, luchar contra la comercialización de productos robados.
En Andalucía, durante este año se han rebajado las denuncias por robo un ocho por ciento, esto es, hubo 221 sustracciones menos. En total, se presentaron cerca de 3.000 denuncias, lo que da muestra de la importancia del problema.
Sanz adelantó que el próximo año habrá 5.000 policías y guardias civiles más y que se reforzarán los equipos Roca, si bien no concretó cuántos vendrán a Sevilla. Además, indicó que trabajan en un sistema de geolocalización de fincas y en la denuncia electrónica para acortar los tiempos de reacción y para que los agricultores y ganaderos presenten sus denuncias de forma más ágil y cómoda.
Y no sólo eso. Se prevé endurecer las sanciones. «Se van a intensificar las instrucciones a los agentes para exigir el cumplimiento de la Guía Conduce y si el gobierno de la comunidad andaluza no regula facultaremos a los cuerpos y fuerzas de seguridad para actuar». El objetivo es prevenir y combatir la comercialización y distribución de productos procedentes de robos en el campo, protegiendo con ello la propiedad y los derechos de los agricultores.
Según informó, esta iniciativa, recoge también una Guía Conduce (documento con el que los agricultores garantizan el origen legal de las aceitunas a la hora de transportarlas) y además contiene obligaciones y recomendaciones sobre las condiciones en que se debe desarrollar este transporte y la comercialización de los productos agrarios. Así, se recomienda que los conductores y transportistas «lleven autorización expresa para el transporte de la mercancía, expedida por la asociación o cooperativa correspondientes», y que el receptor de la misma «solicite al transportista un documento que acredite su legítima procedencia».
Así, el transportista tendrá que garantizar la procedencia legal de su carga y si no lo hace será sancionado. Sanz, además, hizo un llamamiento a la Junta para que regule esta materia. Si no lo hace, indicó, «ya estamos trabajando en lograr la efectividad de esa norma. En artículo 25.1 de la Ley de Seguridad Ciudadana se incluye el registro documental de información que puede dar cobertura a esa Guía Conduce y el artículo 14 da cobertura legal sancionadora», explicó.
En Sevilla operan cinco equipos Roca de la Guardia Civil con 22 especialistas «y un refuerzo de otros 15 agentes», dijo Sanz, cuya ubicación ahora se está redefiniendo.