«No creo en la inversión pública para emprendedores»

Las diferencias entre el sistema universitario español y americano o las posibles causas de los proyectos empresariales, ejes del debate

16 jun 2015 / 21:17 h - Actualizado: 17 jun 2015 / 10:44 h.
"Innovación","Emprendedores"
  • Foto de familia de todos los participantes en el Desayuno Cinco Nueves de Cobre las Cruces y El Correo de Andalucía. / Jesús Barrera
    Foto de familia de todos los participantes en el Desayuno Cinco Nueves de Cobre las Cruces y El Correo de Andalucía. / Jesús Barrera
  • El desayuno se celebró en la hemeroteca de El Correo. / Jesús Barrera
    El desayuno se celebró en la hemeroteca de El Correo. / Jesús Barrera

Una vez más los Desayunos Cinco Nueves se quedan justos de tiempo para abordar los múltiples temas que se abren, las numerosas preguntas que surgen, las ganas de hablar y dialogar. Y es que cuando se habla de un tema de interés como es el emprendimiento empresarial, cuando se comparten ideas, da igual el tiempo que se otorgue a la jornada, siempre se va a necesitar más.

Tras la interesante intervención que realizó el presidente de Lantia, Enrique Parrilla, Juan Román, director general de la Fundación Cobre las Cruces inició el turno de debate dirigiéndolo hacia las principales diferencias entre el sistema educativo español y americano. «Es un privilegio contar en este foro con su experiencia [refiriéndose a Parrilla] y sería interesante conocer las diferencias que tenemos con la cultura americana». «Las diferencias son devastadoras. Aquí se potencia demasiado la memorización y no el razonamiento práctico», aseguró Parrilla. No solo existen diferencias palpables en cuanto al sistema universitario, «pude crear mi primera empresa en 20 minutos y con 26 dólares, ellos tienen una sociedad encaminada hacia el emprendimiento», añadió al abordar cómo se emprende en Estados Unidos. El fracaso como punto de inflexión para aprovechar lo aprendido y reutilizarlo de cara a proyectos futuros salió varias veces a colación a lo largo de la mañana. «Un empresario no puede tener un éxito sin haber vivido el fracaso», apuntó Enrique Parrilla repetidas veces. En este sentido, la responsable del área de emprendimiento de la Cámara de Comercio, Adelaida Bravo, preguntó cómo era posible trasladar este positivismo a los emprendedores españoles y sevillanos. «Es una cuestión de autoestima, ante un fracaso hay que recapacitar y analizarlo», contestó el presidente de Lantia. En la misma línea, Susana López, directora provincial de la Fundación Andalucía Emprende, interpeló sobre qué se puede hacer desde las instituciones para que el fracaso no se convierta en un estigma. La respuesta fue clara: «Las instituciones no tienen por qué dar respuesta a todo, lo que tienen que hacer es facilitar la reentrada y crear mecanismos que agilicen el emprendimiento», contestó Parrilla. En cuanto al emprendimiento a nivel local en nuestra ciudad, Marcos A. Dorado, emprendedor de Compostgreen, refirió que aquí «no solo no tienes ayudas para emprender, sino que a veces se te lastra». Declaración muy en relación con la intervención de Jorge Robles, presidente de la Asociación de Jóvenes Empresarios de Sevilla, que dijo que «hay que cambiar el lastre social y cambiar nuestra manera de pensar en relación al emprendimiento». Aludido por las críticas al sistema educativo universitario, Francisco Javier Ramos, coordinador de formación de la UPO, replicó que «queda mucho por hacer, pero la universidad está viviendo un cambio de paradigma y tomando conciencia para acercarnos al mundo empresarial».

Para Ignacio Luque de la Jara, emprendedor de Yo Elijo el Precio, el problema principal está que aquí, si tienes una buena idea, hasta que no tenga una facturación adecuada no puedes contar con inversión privada. En EEUU pasa al contrario, la idea viene acompañada de una inversión privada y luego ya habrá lugar para la facturación. A lo que Parrilla fue tajante: «Es una cuestión de disponibilidad de capital. Aquí no hay grandes fortunas».

La última parte del desayuno se centró en hablar sobre las inversión pública a los emprendedores. «No creo en la inversión pública, es un error, el tiempo que inviertes en solicitar y que te concedan este tipo de subvención es mejor invertirlo en buscar tus propios clientes», apostilló Enrique Parrilla.