«Un hotel así le hace mucha falta a Sevilla»

César Pelli defiende que no se destine toda a oficinas y que, por lo menos a sus ojos, es «sevillana», un «sueño cumplido»

11 may 2015 / 09:00 h - Actualizado: 11 may 2015 / 09:14 h.
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  • El arquitecto César Pelli, en 2009, en su última visita a Sevilla. / Antonio Acedo
    El arquitecto César Pelli, en 2009, en su última visita a Sevilla. / Antonio Acedo

El arquitecto César Pelli tildó de «pueblerino» el debate que se abrió en la ciudad en enero de 2012 cuando el alcalde, Juan Ignacio Zoido, pidió a Cajasol la paralización cautelar de la obra. Tres años después, en otra entrevista concedida a este periódico, Pelli desde New Haven, en la estadounidense Connecticut, se muestra orgulloso de ver «un sueño cumplido».

«Estoy encantado con la forma que la torre ha tomando y se cumple mi sueño de ver este edificio tan hermoso al otro lado del río Guadalquivir, del centro de la ciudad de Sevilla», asegura.

El prestigioso arquitecto internacional, padre de las Torres Petronas, en Kuala Lumpur –que desde 1998 y hasta mediados de 2003 fueron los edificios más altos del mundo– espera venir a Sevilla «en un futuro cercano», si bien no aterriza en la ciudad desde los comienzos de la obra. Por ahora, una de sus socias viaja a la capital andaluza «unas seis veces al año y me trae siempre muchas fotos e información muy clara y detallada del progreso de las obras».

En cuanto a los trabajos, Pelli dice que ya han terminado, aunque la fecha de inauguración «es una decisión de Caixabank».

Sobre el resultado, indica que está «encantadísimo con el trabajo y con el carácter del edificio y cuán sevillano parece, por lo menos a mis ojos». No hay que olvidar que César Pelli propuso el color terracota para los parasoles que complementan las ventanas del rascacielos precisamente para darle el color de las macetas de barro de Sevilla, un toque andaluz que ha calificado en muchas ocasiones de único. En un primer momento esos parasoles se diseñaron en un material porcelánico, pero finalmente por seguridad, según informó Caixabank, se optó por el alumnio, eso sí, respetando el color elegido por el arquitecto. De esta forma, la torre de 178 metros de altura no se muestra como un todo de cristal, diferenciándose de otras obras de Pelli como la Iberdrola de Bilbao o la Cristal de Madrid.

En cuanto a las modificaciones introducidas en el proyecto, Pelli afirma en la entrevista que sí se han aprobado «muchos cambios» que, añade, «son siempre necesarios cuando un proyecto se desarrolla y se hace real».

«El cambio más grande es que nosotros diseñamos un edificio todo de oficinas y ahora parece que también podría ubicarse un hotel. Estoy realmente encantado con esta idea si al final llega a materializarse porque creo que un hotel de estas característica hace mucha falta en Sevilla».

Por ahora, eso sí, la Junta aún no dio la autorización, por problemas técnicos, para que Hotusa (la cadena hotelena catalana elegida por Caixabank) abra un establecimiento de cinco estrellas en lo más alto de la torre.