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El alero serbio del Valencia Basket, Vladimimr Lucic, pasa el balón ante los del Sevilla, Ondrej Balvin y Hakanson. / Efe
Casi habría que decir que mereció la pena esperar que la primera victoria fuera del San Pablo de 2016, la primera desde noviembre llegase al noveno intento. Porque fue una obra magnífica de Baloncesto Sevilla, que ofreció en la Fuente de San Luis, la pista del segundo clasificado de la Liga Endesa, un recital de baloncesto. Es una delicia ver a un equipo así, simultaneando en su máximo nivel de rendimiento el trabajo colectivo, el principal, y las aportaciones e iniciativas individuales. Desde hace dos meses viene en progresión el equipo de Casimiro, que ha encontrado las dos piezas perfectas que incluir en su chirriante engranaje, Hakanson y Jordan, para convertirse en un mecano tan armónico como letal. Excelente en defensa y en ataque, sólo algunos problemas en el rebote defensivo al final, y cierta ansiedad por verse tan cerca de un triunfo tan esperado, retrasó la culminación de una victoria, la décima, que le deja más cerca del play off que del descenso.
Ya la puesta en escena fue excelente y le fue dando continuidad y continuidad, pero en el recuerdo seguía latente esa serie de partidos fue de casa en la que no fue capaz de rematar en el último cuarto todo lo bueno que hizo en el resto. Tener el control del partido en la pista de Valencia Basket no es sencillo. Su defensa fue muy consistente, especialmente en lo concerniente al rebote, muy dinámica, con constantes ayudas, muy necesarias cuando juegas contra un equipo con tanto arsenal y jugadores muy versátiles. Cada jugador cajista tenía la vista en su par y en el del compañero que exigía al rival del balón. Y luego está Balvin, que crea un verdadero trauma a todo el que se aproxima al aro del equipo de Casimiro. Sus 217 centímetros provocaron numerosos errores en los ataques de Valencia, y como el rebote lo cerraban a la perfección, facilitaban transiciones rápidas que fueron balones de oxígeno cuando el marcador, en el que aparecía siempre por delante, se apretaba.
En ataque, Nachbar se puso el disfraz de asistente al principio. El esloveno, MVP de marzo, está confiado y da rienda suelta a su talento en múltiples facetas. Fluido el juego bajo la dirección de Hakanson, muy templado casi cada ataque, con un plan cada vez, y sin perder los nervios cuando Valencia lograba parciales que le arrimaban a un marcador que llegó a mostrar una máxima de 11 puntos a los sevillanos (22-33), que se fueron al descanso con 37-44 y un partido perfecto de Balvin: 20 de valoración con 10 puntos sin fallo y 6 rebotes. Y 61 de todo el equipo, por los 33 de Valencia.
El estado de ánimo y la confianza en su nivel actual de juego llevó a Baloncesto Sevilla a responder una y otra vez a las acometidas toronja. Se volvieron a arrimar (41-44) y llegaron los triples de Berni Rodríguez, y minutos de nuevo de iluminación de Hakanson, el sueco asombroso de solo 18 años. Los sevillanos tenían respuesta para todo y no desaprovechaban una sola oportunidad. En ataque, Valencia, que ostenta la segunda defensa de la liga, sólo podía parar el juego con faltas, pero en los tiros libres se mostraba perfecto hasta el 14 de 14. El dos más uno de Stefansson con que se remató el tercer cuarto (57-64) sembró una duda en el espectador que no tenían en su mochila los jugadores de verde y rojo. Aparecieron Alfonso Sánchez y Jerome Jordan, demostrando éste el acierto de su llegada. Puso un tapón enorme a Hamilton, en minutos en los que los interiores valencianos empezaban a tomar la iniciativa, y luego se buscó sus canastas sin rubor en ataque, recibiendo faltas que transformó desde el tiro libre. Y entonces Baloncesto Sevilla se despegó hasta los 17 puntos, con buenas acciones también de Miljenovic (65-82).
San Emeterio condujo el último estertor de orgullo de Valencia, que hizo daño en el rebote ofensivo, Baloncesto Sevilla sintió cierto vértigo y cometió algunos errores en ataque (77-84), pero rápidamente dio el golpe definitivo al partido con tres canastas de Sánchez, Hakanson y Balvin aprovisionadas por tres buenas defensas.
Baloncesto Sevilla ha ganado en las últimas semanas a Laboral Kutxa, Herbalife Gran Canaria y Valencia Basket, tres de los cinco primeros de la liga. Ha acabado en la Fonteta con 121 de valoración, seis jugadores en dobles figuras en este apartado y todos en positivo. Enorme.
FICHA TÉCNICA:
82. Valencia Basket (18+19+20+25): Diot (8), Rafa Martínez (11), Lucic (0), Sikma (4), Hamilton (16) -cinco inicial-, Stefansson (5), Sato (2), Dubljevic (11), Vives (7), San Emeterio (15), Shurna (3).
92. Baloncesto Sevilla (22+22+20+28): Hakanson (11), Bamforth (16), Berni Rodríguez (8), Nachbar (6), Balvin (14) -cinco inicial-, Sánchez (9), Miljenovic (8), Oriola (6), Henton (5), Jordan (9).
Árbitros: Arteaga, Sánchez Montserrat y Sánchez Mohedas. Eliminaron por faltas a Vives y Jordan.
Incidencias: partido de la jornada 26 de la Liga Endesa disputado en el pabellón Fuente de San Luis de Valencia ante 7.800 espectadores.