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Miljenovic y Oriola se abrazan en el partido ante Tenerife. Foto: B. Pérez (ACB Media)
Muy lejos queda el inicio de temporada con un 0-4 en el balance. Baloncesto Sevilla ha encontrado una buena estabilidad en su juego, fruto de la incorporación paulatina a un nivel de rendimiento adecuado de jugadores que van ganando peso. De esta forma, la responsabilidad se puede repartir y el equipo se convierte en eso, en más equipo, menos previsible para los rivales, como ocurría en las primeras jornadas, cuando la suerte estaba localizada en las manos de Bostjan Nachbar y de Scott Bamforth.
MILJENOVIC: 13 puntos
El problema de los bases va quedando en el olvido, primero porque el magnífico papel de Berni Rodríguez ha surtido de la tranquilidad necesaria a toda la estructura de juego para que así Nenad Miljenovic pudiese ir superando etapas en su tiempo de adaptación. El serbio tuvo ante Iberostar Tenerife su primera explosión en esta liga, que ya venía anticipando en las victorias ante Joventut (7 puntos, 4 rebotes, 3 asistencias, 13 de valoración) y Gipuzkoa (8 puntos, 3 rebotes, 12 de valoración). Ante los canarios, con la baja de Scott Bamforth, estuvo iluminado. Debajo de sus 24 puntos y 29 de valoración, hizo un 54% en tiros de dos y un 2 de 2 en triples, cuando llegaba a la ACB con el hándicap de sus pobres porcentaje en tiros de distancia. Va mejorando en ello, como en defensa (4 balones recuperados), y en control del juego (sólo un balón perdido en 31 minutos).
ORIOLA: 16,3 puntos
No sólo un gran día, el del Joventut (23 puntos, 9 rebotes, 35 de valoración). El ala-pívot catalán mantiene una línea sobresaliente en los últimos partidos, y su enorme actividad le sirve para acaparar muchos minutos que en principio corresponderían a Nachbar. Ante Tenerife así fue, y es obvio que lo mereció: 17 puntos con 4 de 5 en tiros de dos y 2 de 3 en triples, ninguna pérdida y 17 de valoración. En la victoria ante Gipuzkoa aportó 9 puntos y 8 rebotes. En las tres últimas victorias su media es de 16.3 puntos y 21 de valoración.
HENTON: 16,6 puntos
Al estadounidense le ha costado llegar pero ya está aquí. Como sucedió con Miljenovic, la calidad se le observó pronto, otra cuestión era que lograra competir como exige la ACB. Y el puesto de alero es complejo. Ante Tenerife no solo aportó puntos (17), como ante oventut (22) o Laboral (13), sino que lo hizo en fases cuando el balón quemaba y con excelente porcentaje en triples (3/4). Y como exige su puesto, y le pide Casimiro, colaboró en el rebote (7). Promedia 16,6 puntos en los últimos tres partidos.
BERNI: 26 asistencias
El maestro imparte lecciones de baloncesto cada día. En los últimos tres choques promedia 8,6 asistencias, con una media de 4 en la liga que le convierte en el décimo mejor pasador de la competición. Mejora los registros de su larga carrera en esta faceta. Todo un ejemplo y tal vez el jugador más trascendente.
NACHBAR Y BAMFORTH
La progresión de Oriola, Miljenovic y Henton no ha significado una caída de la aportación de los líderes naturales del equipo en el juego ofensivo. Es cierto que Nachbar no ha vuelto a los números del día de Unicaja (30) o incluso de Murcia (28), pero en cuatro de los cinco últimos encuentros ha seguido en dobles dígitos, con una media de 11,8. Scott Bamforth fue clave en las victorias en San Sebastián (18+8) y ante Joventut (14+4). En seis de los últimos siete partidos que ha jugado ha hecho dobles figuras de anotación, con 13,8 puntos, 3,8 rebotes y 2,5 asistencias.
EL CALENDARIO Y LA COPA
La victoria ante Iberostar Tenerife deja al Baloncesto Sevilla a un triunfo de la sexta plaza, engrosando un grupo de cinco equipos con balance de cinco victorias y siete derrotas. De ellos, es el que peor average general tiene. Quedan cinco partidos que decidirán los ocho participantes en la Copa del Rey de Coruña, en el que Obradoiro, décimo igualado a los de Casimiro, tiene plaza segura como anfitrión. Por tanto, la garantía está en acabar al menos séptimo. Ese lugar lo ocupa Andorra, al que los sevillanos visitarán el 16 de enero. Después (24 enero) viene Manresa, octavo con 6-6, como los de Joan Peñarroya. Para alentar el sueño, el CB Sevilla debería ganar mañana en la cancha de Estudiantes, penúltimo, y hacerlo en San Pablo ante el CAI (3 de enero), antepenúltimo. A continuación visitará al Madrid. Si consigue un 4 de 5 alcanzaría las 9 victorias y estaría en la pomada. Difícil pero no imposible.