El Grupo Torrot perfila la compra del CB Sevilla

La empresa catalana quiere asentarse en la ciudad y añadiría la apertura de un proyecto industrial, con una inversión global de 13 millones

25 jun 2016 / 15:59 h - Actualizado: 26 jun 2016 / 08:27 h.
"Baloncesto","Baloncesto Sevilla"
  • Iván Contreras, director general del Grupo Torrot Electric.
    Iván Contreras, director general del Grupo Torrot Electric.

El Grupo Torrot, compañía dedicada al desarrollo, industrialización y comercialización de bicicletas y ciclomotores eléctricos, como eje principal, que no único, de su negocio, figura como principal opción para convertirse en propietario de Baloncesto Sevilla. Este grupo catalán, con sede en Mataró, ha propuesto a Caixabank la compra de la entidad deportiva dentro de un amplio plan que incluye la apertura de sede en Sevilla para desarrollar un proyecto deportivo, industrial y tecnológico con una inversión global de 13,5 millones de euros.

Iván Contreras es el director general de Torrot Electric, compañía que en 2015 rescataba a la conocida marca de motos Gas Gas, en situación de concurso de acreedores y a la que inyectó alrededor de 15 millones de euros (logró mantener 55 puestos de trabajo de 89 y creó una bolsa de reincorporación de otros 25 empleados) con el apoyo del grupo inversor Black Toro Capital, que entró a formar parte del accionariado de la compañía. Resulta que Torrot Electric también está participada por el Instituto Andaluz de Tecnología (IAT), con sede en la isla de La Cartuja, y que ha diseñado y desarrollado un prototipo de moto eléctrica que ahora entra en su fase de desarrollo industrial para la comercialización. El Grupo Torrot y el IAT quieren que la fabricación se realice en Sevilla (la otra opción es Cataluña, con gran tradición en esta industria), donde la compañía quiere implantarse, aprovechando también la propiedad del Baloncesto Sevilla como altavoz publicitario y activo de imagen a nivel nacional.

La familia Contreras tiene previsto realizar en el club una inversión inicial de 5,5 millones de euros, y dentro de su plan de negocio ha planteado a Caixabank la apertura de una línea de crédito para su plan global de inversión. Es en este punto donde las conversaciones han sufrido un parón.

Las negociaciones, según ha podido saber este periódico, se han desarrollado durante toda la temporada e incluso Iván Contreras ha estado en partidos del equipo de Casimiro en San Pablo. El Ayuntamiento de Sevilla ha estado al tanto de todo el proceso negociador, y ve con buenos ojos un proyecto que va mucho más allá del propiamente deportivo, dado que supone la implantación de un grupo industrial en la ciudad. Grupo Torrot espera llevar a buen término la negociación, y tiene la intención de cerrarlo antes del 30 de junio, con la idea de favorecer también la planificación deportiva, dado que ese día vencen los contratos de los jugadores.

La llegada del Grupo Torrot a la propiedad del Baloncesto Sevilla abre también la posibilidad de que el club tenga por fin estabilidad en la planificación deportiva. El desembarco de la empresa catalana no supondría desmantelar la estructura como sucedió hace dos años con el aterrizaje de Jefferson Capital, sino todo lo contrario. Después de recopilar y analizar toda la información del club, además en una situación inicial muy complicada por el poco tiempo para configurar el plantel, los gestores de Torrot Electric tienen la idea de contar tanto con Fernando Moral, presidente ejecutivo del club, como con Luis Casimiro. Ambos han llevado adelante con éxito al equipo en estas dos complejas últimas temporadas. Así, podrían llevar a cabo el plan ya trazado de mantener el mismo bloque de jugadores y afrontar dos o tres refuerzos, con el beneficio que ello supone, todo lo contrario a lo vivido en los últimos años. Eso, siempre que la negociación se cierre antes del día 30. Una incógnita a resolver es el papel de Berni Rodríguez. Sigue con ganas de jugar, pero la opción de que tome las riendas de la dirección deportiva estaría sobre la mesa.