Si en algo coinciden todas las convocatorias del seleccionador español, Luis Enrique, es en la polémica que estas generan entre sus aficionados. Basadas en un proyecto adaptado a una idea de juego, que difiere de los clásicos llamamientos meritorios, las plantillas del ex entrenador del FC Barcelona dejan ver algunos nombres que impactan a la audiencia. Dentro de esta controversia, un aspecto que ha llamado la atención de muchos ha sido la escasa participación de andaluces en estos proyectos.
A esta cuestión respondió en su momento Luis Enrique mediante una de sus irónicas respuestas: ‘‘Ahora que soy, ¿antiandaluz?’’. Lo cierto es que no sólo se podía pensar en andaluces que podían o no estar en su lista por el caso de aquel momento, el de Fabián, sino por otros nombres que también podrían defender la camiseta de ‘La Roja’. Lejos de pensar en veteranos que disfrutan de sus últimas gotas de fútbol, como pueden ser los icónicos capitanes de la capital, Joaquín y Navas, hombres como Luis Alberto, que ha disputado cerca de 45 partidos con el Nápoles durante la pasada campaña, o un Suso completamente recuperado de su lesión podrían ser potenciales futbolistas para ver en próximas convocatorias.
De otro modo, también hay luces que prometían brillar como ninguna y hace tiempo que se apagaron, como es el caso de Isco Alarcón: aquella esperanza en una selección obsoleta tras el mundial de 2014 que no obtuvo el recorrido que se esperaba. El malagueño estaba destinado a ser la ilusión de un equipo en plena reconstrucción tras un verdadero ‘trauma futbolístico’, pero no logró cumplir ese rol ni en su club ni en la selección. Un papel que quizá sí pueda ocupar otro andaluz -uno de los convocados-, Gavi.
Las mayores dudas a corto plazo recaen sobre uno de los eternos capitanes de la selección, Sergio Ramos, quien, según Deportes Cuatro, parece tener la idea en la cabeza de volver por todo lo alto para el Mundial. Un ambicioso objetivo para una leyenda en activo acostumbrada a superar más de un ‘imposible’ en este deporte. Esta vuelta sería beneficiosa siempre que sea meramente deportiva y no testimonial, pues ya se vio con Casillas y Pedro hace unos años que este papel no es necesariamente fácil de cumplir.
A fin de cuentas, todo lo que se pueda especular sobre posibles cambios en la plantilla sirve de poco ante un proyecto aparentemente sólido como es el de Luis Enrique. El seleccionador ya se encargó de demostrarle a medio país en la Euro 2020 que su criterio no es debatible, y parece querer continuar con esta idea para el Mundial. Sin embargo, como él asegura, la Selección está ‘‘en constante cambio’’, y los nombres citados en este escrito podrían aparecer en un futuro no demasiado lejano.