Desde que en una noche memorable para el fútbol español Andrés Iniesta convirtiese a la selección española en campeona del mundo en el Soccer City de Johannesburgo, el 11 de julio de 2010, han pasado 4.268 días, un tiempo en el que en cada convocatoria de España hubo al menos un representante de la 'generación de oro'.
El descanso que Luis Enrique Martínez ha decidido dar a un jugador que sigue siendo el timón de la selección española, Sergio Busquets, ha provocado que por primera vez en once años y ocho meses no haya ningún campeón del mundo en la convocatoria, la ofrecida para los dos primeros amistosos de 2022 que la Roja disputará ante Albania e Islandia.
De los campeones de Europa en 2012, con la exhibición en la final de Kiev ante Italia, tan solo queda un representante. Es Jordi Alba, que marcó en aquel partido que cerraba un ciclo de dominio español en Europa y el mundo de cuatro años de duración inigualables.
El tiempo vuela y se siente más en las cortas carreras de los futbolistas. Ya retirados de los 23 campeones del mundo leyendas como Iker Casillas, Carles Puyol, Xavi Hernández, Fernando Torres o David Villa. También dejaron el fútbol tras etapas de éxito Víctor Valdés, Carlos Marchena, Joan Capdevila, Álvaro Arbeloa y Xabi Alonso.
TRECE CAMPEONES DEL MUNDO SE MANTIENEN EN ACTIVO
Junto a Busquets, el único que sigue siendo un fijo en los planes del actual seleccionador, podrían ser seleccionados hasta doce campeones del mundo, aunque las opciones de los que, como Andrés Iniesta, emigraron a ligas menores, se redujeron desde que decidieron dar un giro a su carrera en la recta final. Es el caso de Javi Martínez.
Algunos anunciaron su adiós a la selección como David Silva y Gerard Piqué, que ahora flirtea con un posible regreso para el Mundial de Catar. Otro central, Raúl Albiol, ha contado hasta hace pocos meses, y más lejos queda ya la última internacionalidad de Jesús Navas o Sergio Ramos. Más aún la de Pepe Reina, Cesc Fábregas, Juan Mata, Pedro Rodríguez o Fernando Llorente.
UN GOLPE INESPERADO POR DE GEA
Después de ceder la titularidad a Unai Simón y asumir el papel de segundo portero, llega un momento inesperado para David de Gea. Fuera de la lista, descartado por Luis Enrique Martínez pese a sus buenas actuaciones con el Manchester United. Tras 45 internacionalidades y recoger el testigo de Casillas. Debutó con la absoluta en junio de 2014, ante El Salvador, pero se hizo con la portería desde 2016.
Ya había demostrado el seleccionador que no habría espacio para el debate y que su portero es Unai Simón. El último partido disputado por De Gea con la selección española fue en octubre de 2020. Una derrota ante Ucrania. El relevo en la portería es un hecho y ya no queda ninguno de los guardametas que estaban a la llegada de Luis Enrique. Primero fueron Kepa y Pau Torres. Ahora es De Gea el que da paso a una gran sorpresa, David Raya, portero del Brentford.
Sigue mandando el fútbol inglés en la portería, junto a Robert Sánchez dos de los porteros se han criado lejos del fútbol español. No hay espacio para Alex Remiro, Fernando Pacheco, Aitor Fernández o Edgar Badía.
EL DESEADO REGRESO DE PEDRI
Llevó el timón de España en una Eurocopa repleta de brillantez, apuntando por sus condiciones a convertirse en el heredero de Iniesta y desde entonces, el 6 de julio de 2021, las lesiones nunca le dejaron regresar. Aquel empate de semifinales ante Italia, con los penaltis de Wembley, fue el último de los diez partidos disputados por Pedri con la Roja.
Regresa en un momento dulce, enterradas las lesiones consecuencia de una temporada inhumana. Titular indiscutible en su primer año en el Barcelona y en su aterrizaje en la selección absoluta, saltándose varios pasos, disputando Eurocopa y Juegos Olímpicos. Luis Enrique recupera a un jugador clave en sus esquemas mientras espera con deseo el regreso de Ansu Fati.
Junto a Pedri vuelve el máximo goleador de la 'era Luis Enrique', un Ferran Torres que acude a su primera llamada como jugador del Barcelona, equipo más representado de la lista con cinco futbolistas, que serían seis con Busquets y siete si Adama Traoré se gana su regreso. La columna vertebral de la selección.