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Juan Muñoz celebra un gol en el duelo de Copa del curso anterior ante el Mirandés. / Efe -
Konoplyanka, durante un entrenamiento del ejercicio precedente. / Inma Flores
Son nombres propios en el Sevilla FC. El extremo ucraniano Yevhen Konoplyanka y el delantero utrerano Juan Muñoz representan la cal y la arena en el nuevo proyecto del argentino Jorge Sampaoli, que ha recuperado la mejor versión del ex del Dnipro durante el stage de Orlando y ha instado al canterano a buscar un nuevo destino en la calma veraniega de Sevilla. El SFC doblegó durante su estadía en América al River Plate y al Independiente de Santa Fe colombiano, envites en los que brilló con luz propia el de Kirovogrado. El atacante anotó un gol ante la escuadra millonaria y ante el plantel cafetero facturó otro tanto y firmó una asistencia que rentabilizó Kevin Gameiro, autor del 0-2 y otro de los protagonistas del estío.
El futuro de ambos es opuesto. Konoplyanka se ha ganado una dosis extra de credibilidad después de funcionar a pleno rendimiento en el carril siniestro del versátil 1-3-4-3 del argentino Jorge Sampaoli, mientras que Juan Muñoz, que en pretemporada solía brillar a expensas de su anhelada oportunidad, se ejercitaba en Sevilla junto al linarense Sergio Domínguez, uno de los encargados de la faceta física en la primera plantilla. El ‘9’, que ya con la expedición en la capital andaluza trabajará junto al grupo con total normalidad, busca hogar. El director deportivo, el isleño Ramón Rodríguez Verdejo, Monchi, ha decidido que, en caso de no sellar su adiós a préstamo, no intervendrá con el filial en Segunda División –Liga2–.
Konoplyanka anhela conquistar la confianza de Sampaoli en su segunda experiencia en el SFC, donde en el ejercicio precedente computó 32 encuentros de Liga, en los que acumuló 1.615 minutos. Fue titular en 15 compromisos, de los que sólo completó 7. Su fichaje se concretó después de varias semanas de tensiones y polémicas por la intromisión del Atlético. Su propio padre, Oleg Konoplyanka, viajó a Madrid para cerrar su aterrizaje en el Vicente Calderón, aunque la insistencia de Monchi fue decisiva. La marcha de Unai Emery, que recurrió a la adaptación para justificar su discreto rendimiento en algunos tramos del certamen doméstico, y el fichaje de Sampaoli han revalorizado su figura.
El caso de Juan Muñoz es diferente. El ‘9’ no viajó a Orlando y, salvo sorpresa de última hora, tampoco integrará la expedición que completará la segunda concentración en la ciudad alemana de Bad Schönborn. Es, junto a Cristóforo, uno de los señalados y su testimonial participación durante la 15-16 multiplica la complejidad de una cesión a un Primera División que garantice minutos. Su contrato expira en 2019 y la perla de Utrera, que en el cierre de julio de 2015 ejercía de killer estival, pretende recobrar la fe.