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Van der Vaart y Antonio Adán en un entrenamiento de la pasada temporada. / Manuel Gómez
Empieza la cuarta semana de la pretemporada del Betis y en su dirección deportiva continúan dando una y mil vueltas a cómo encajar a los descartados en algún equipo de la forma menos gravosa posible para las arcas heliopolitanas. Miguel Torrecilla está muy centrado en ese capítulo porque las posibles rescisiones de contrato, la última vía para sacar del club a esos futbolistas, repercutiría negativamente en la provisión de fondos para acometer los dos o tres fichajes que aún debe hacer, en especial el del mediocentro defensivo. El caso por antonomasia, sin olvidar a Vargas o Digard, es el de Van der Vaart, con dos años de contrato como verdiblanco, pero puede que en Dinamarca se le abra una nueva vía de escape. El conjunto interesado en hacerlo es el Midtjylland.
Fue el medio danés TV3Sport el que adelantó ayer que el Midtjylland está cerca de cerrar el fichaje del centrocampista holandés. De hecho, también ayer, Van der Vaar estuvo en uno de los palcos del MCH Arena, el estadio de ese conjunto nórdico, para ver su encuentro de Liga ante el Silkeborg.
Después del choque habló el director deportivo del Midtjylland, Claus Steinlein. Es quien aparece junto a Van der Vaart en las citadas imágenes. «Sólo quería ver nuestro estadio y conocer nuestro club. Su novia juega en esta zona y quería venir y verlo», explicó Steinlein a Eurosport. «Es más que bienvenido. Sería magnífico que pudiéramos traer a un jugador como Van der Vaart al Midtjylland», añadió el director técnico, que a continuación matizó la principal dificultad: «Va a ser complicado. Él también debe pensar en el dinero y hay varios clubes que pueden pagar su salario. La escala de salarios es muy diferente». El Midtjylland tiene razón, pero también va a ingresar unos 5 millones de euros por el traspaso de Pione Sisto al Celta, así que puede disfrutar de la liquidez necesaria.
Esa alusión de Steinlein a la actual pareja de Van der Vaart también es significativa. La joven es Estavana Polman, una jugadora holandesa de balonmano que milita en el Esbjerg danés. Y sólo hay 90 kilómetros desde Esbjerg a Herning, la ciudad donde juega el Midtjylland. Como dato también trascendental, Polman no está en Dinamarca sino en Río de Janeiro, ya que ha sido seleccionada por Holanda para los Juegos Olímpicos. Por tanto, Van der Vaart no estuvo ayer en Dinamarca por ella.